EL OBJETIVO DE CHILE DE SERCARBONO NEUTRAL MPLICA TANTO REDUCIRLAS EMISIONES COMO CAPTURAS. EN AMBOS SENTIDOS LA AGRICULTURA JUEGA UN ROL CLAVE.
La nueva realidad, en la que el cambio climático está en primer plano, ha hecho que el mundo tome acciones coordinadas que buscan resolver una crisisambiental. Asíes queseha trazado una hoja de ruta donde el objetivo principal es lograr que la temperatura del planeta no suba más de 2*C a final de siglo respecto a cómo estaba antesdelaeraindustrial. Pero la cienciahaalzadolavozdiciendo que esta meta no es suficiente, porlo queseaspiraaqueojaláse mantenga por debajo de 1, 5"C. Se trata de un compromiso al que muchas partes se han adherido y que implica entonces lograr que el mundo sea carbono neutral al 2050, una meta que Chile se impuso para esta mismaépoca. En la actualidad las emisiones de Chile son 111.677 Kt CO) EQ, mientras que el sector forestal es capaz de absorber 65.492 Kt CO) EQ. De esta manera hay dos aristas que van de la mano para lograr que las emisiones sean al menos iguales a lo que la naturaleza es capaz de secuestrar: reducir las emisiones y aumentar la capacidad decaptura. Anivel país y en materia dedisminución de emisiones la propuesta más ambiciosa de Chile pasa por el cierre de las centrales a carbón
el avance en materia de descarbonización de la matriz eléctrica (Ver recuadro). “Eso como un gran componente que reduce las emisiones del sistema como un todo. Facilita que cualquier actividad en nuestro país que esté utilizando energía
Carolina Schmidt, ministra del Medio Ambiente
LOS COMPROMISOS DE CHILE
Tras el Acuerdo de París cada país se comprometió atomar medidas en el corto, mediano y largo plazo para hacer frente al cambio climático, las que se incorporarían en la Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC por su sigla en inglés), es decir, los compromisos de cada país para reducir sus emisiones al año 2030. Chile será uno de los primeros países en presentar su actualización de dicho compromiso, ya que lo hará en el marco de la COP 25, cumbre que se llevará a cabo entre el 2 y 13 de diciembre en Madrid, tras suspenderse su realización en Chile, país que sin embargo mantiene la presidencia. “Chile decidió ser uno de los primeros países del mundo en actualizar su NDC, haciéndolo con mucha ambición y siguiendolo quela ciencia hapedido. Sabernos que los compromisos vigentes son altamente insuficientes para limitar la temperatura a un máximo de 2*C y mucho más lejos para acercarse alos1, 5*C, porlo que la ciencianos ha pedido que las actualizaciones busquen reducir sus emisiones netas en un 45% y eso es lo que nosotros ambicionamos”, señaló la ministra del Medio Ambiente y presidente de la COP25, Carolina Schmidt, según información de dicha cartera La NDC propuesta por Chile se estructura bajo cuatro líneas de acción: mitigación, adaptación, componente de integración y medios de implementación. En el primer punto Chile se compromete a una meta transversal a la economía (sin incluir al sector forestal) de contar con un presupuesto de emisiones de gases de efecto invernadero de entre 1100 a 1175 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MMt CO2eq), con un máximo de emisiones a 2027. Asimismo, introduce una meta incondicional específica para el sector forestal que permite capturar emisiones, comprometiendo el manejo sustentable y recuperación de 200.000 hectáreas de bosques nativos, además de forestar 200.000 hectáreas de bosques. Según consigna el Ministerio, el país también se compromete a reducir las emisiones del sector forestal por degradación y deforestación del bosque nativo en un 25% al 2030, considerando las emisiones promedio entre el periodo 2001-2013, Todas estas medidas corresponden a reducción en las ernisiones y aumento en la captura de carbono, con lo cual se obtiene una disminución de las emisiones netas del país al año2030.
De la red pase a incorporar energía limpia, energía libre de emisión”, comenta Gonzalo Muñoz, High Level Climate Champion de la COP25, quien agrega que a continuación sigue el desafío de electrificar el sistema de transporte, comenzando por el público para posteriormente ir aumentando la capacidad de electrificación de la flota automotriz del país. Este punto toca fuertemente al sector agrícola, el queadquiereunrol relevante enestameta.
