Perspectivas para el sector agrícola
Ñuble podría verse favorecido con el mayor interés por invertir en cultivos exportables, gracias a una mejor situación hídrica.
N medio de la crisis social y política más profunda en décadas y proyecciones de crecimiento económico para Chile que no superarían el 2, 3% para el presente año y que varían entre 2, 4% (según la OCDE) y 2, 7% (según el banco de inversión estadounidense BofA) para 2020, las buenas noticias para la Región de Ñuble llegan desde uno de sus sectores productivos que alberga las mayores expectativas de proyección en este escenario: la agricultura. Asílo reveló la consultora especializada en contratación de especialistas en soporte de gestión, Page-Personnel, la que entregó auspiciosas proyecciones en cuanto a la incorporación de nuevos profesionales especialistas en suelo y clima, lo que podría incrementarse hasta en un 20% el 2020 debido a una creciente oferta en el sector frutícola y la agroindustria exportadora. Las razones se explican por una mayor expansión hacia el sur del país de cultivos agrícolas y frutícolas, debido a la mayor escasez hídrica en la zona centro norte de Chile (Valparaíso, O'Higgins, Maule y Metropolitana) y mermando la producción en otros rubros como la ganadería. La creciente competencia de países como Perú, que ha aprovechado sus potencialidades agrícolas y exportadoras para potenciar sus productos en mercados tan exigentes como la Unión Europea o Estados Unidos, están presionando internamente por recuperar espacios de mercado que antes eran liderados por chilenos. Ello significaría ampliar la producción hacia zonas como Ñuble, Bío Bío o La Araucanía y junto con ello movilizar a toda una red de proveedores, desde transporte hasta agroquímicos, para favorecer el mejor rendimiento de los suelos. De acuerdo al sondeo de la propia consultora, el inglés será uno de los idiomas que cobrará más importancia con el eventual arribo de empresas multinacionales interesadas en invertir en el sector. Otro factor que motiva a los exportadores a pensar en mejores expectativas para el 2020, en especial para productores de vino o fruta fresca, es el aumento del precio del dólar, que permitirá mayores retornos por sus envíos. Todo este escenario se traducirá al mismo tiempo en una mayor presión hacia el Gobierno, de tal modo de acelerar las inversiones que aseguren una mayor cantidad de riego agrícola a través de embalses, como asimismo mejorar la conectividad para el transporte de productos agrícolas hacia los puertos de embarque. Sin duda una buena noticia en tiempos de gran incertidumbre.
La incorporación de especialistas en suelo y clima podría incrementarse hasta en un 20% el 2020 debido a una creciente oferta en el sector frutícola y la agroindustria exportadora.