Las demoledoras cifras que castigan al Valle del Itata
Alcaldes del territorio coinciden en una pronta inversión para recuperar la zona, dado que tiene baja escolaridad, alta ruralidad, una población envejecida y sueldos por debajo del promedio nacional y regional. El programa “Zona de Oportunidades” es una de las tantas alternativas que podrían revertir estos números.
Ingrid Acuña Caballero
os datos demográficos guardan las comunas del Valle del Itata no dan para interpretaciones. Ya sea por sobre o bajo el promedio nacional, regional o provincial, sus cifras siempre están en contra de su desarrollo. Dado que el 17,25 % de la población de Ñuble se concentra en las nueve comunas que componen al Valle del Itata, resulta desalentador verificar que un 27,3 % de sus habitantes tiene una alta pobreza por ingresos, mucho más que Ñuble -la cual registra un 20,6 %- y duplica el promedio nacional, la cual se apunta en un 11,7 %. “Nuestra situación en realidad es muy compleja. La gente se va y tenemos muchos adultos mayores. Las cifras que hay es nuestra verdad, porque sino le ponen una buena porción de estudios y recursos no sé qué va a pasar con Ninhue, otras comunas están muy similares que la nuestra. Nuestros jóvenes se nos van y nuestras mujeres buscan trabajo de temporeras; tenemos pobreza y el tema del agua y los adultos mayores están muy enfermos. Es muy terrible trabajar con tan pocos recursos que nos llegan”, comentó la alcaldesa de Ninhue, Carmen Blanco. Pueden ser múltiples los factores que inciden en estos registros negativos, pero una de las causas de esta pobreza puede deberse al despoblamiento que sufren cada una de sus comunas, donde en cuatro de ellas descendió el número de habitantes y en otras tres se mantuvo la cantidad, de acuerdo a los datos aportados por el censo del 2002 y del 2007. “Eso explica porqué fui uno delos alcaldes que más trabajé en el comité de Ñuble Región, por las brechas sociales que nosotros tenemos. Las comunas somos bastantes iguales en cuanto a las brechas sociales que hay en comparación con otras comunas de la región del Biobío. Las comunas del Valle del Itata son las más marginadas y más postergadas con respecto a proyectos de desarrollo, esa sí y en todos los ámbitos del quehacer comunal: infraestructura, servicios públicos, educación, salud, conectividad”, subrayó Luis Cuevas, alcalde de Trehuaco. Pero también esta pobreza puede deberse al efecto de baque tienen sus 9 comunas, dado que el Valle del Itata cuenta con una alta especialización en la actividad fo
restal, la cual tiene una baja productividad e impacta negativamente en los ingresos de las personas. Detalle no menor es que si el 29,1 % de los suelos de Ñuble tienen plantación forestal, en el Valle del Itata el registro es de un 53,4 %, y solo el 21,3 % está destinado para el suelo agrícola, justamente las actividades productivas que en Ñuble tienen un menor rendimiento del que se registra a nivel nacional, y una rentabilidad baja. “La información es absolutamente necesaria para tener un punto de base y poder proyectar, pero lo preocupante es no tenemos claras cuáles serán las políticas o estrategias que van a permitir levantar la región. Soy la costa de la región de Ñuble y requerimos mucha inversión en educación, donde tenemos muy bajo nivel de escolaridad en el área rural, y también necesitamos recursos en infraestructura. Si puedo sacar algo en limpio hoy es que tenemos una tremenda oportunidad de salir adelante, pero esto obedece intrínsecamente a las políticas de gobierno”, aseguró el alcalde de Cobquecura, Julio Fuentes.
BAJOS SUELDOS
Dato socioeconómico que se incorpora y genera una carga negativa a las comunas del Valle del Itata, es que este territorio está alejado de la media nacional y en lo que se refiere a Ñuble, en materia de sueldos en empleos formales. En este punto la comuna de Portezuelo y Ninhue tienen promedios de sueldos de $375.395 y $390.292 respectivamente, quedando, junto con otras tres comunas del Valle, bajo de lo que promedió el territorio del Itata. Solo Ránquil sobrepasa al promedio regional y se acerca un poco más al que tiene el país, ya que se estima que sus sueldos promedio son del orden de los $587.071. “Lo que nosotros esperamos ahora es que podamos sentarnos a conversar con aquellas carteras y ministerios que tengan directa injerencia en la solución de esta problemática y es lo que esperamos; y con estas cifras, tal como queremos que se clarifiquen y se profundice en algunos casos. Que podamos sentarnos, y en conjunto, porque tenemos la experticia y el conocimiento local más acabado, poder elaborar una estrategia que nos permita superar estos puntos. Hoy en día, de no mediar una solución a mediano plazo, nos vamos a tener que venir a vivir todos a Chillán”, subrayó Alejandro Pedreros, alcalde de Coelemu. Ajuicio de los expertos, el nivel de escolaridad es una arista que debe incorporarse al análisis de la depresión por la que pasan las nueve comunas del Itata, ya que sus niveles son muy bajos y se inscriben bajo el promedio nacional y el de Ñuble, realidad que afecta de manera especial a las personas adultas. Según el Censo 2017, el promedio de los años de escolaridad a nivel país es de 11,1 y el de Ñuble queda en 10 años, dos dígitos más abajo está el promedio del Valle del Itata con 8,7. Solo basta mencionar que las comunas de Cobquecura, Portezuelo, Trehuaco y Ninhue están aún más abajo que el promedio del territorio. “Estamos buscando soluciones hace mucho tiempo y me imagino que debe versión, porque en el fondo necesitamos soluciones para nuestra gente. Es lamentable que existan familias que tengan que consumir agua que se ha entregado una vez a la semana o que no existan buenos trabajos”, aseguró Richard Irribarra, alcalde de Quirihue.
