Distintas S investigaciones señalan que estas importantes reservas hídricas se han visto afectadas por
el cambio climático, acelerándose el impacto negativo
en las últimas décadas.
N Chile existen 24.114 glaciares, que cubren 23.641 ,6 km? de territorio, según el inventario Randolph creado por la Dirección General de Aguas (DGA). Este documento señala que el 88% de estos cuerpos de agua se encuentra en la zona austral; 7% en la zona sur; 4% en la zona central, mientras que el 1% restante se ubica en la zona norte, a una mayor altitud y con menor tamaño. Distintas investigaciones señalan que estas formaciones se han visto afectadas por el cambio climático. Según el estudio del World Glacier Monitoring Service (WGMS), el balance de la masa de los glaciares a nivel mundial evidencia una importante caída, que se ha ido acentuando desde
1980 y que va cada vez más rápido. Y si bien los monitoreos indican que el número de glaciares en el planeta ha aumentado, esto responde a la división de los más grandes y no a la creación de nuevos.
Definiciones El tema de la conservación de estos importantes recursos hídricos está en la agenda, generando visiones divergentes. Al respecto, cabe señalar que del total de glaciares catastrados en el país, el 86% está
bajo el amparo del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas (parques nacionales protegidos por la Convención de Washington de 1940), mientras que el 14% restante se encuentra resguardado por el SEÍA. Además, desde 2010 la Ley 19.300 establece que todo proyecto cercano a glaciares debe presentar un Estudio de Impacto Ambiental. Pablo Wainstein, experto hidrólogo y glaciólogo, abordó algunas definiciones sobre esta materia en un seminario realizado por
La Facultad de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica. En esa oportunidad definió los siguientes conceptos: Ambiente Glaciar: Es el paisaje donde están los glaciares, son distintos entre sí y están en distintas zonas de Chile. Se diferencian en la temperatura, nivel de derretimiento y tamaño. Ambiente Periglaciar: Su geomorfología característi Ca es el resultado del congelamiento y descongelamiento del suelo. Wainstein precisó que puede haber un ambiente periglaciar
donde no hay glaciares, y viceversa. Permafrost: Es un suelo o roca, con o sin agua, que ha permanecido a cero grados celsius por dos o más años consecutivos. Se refiere al estado térmico del suelo, no al tipo de suelo o roca, y no tiene que ver con si tiene o no hielo. El especialista sostuvo que cada tipo de glaciar debe ser evaluado de manera distinta por sus características y el ambiente en el que se encuentra. También definió otras formaciones relacionadas con el concepto de Olaciar, pero con características diferentes: Glaciarete: Se forma por la nieve que transporta el viento y que se va acumulando en un lugar determinado. Es mucho más pequeño y menos profundo que un glaciar. Tiene manchones penitentes. Glaciar cubierto: Es una masa glacial con aproximadamente 95% de hielo o más. Está cubierta de detritos incorporados por avalanchas o eventos similares, que se van acumulando sobre el glaciar. Esta cobertura
lo protege del derretimiento acelerado. Glaciar Rocoso: Su estructura, morfología, régimen térmico, etc. , corresponden a la existencia de derretimiento. La distribución de hielo que contienen es altamente heterogénea, tiene bandas de hielo concentradas en láminas, pero no todo es hielo.
Investigación del Centro de Estudios Científicos A partir de la necesidad de agrupar a expertos nacionales en un centro autónomo del aparato académico tradicional, para fortalecer la investigación glaciológica y el desarrollo tecnológico asociado a esta, se formó el laboratorio de glaciología del Centro de Estudios Científicos (CECs) en Valdivia, en 2002. Actualmente cuenta con un staff permanente de unas 20 personas. Sus investigaciones están divididas en cuatro ejes. El primero es la implementación de un programa de monitoreo de glaciares intensivo en la alta cordillera de Chile central, donde se generan recursos hidrológicos captados en los cursos fluviales superiores y medios. En el sur, se concentran en dos grandes temas: las interacciones glacio-volcánicas y la dinámica y monitoreo directo de glaciares que se desprenden en lagos. Por último, en la Antártica, trabajan en un programa de exploración y muestreo de aguas de un lago subgla Cial descubierto por ellos en 2014.
Cambio climático y acción humana Francisca Bown, glacióloga del Centro de Estudios Científicos, explica que la evidencia científica demuestra la existencia de un proceso de desglaciación mundial desde que tuvieron su último apogeo, durante la denominada “Pequeña Edad del Hielo”, hace unos 150 años aproximadamenLa científica del CECs explica que “durante las últimas seis décadas, se estiman pérdidas de las áreas englaciadas de esta región (centro del país) cercanas al 30%”.
Te; fenómeno con variaciones dependientes de la región en la que se ubiquen. Además, añade que este comportamiento se ha sido acelerado desde las últimas décadas del siglo XX. “En ese sentido, reconocemos que hay una megatendencia debido al rol de los componentes de variabilidad natural y antropogénica del clima, y la enorme diversidad de respuestas de glaciares frente al cambio climático, lo que también incluye anomalías: glaciares que avanzan rodeados de un cúmulo de otros que retroceden”, señala la científica. En este contexto, según los estudios del CEGs, los glaciares más pequeños de ambientes tropicales y semitropicales probablemente desaparecerán en pocas décadas, en tanto que los de mayor dimensión mostrarán más resiliencia. Dependiendo de la escala espacial y temporal, o si es intervención directa o remota, la acción del hombre es otro factor que podría estar afectando a la conservación de los glaciares. A pesar de que “existen pocos estudios al respecto”, Francisca Bown indica que “potencialmente hay un efecto de material fino sedimentable sobre la superficie de los glaciares”, lo que favorece el derretimiento. Además, menciona como otros factores que pueden acelerar el retroceso glaciar,
la actividad volcánica, especialmente durante ciclos eruptivos intensos, debido a la generación de flujos laháricos. También el calentamiento oceánico refuerza la pérdida de masa, en el caso de los glaciares que están en contacto con fiordos y lagunas mareales.
Impacto en la zona central Los glaciares ubicados en la zona central de Chile se han visto afectados por el calentamiento de la atmósfera en altura, especialmente a Partir de la megasequía que se inició cerca de 2010. La científica del CECs explica que “durante las últimas seis décadas, se estiman pérdidas de las áreas englaciadas de esta región cercanas al 30%”. Puntualiza que estas bajas se deben al retroceso de los frentes a mayor altura, la fragmentación de glaciares y al aumento del recubrimiento del hielo con materiales provenientes de morrenas interiores, aso Ciadas al adelgazamiento del mismo o por aportes de laderas desestabilizadas. Adicionalmente, advierte que se espera que continúe esta tendencia climática durante las próximas décadas, viéndose afectada la caída de nieve, una de las principales fuentes del régimen nivopluvio-glacial de los caudales de la región. Mch
Desde 2010 la Ley 19.300 establece que todo proyecto cercano a glaciares debe presentar un Estudio de Impacto Ambiental.
24,114
glaciares
existen en Chile, que cubren 23.641 ,6 km?. El 88% se encuentra en la zona austral.