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A NIVEL MUNDIAL:
Ninguna parte del mundo estará exenta de los impactos del cambio climático mientras los océanos se calienten y las placas de hielo y glaciares se descongelen, causando un aumento acelerado en el nivel del mar hacia el año 2050.
Los cambios acelerados en los océanos y la criósfera (zonas en el planeta que están cubiertas de nieve y hielo) son dos de las consecuencias más dramáticas de la crisis climática. Así lo deja en evidencia un reciente informe dado a conocer por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El estudio, titulado “El océano y la crióstera en un clima cambiante”, deja claro que los cambios continuarán y serán irreversibles aun si el clima se estabiliza, lo que provocará que más de 1.000 millones de personas se vean afectadas, así como diversas especies de animales.
Por ejemplo, las especies polares dependientes de hielo como las morsas y los pingüinos están amenazadas debido a que su hábitat de hielo marino está desapareciendo.
Ezio Costa, director Ejecutivo de ONG FIMA, señala que, en el caso de Chile, existen muchos riesgos referidos al cambio climático.
“Tenemos zonas áridas y semiáridas que pueden erosionarse aún más y convertirse en desierto.
Tenemos problemas hídricos a propósito de nuestra dependencia de los glaciares, principalmente, en el centro del país. Además, tenemos dificultades en lo que se refiere a la conservación de los bosques, a propósito de la existencia de plantaciones forestales muy expandidas, lo que, en lugares con mucha sequía, también significa mayor riesgo de incendios forestales. Á eso debemos sumar el riesgo de eventos climáticos extremos que pueden producirse en varias zonas del país, como grandes marejadas, lluvias en ciertos períodos y con intensidades no comunes en las zonas precordilleranas y también en el norte de Chile”, indica. Según el experto, si bien ha habido cierta concientización, sobre todo en lo que respecta a los problemas que significan estas vulnerabilidades frente al cambio climático, claramente existen falencias Entre ellas destaca la inexistencia de un plan de adaptación de recursos hídricos, que está comprometido hace varios años y que, a su consideración, es una de las más graves, precisamente porque los recursos hídricos son el tema en el cual tenemos mayores problemas y, por lo tanto, requieren mayor compromiso con soluciones de parte del Estado.
“Me parece que las soluciones que se han ido dando al respecto, que son principalmente relacionadas a infraestructura, son ineficientes e insuficientes”, apunta. Óscar Mercado, director del programa de sustentabilidad de UTEM, considera que esto es de suma relevancia debido a las consecuencias directas que caerán sobre la población, tanto sociales como económicas, es por ello que “la ciudadanía, las organizaciones, el Gobierno y las empresas tienen cada uno por delante la necesidad de modificar sus conductas si realmente desean logros importantes”. “El Gobierno se mantiene en su trampa del crecimiento económico, no tomando las medidas necesarias para cambiar el escenario hacia una economía libre de carbono, que generaría otros negocios.
No hemos avanzado. La cancelada COP había abierto una ventana de esperanza para sensibilizar a todos y, con ello, generar compromisos importantes; pero ahora las prioridades son otras, y el país perdió la oportunidad de hacer una diferencia importante en el combate al cambio climático”, destaca.
A consideración de Mercado, el reto principal que debemos enfrentar en este escenario es la educación para el cambio climático o, más amplio aún, la educación para la sustentabilidad. “La educación para la sustentabilidad es el gran desafío, pues no es solo importante el combate al cambio climático, también es necesario combatir la pobreza, la desigualdad, la injusticia y tantos otros temas ambientales y sociales. El desafío como país es ver cómo avanzar hacia la sensibilización de toda la población, incluyendo a todos los tomadores de decisiones que, desde posiciones cómodas y seguras, no consideran los efectos sociales y ambientales de estas. En lo concreto, y a corto plazo, el Gobierno debería presentar un significativo compromiso país de reducción de emisiones durante la COP de Madrid y diseñar las fórmulas para comenzar a entregar educación de calidad”, destaca el académico. RETOS A CORTO Y LARGO PLAZO Ezio Costa, director Ejecutivo de ONG FIMA, dice que hay muchos desafíos en los que sigue siendo necesario avanzar, tanto desde el punto de vista de la mitigación del cambio climático como de la adaptación. “El NDC (sigla en inglés para contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional) que está proponiendo el Gobierno de Chile contiene algunos elementos interesantes, pero se queda corto también en muchos otros elementos, dentro de ellos, por ejemplo y en relación a lo que señalan los informes científicos internacionales, deberíamos estar pensando en que se llegue a un peak de contaminación el 2020, no el 2027. (Ante esto), es necesario reducir nuestras emisiones al 50% de cara al 2030 sin condicionamiento.
Ello significa, por ejemplo, cerrar las termoeléctricas a carbón completamente de aquí al 2030, partiendo por las que son más antiguas, que deberían cerrarse este año o el próximo”, apunta. Costa dice que también hay desafíos desde el punto de vista de la adaptación, y que la de los recursos hídricos probablemente es la más importante, así como la adaptación de las ciudades y los cambios en la manera en qué nos transportamos y en que movilizamos bienes.
“Eso requiere de cambios de política pública importantes, de promover un transporte público, alternativo y no contaminante, dejando de darle preponderancia a los autos, buses y camiones que queman combustibles fósiles”, destaca. Por último, el director Ejecutivo de ONG FIMA hace hincapié en que hay un desafío relacionado con la protección de los ecosistemas y, en especial, la protección de los bosques nativos, en desmedro de políticas que han ido a favor de las plantaciones forestales.
REFORESTACIÓN MASIVA EN RENCA Cultiva y Fundación Avina, junto con la Municipalidad de Renca, anunciaron que llevarán a cabo el 6 de diciembre la reforestación más grande del país, con 30.000 árboles nativos donados por la Conaf. Serán plantados 15.000 este 6 de diciembre y 15.000 más en el invierno de 2020, con el apoyo de 5.000 voluntarios en el Cerro Renca, una de las comunas con menor cantidad de áreas verdes por habitante. Ante la cancelación de la COP25 en Chile, y en medio del estallido social que afecta al país, los organizadores de esta iniciativa refuerzan la invitación a renovar y redoblar la apuesta para comprometerse, ahora más que nunca, con la generación del Parque Metropolitano Cerro de Renca, que beneficiará directamente a cerca de 360.000 habitantes de la Región Metropolitana de Santiago. La reforestación forma parte de It's Now!, iniciativa que surge desde la sociedad civil para el mundo y busca movilizar a la sociedad en una cadena global ciudadana de acciones climáticas sin precedentes, con distintos niveles de participación: personas, organizaciones, empresas y gobiernos.
La cadena global ocurrirá el 6 de diciembre de 2019, en pleno desarrollo de la COP25, que ahora se realizará en Madrid. El objetivo es exigir a los líderes reunidos en la conferencia que asuman compromisos más ambiciosos y que proyecten acciones concretas que garanticen un camino seguro para que la temperatura del planeta no supere los 1,5 grados centígrados.
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