Desaladoras, la gran alternativa
Ante la crisis hídrica que castiga al país, la solución aparece en procesar agua de mar para para el consumo humano y productivo.
A crisis hídrica está definitivamente instalada en nuestro país. Llevamos 11 años de sequía y cada vez las posibilidades de lluvias son más esporádicas. Por otro lado, las nieves eternas dejaron de ser eternas y poco a poco se agotan como fuentes seguras para los cursos fluviales, napas o acuíferos que cubren el consumo humano o productivo. Así las cosas necesariamente hay que asumir la realidad y trabajar para revertir la situación. Por un lado hay que racionalizar el uso y distribución del recurso disponible y, por otro, apelar a nuevas fuentes, no tan nuevas en realidad, como son las aguas del mar. Para ello hay que aplicar el proceso de desalación del recurso marino que está a la mano, pero que exige alta inversión. En la actualidad el sistema ya se aplica en el país y se logra obtener un flujo total de 6. 500 litros por segundo. Están operando en nuestras costas 16 desaladoras con fines industriales, una de ellas en Ventanas, comuna de Puchuncaví, y 8 productoras de agua potable, una en el litoral de la comuna de La Ligua. En tanto, están en proyecto 22 desaladoras destinadas al consumo humano o industrial, dos de ellas en nuestra región. Uno de estos proyectos se ubica en Quintero, con una producción de mil litros por segundo, cuyo costo es de US$500 millones. Antonio Walker, ministro de Agricultura señaló que esa producción podría cubrir el uso humano, la agricultura y la minería. Destacó el ministro los positivos resultados logrados con la desaladora de Antofagasta que abastece a la población y riega producción agrícola. Sobre la energía que requiere el sistema afirmó Walker que los costos han bajado tres veces “dada la incorporación de energías renovables y donde también esta región tiene tremendas ventajas comparativas, porque la fuente solar ya es una realidad”. Añadió que desde Quintero se podría llegar hasta La Ligua y que ya se evalúa la factibilidad técnica, económica y medioambiental del proyecto. Cristián Wedeles, gerente comercial en Chile de IDE Technologies, una de las más importantes empresas internacionales del rubro, señaló que un proyecto como el planteado requiere cinco años para su desarrollo, por lo cual es necesario tomar ya las decisiones y dar respuesta a la iniciativa de acuerdo a la normativa existente. Ilustrando sobre las ventajas del sistema, el ejecutivo puso como ejemplo la planta desarrollada por IDE en Sorek, Israel, la mayor del mundo, que produce 624.000 metros cúbicos de agua potable diariamente, abasteciendo la necesidad de millones de personas. “El porvenir de Chile está en el mar”, certero lema de la Liga Marítima, que se aplica perfectamente en estos momentos de crisis hídrica nacional, al señalar que la solución está a la mano en las aguas que bañan, incansables, nuestro largo litoral.
El sistema ya se aplica en el país y se logra obtener un flujo total de 6. 500 litros por segundo. Están operando en nuestras costas 16 desaladoras con fines industriales, una de ellas en Ventanas.