GANADERÍA: UN APORTE GLOBAL MINORITARIO Del total de lasemisiones de Chile, el sector agrícola aporta el 11% con 11.801 KT CO2, siendo la fermentación entérica y el uso de suelos las principales cau: con un 40% y un 38%, respectivamente, según datos del tercer informe bienal de actualización de Chile sobre cambio climático. Pesea ello, al observar las emisiones totales del país, una proporción minoritaria adjudicaal sector pecuario. Según consigna
Octavio Oltra, gerente general del Consorcio Lechero de Chile, de acuerdo alos datos reportados al IPCC, alrededordel 5, 7% delasemisiones totales corresponden a este rubro en su conjunto, siendo el 57% de las emisiones totales del sector agropecuario. Esta minoritaria proporción se atribuye a los gases metano, óxido nitroso y dióxido de carbono, siendo el metano el mayor contribuyente a las emisiones totales del sector lácteo, con más de la mitad. Elóxidonitroso contribuye entre el 30% y 40% de las emisiones totales, mientras que el dióxido de carbono aportaentreel 10% y 20%. Pese a que el aporte del sector pecuario se considera minoritario en cuanto a las emisiones totales del país, la industria láctea se ha propuesto reducir las emisiones de GEI (gases de efecto invernadero). Así es que un camino pasa por los incrementos de eficiencia, aspectos que ajuicio de Oltra, deben formar partejunto a otras medidas de los planes de mitigación y adaptación que se encuentran en desarrollo. En este sentido destaca el Programa Bio Gás Lechero, que busca aumentar la generación de ERNC en pymes del sector lechero de las regiones de Los Ríos y Los Lagos, con el fin de contribuir a la sustentabilidad de productores, reduciendo los costos por concepto deenergía y mitigando lasemisionesde GEL “Por otro lado, a nivel de las plantas de proceso, las industrias han concentrado su trabajoenlautilización de fuentes de energía renovables, la implementación de tecnologías que reduzcan su consumo energético y la medición de su huella de carbono para puntos críticos”, añade. Enopinión de Marta Alfaro, subdirectora Nacional de de INIA, otro punto a trabajar en pos de la mitigación pasa por la dieta de la ganadería, ámbito que forma parte de la propuesta país. Según indica, en el proceso de digestión de los rumiantes se genera una mayor cantidad de metano cuando en la dieta existeun desbalance entre la cantidad de proteína y de energía. “La proteína quetieneel alimento la
Gonzalo Muñoz, High Level Climate Champion dela COP25
Octavio Oltra, gerente general del Consorcio Lechero de Chile
Alrededor del 5, 7% de las emisiones totales de Chile corresponden
pecuarioen su conjunto.
Quieres transformar en producto final, como carne o leche, por ejemplo, pero para poder hacer esa actividad de transformación necesitas energía. Cuando la dieta no está adecuadamente balanceada existe una mayor fracción de energía que se pierdecomo metano”, explica. La baja calidad y digestibilidad de los alimentos, especialmente de la fibra, deriva en mayores emisiones entéricas de metano porunidad de lecheo carne, particularmenteen sistemas de bajaproductividad. Porello es que para Oltra el punto pasa por mejorar la calidad nutricional del pasto consumido. “En los sistemas pastoriles de donde proviene el 80% de la leche de nuestro país, la gestión de pastoreo (como pastoreooportuno, rezagosuficiente, periodo de rotación, etc. ) y pastos mejorados (fertilización, variedades forrajeras mejoradas en términos productivos y nutricionales) además de riego, son los mecanismos con mayor potencial de reducir las emisiones”, aclara y agrega que en los sistemas con dieta balanceada más comunes en lazona central de Chile, la calidad del forraje y su fibra y de los concentrados
son muy relevantes junto con el
balance de nutrientes. Según consigna se tratan de medidas que pueden mejorar la absorción de nutrientes y la eficiencia de conversión y aumentar la productividad de los animales y su eficiencia, lo que se traduce en reducir las emisiones tanto totales como porunidad de producto. Pero no sólo en el sector de la ganadería quedan aspectos por trabajar para continuar aportando en la
reducción de emisiones. El usode fertilizantesesunproceso de productiva en el que también se pueden tomar medidas de mitigación que contribuyan a la carbono neutralidad.