POBLACIÓN RURAL
Detalle no menor es el fenómeno que se registró en el Valle del Itata de acuerdo alas cifras entregadas por el último censo, ya que de haber más hombres que mujeres en el 2002, hoy se pasó a la situación opuesta, donde la tasa de feminización tuvo un crecimiento mayor que Ñuble, Biobío y Chile. Debemos llevar adelante un plan de fomento productivo con especial énfasis en la atracción de inversiones para el Valle del Itata, apoyado por organismos regionales como Sercotec y Corfo, y de esta forma generar más empleo en la zona. A lo anterior debe sumarse un plan especial de inversión agrícola, relacionado principalmente a sistemas de riego, tecnologías de captación de agua y sistemas de agua potable rural”, recalcó el delegado presidencial Mar Arrau. Antecedente demográfico ayuda a entender la pesada carga que lleva en sus hombros el Valle del Itata es su alta ruralidad, ya que si en todo el territorio chileno se pondera un 12,2 %, en el Valle las cifras estipulan que un 54,42 % de sus habitantes se encuentran en esta condición, lo que dificulta la atención de una población tan dispersa. Esta cifra repercute en las iniciativas para postular a un proyecto de agua potable, para inversión en pavimentación, conectividad y otras tantas obras de mejoramiento, ya que la rentabilidad social que se genera es muy baja. Estos guarismos también son parte de los argumentos que la postulan para clasificar zona de rezago, donde hoy el programa zona de oportunidades tiene como meta que las comunas más modestas y con pocas oportunidades alcancen condiciones que favorezcan su desarrollo. “Se debe tener una postura clara y firme del gobierno para apoyar a este territorio. Hay comunas decrecientes, donde los jóvenes se van de ella, porque las condiciones básicas no están y ahí está nuestro trabajo como autoridades y coordinador de la Zona de Oportunidades. De darles las herramientas e insumos para que estos jóvenes entreguen sus conocimiento. Sus herramientas y su fuer Za para tirar estas comunas adelante”, dijo Cristóbal Martínez. Encargado del programa Zona de Oportunidades.
EL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACIÓN EN EL VALLE DEL ITATA ES UNA DE SUS PARTICULARIDADES
74& de la superficie del Valle del Itata está destinada para actividad agrícola y forestal las cuales tienen una baja productividad e impacta negativamente en los ingresos de sus habitantes.
54,4% de la población del Valle del Itata es rural, promedio que esta por sobre el novel nacional y el de Ñuble. Cobquecura, Ninhue y Ránquil están por sobre el 70%.
• Martín Arrau "La educación técnica profesional también debe ser parte de esta vía que nos permitirá desarrollar el Valle del Itata y enfrentar los desafíos como desempleo y baja productividad".
• Luis Cuevas "Tenía muchas expectativas con Ñuble región de que no se hiciera más de lo mismo y al final no hay ninguna estrategia en la instalación de la región que nos lleve a soñar que nos vamos a poder desarrollar". de la población del Valle del Itata es rural, promedio que está por sobre el nivel nacional y el de Ñuble. Cobquecura, Ninhue y Ránquil están por sobre el 70%.
Mayor cantidad de población atendida con camiones aljibes
• En el territorio Valle del Itata se concentra el 43.5% de la población que es atendida con camiones aljibe durante el 2018, ya que de los 20.337 hogares a los que se les entregó el vital líquido en todo Nuble, 8.805 se realizó en las nueve comunas del Itata. En tanto, la comunidad de Ninhue aglomera la mayor cantidad de familias (1.775) que recibió agua, al igual que Quirihue (1.396 familias), Coelemu (1.205 hogares) y Cobquecura (1.148 hogares).
Para remediar esta problemática, que por años se repite, es que el Ministerio de Obras Públicas licitó prospecciones geofísicas, con el objetivo de identificar la presencia de acuíferos subterráneos en 52 sectores de las 9 comunas del Itata, donde cada prospección fue analizada de tal manera que el informe contenía una solución para la extracción y la cantidad de metros en el cual estaría el acuífero. Con este informe cada comuna debe comenzar a trabajar en proyectos que se puedan postular a fondos regionales o sectoriales.