FERTILIZACIÓN PARCIALIZADA La propuesta a nivel país relacionada con el sector agrícola involucra también la reducción de la tasa de fertilización nitrogenada. El escenario ideal en esta materia sería utilizar un fertilizante orgánico, pero tambiénexisten opcionesdentro de los nitrogenados sintetizados. A juicio de Isabel Quiroz, directora ejecutiva de i Qonsulting, se debiera hacer un mínimo uso, evitandoque percoley pasea las capassubterránea: Una posturasimilares la que muestra Marta Alfaro, quien aclara que se debe manejar la dosis que se aplica, pero también la época en que se administra. “En general, la norma o la regla debiera ser que uno aplica la cantidad de fertilizante que la planta necesita cuando lo requiere. Aveceslos agricultores tienden a aplicar todo el fertilizante en un inicio, cuandoen lasiembralaplanta todavía no existe o es muy pequeña. Uno puede ajustar el manejo, dividiro parcializar la dosis de nitrógeno que aplica, y administrar el resto de la fertilización a lo largo delatemporada”, especifi Pero más allá de reducir la dosis y cambiar la époc: de distribución también pueden haber cambios en la forma en que se aplica. Alfaro ponecomo ejemplo la zona central, donde la aplicación foliares algo bastante
Isabel Quiroz, directora ejecutiva dei Gonsulting
Marta Alfaro, subdirectora Nacional del+D de
INIA
Enlos fertilizantes nitrogenados sedebe trabajar la dosis que se aplica pero también la época en que se administra
Común, una práctica que no seutiliza de manera regular enel sur. Una transformación más profunda puede pasar directamente por el cambio de producto ya que como comentalaexperta, nos fertilizantes que consideran un aditivo que busca reducir las emisiones. “En esecaso significaríatendera la preferencia de ese tipo de productos respecto alos tradicionales”, explica Alfaro. Otro punto de la cadena del sector agrícola que contribuye en la generación de emisiones es el transporte, un área donde el escenario general puede considerarse positivo, pero donde tambiénse pueden implementar pequeños cambios.
EL MEJOR ESCENARIO LOGÍSTICO El sector agrícola genera el 11% de las emisiones de GEL, mientras que el 78% de éstas provienen del sector de energía. Sin embargo éstesetraslada alaactividad agropecuaria dado el transporte que se utiliza, el que a su vez usa combustibles. De esta manera, según advierte Alfaro, en la medida que se pueda ir una menor cantidad deveces al campoconeltrac: tor, se ahorra combustible. Hay un efecto de ahorro económico pero que derivatambiénen menoresemisiones. En este sentido también se aporta huella de carbono cuando se utilizan transportes dependientes del petróleotanto paraimportarinsumos como para llegar a los mercados de destino. “Hay algunos insumos que cuando los traes de un país lejano conlogísticadependientedel petróleo efectivamenteestás
aportando con huellade carbono y eso es lo que deberíamos bajar como emisiones o al menos tratar de neutralizarlas. Lo mismo que cuando nosotros llegamos a un país distante, también si lo hacemos con medios de transportes que son dependientes del petróleo, vamos a aportar huella de carbono. Por eso es que debemos solicitar que las cadenas logísticas vayan migrando a combustibles que no emitan huelladecarbono”, advierte Marcela Carrillo, gerenteregional de Fedefruta. Sibien en la cadena productiva el transporte genera una de las emisiones, no todos tienen el mismo nivel. Y si se trata de comparar, elmarítimotiene menores niveles por carga que el terrestre. “En el largo plazo, la tecnología permitirá que el transporte de pasajeros y cargas se realice mediante vehículos eléctricos, lo cual, enconjunto con mejoras en las vías de circulación, permitirán una disminución considerable en las emisiones producidas por el transporte en la cadena productiva. Sin embargo, estas tecnologías tardarán en ser masivas. Una solución complementaria más cercana sería el transporte ferroviario”, explica Francisco Gana, gerentede Estudios dela SNA. Hace algunos años se pre¡ aró un estudio que detallaba la huella de carbono de productos agropecuarios de distinta naturalezaquese exportaban. Según recuerda Alfaro, al hablar de fruticultura, no más del 10% delvalortotal de la huella correspondía al transporte desde Chile hasta el puerto de venta en Europa. Finalmente
Francisco Gana, gerente de Estudios de la SNA
Óscar Miranda, consejero del Colegio de Ingenieros Agrónomos
Elsector de energía genera el 78% delas emisiones de GEl, el que setraslada a la actividad agropecuaria dado el transporte que seutiliza.
Depende de la naturaleza
Sin lugar a dudas la agricultura todavía tiene aspectos quetrabajarpara contribuir al primer lado de la moneda: la reducción de las emisiones. Sin embargo hoy se trata de un rubro que aporta en la captura.
UN PULMÓN VERDE Enlaecuación de Chile y el mundo no basta con reducir considerablemente las emisiones o pasar de energías contaminantes a limpias. En paralelo se debe aumentar de manera drástica la capacidad de la naturaleza de secuestrar carbono. Este es el otro lado de la moneda que se debe trabajar y al que se refiere Gonzalo Muñoz, quien advierte que en este ámbito la capacidad de los bosques es una herramienta fundamental. Este mismo rol preponderante es el que observa Oscar Miranda, consejero del Colegio de Ingenieros Agrónomos, enla forestación, yaquese trata del principal mecanismo de compensación. Y en este sentido desta“a el caso del Estado de Bután, que mediante sus plantaciones forestales es el primer país en contar con carbono positivo. Hoy en día dentro del rubro agrícola existe otra herramienta que aporta entérminos decaptura: las praderas. En Chile cerca del 80% de la producción de leche se realiza bajo pastoreo, en donde las praderas coexisten con bosques nativos dentro de los mismos predios.
Según aclara Oltra, tanto las praderas como los bosquesson capaces de captar y/o reciclar -a través de la fotosíntesis-, el carbono generado por la producción lechera. Si se analizan estos pulmones verdes con que cuenta el sector agrícola, se trata de un rubro que efectivamente contribuye en términos de captura. Sinembargo enesteámbito también se puede hacer más y el suelo podría convertirse en un elemento vital. Porello larelevancia de las buenas prácti agrícolas. “No hay que olvidar que el suelo por sí mismo, también puede convertirse en un sumidero importante de carbono si es manejado adecua damente. Se ha estimado que, a nivel mundial, el suelo destinado a pradera contiene alrededor del 20% de las reservas de orgánico y que la mantención o aumento de este puede contribuir significativamente a la mitigación de las emisiones. En este contexto, también las buenas prácticas agrícolas en la producción de alimento para el ganado lechero entodos los sistemas productivos, puedeserunaporte” agrega el gerente general del Consorcio Lechero. Los buenos manejos y protección de los suelos esunaspectoquetambién implica a la fruticultura, una de las principales actividades del sector agrícola. Aquí lo importante pasa por considerar el estado del suelo donde se está interviniendo. “El trabajo que se haga
En el suelo se debe hacer tomando en consideración las emisiones que genera justamente el movimiento y la remoción de la capa vegetal. Debemos trabajar por fortalecer la nutrición del suelo. Hay distintas tecnologías y eso depende muy bien de la zona. Hay lugares donde potencialmente se puedetrabajarinclusosobre modelos combinados agrosilvícolas, donde vas combinando especies frutícolas consilvícolas. Hay distintos mecanismos donde puedes trabajar también en fortalecer a través de praderas la capacidad de captura y revestimientodelossuelos”, profundiza Muñoz. Sin embargo en lo que respecta a fruticultura y su capacidad de captura aún falta por avanzar en un aspecto clave: medición.
HORA DE CALCULAR Las plantas son fijadoras de carbono, es decir, son capaces de capturar esta molécula y mineralizarla: convertirla en biomasa. Pero es necesario conocer en qué etapa de su vida son capaces de generar este proceso, dado que posteriormente comienzan a fotorespirar y emitir carbono. Así es como a juicio de Carrillo hace falta un proceso de identificación. “Hay que identificar cuáles son los cultivos más carbono neutral y productivos a la vez, es decir cuáles son las especies que son mejores fijadoras de carbono durante qué periodo de su fase, de manera que nos enfoquemos en esos óptimos”, indica. A juicio de Muñoz, no basta con asumir que existe
una capacidad de captura delos árboles. “De alguna u otra forma hemos perdido mucho tiempo en colocar la ciencia en el centro de la conversación de modo de que pudiéramos tener en Chile un manual de gestión ycapturade CO ya partirde los cultivos frutícolas y los distintos cultivos vegetales. Esa ecuación, esos cálculos por supuesto dependen de la especie, del manejo y la zona. Hay una serie de variables que hacen que ese número no sea necesariamente siempre el mismo pero esa gestión tenemos que hacerlade formatal que todos los agricultores del país puedan estar gestionando exactamente cuántos kilos de CO» colocan en el mercado o potencialmente están retirando de la atmósfera”. Hoy en día existen tablas de captura que se encuentran disponibles, las que de Gana no son las más adecuadas y pueden generar errores en la toma de decisiones respecto al tema. Porello considera necesario que tanto
el Minagri como el Ministerio de Medio Ambiente incentiven la adaptación de las tablas internacionales a los manejos y condiciones locales. Como una industria limpia y que aporta al país en la reducción de carbono escomo define al sectoragrícola Isabel Quiroz, quien sin embargo enfatiza en que es algo que no se ha promocionado lo suficiente dado que además faltan estándares que permitan calculartanto las emisiones como las capturas. Hoy en día Chile tiene un objetivo común en términos climáticos: ser carbono neutral al 2050. Para ello es necesario que los distintos sectores tomen medidas que permitan aportar en ambos lados de la moneda, reduciendo las emisiones pero también aumentando las capturas. Si se mide la agricultura en ambos lados dela balanza se puede concluir querealiza un gran aporte enel área del secuestro, pero ello no significa que todas las unidasean neutrales. Aúnquedan tareas porrealizar y continuar con la contribución hacia una meta que ya no sólo pide el país, sino que el
Los bosques sonuna herramienta fundamental enel área de captura, al igual que las praderas y los suelos.