Crisis hídrica y Cambio Climático en Chile: Ideas para el desarrollo de una estructura con mayor resiliencia
Captura de vapor y desalinización de agua aparecen como alternativas para enfrentar la sequía y escasez hídrica, pero también se hace necesaria una discusión que permita definir criterios técnicos, reglamentos y nuevas normas que permitan diversificar el suministro de este vital recurso.
Nue atraviesa su décimo año consecutivo de sequía, en el que la Región de Valparaíso tiene su año más seco en medio siglo. Estas señales de alerta han ocasionado que Valparaíso haya sido declarada zona de emergencia por la escasez hídrica, mientras las autoridades creen posible que en 2021 sea necesario iniciar el racionamiento de agua en la zona. Aunque existe la expectativa de que un buen año de lluvia y mejoras en la gestión de los recursos permitan superar la crisis, el Cambio Climático probablemente convertirá a la escasez hídrica en un fenómeno recurrente. Se estima que Chile, en los próximos cinco años, estará entre los países con mayor riesgo hídrico del mundo. En este contexto es necesario preparar nuestra infraestructura para mitigar el impacto que tendrá el Cambio Climático sobre los recursos hídricos y nuestra vida. En años recientes ha crecido el interés por el uso desistemas de captura de vapor de agua o de desalinización. Sin embargo, ambos sufren limitaciones. En los primeros, su rendimiento se ve afectado por el clima local y las fluctuaciones climáticas globales, por lo que podrían ser sensibles a los efectos del Cambio Climático. Por otra parte, en Chile ya operan más de 20 plantas desalinizadoras y otras tantas se encuentran en desarrollo. Sin embargo, estos sistemas también presentan desventajas, pues requieren una gran cantidad de energía y su residuo agua con un alto contenido salino - puede afectar negativamente el ecosistema marino. Dadas las desventajas de estos sistemas y su impacto ambiental, es necesario explorar otras alternativas de mitigación paralos sistemas de suministro de agua. Dos experiencias que podrían servir de referencia para pensar en el futuro de la infraestructura local lo ofrecen Singapur y Hong Kong. Desde hace dos décadas Singapur ha incorporado fuentes alternas de agua potable. Además de su primera planta de desalinización de agua de mar, ese país asiático ha puesto en operación un proyecto de recuperación de aguas servidas bajo el nombre NEWAter. Se trata de aguas residuales que se han purificado utilizanDosistemas de doble membrana, luz ultravioleta y procesos convencionales. El agua es potable, aunque es utilizada principalmente por industrias que
requieren agua de alta pureza. Si bien el costo de estos sistemas puede ser significativo, presenta dos elementos muy atractivos: se aprovecha mejor
el agua disponible y se reduce el impacto ambiental de las aguas servidas. Otra opción atractiva desde el punto de vista ambiental
Son los sistemas duales de suministro de agua. Éstos consisten en dos redes independientes de distribución que abastecen de agua potable y agua no potable a los consumidores de manera simultánea. Hong Konges pionero en el mundo en el uso e instalación de este tipo de sistemas duales de suministro de agua. Desde la década de 1950 se utiliza el agua de mar en Hong Kong para descargar los inodoros. Aunque el sistema requiere construir una red de fontanería separada en cada casa, permite reducir en un 30% el consumo doméstico de agua potable. Este sistema tiene la ventaja de reducir la energía requerida para tratamiento, pues el agua no potable no requiere los mismos niveles de calidad que el agua potable. Para 1999, el número de hogares que emplean sistemas de inodoros con agua de mar era cercano al 80%. Experiencias semejantes, aunque con fuentes de aguas no potables distintas, han existido en
Australia, Países Bajos y China. Aunque estas fuentes alternas de agua podrían robustecer nuestra preparación ante los efectos del Cambio Climático, la legislación que regula el suministro de agua el desarrollo o aceptación de propuestas de este tipo. Esnecesaria una discusión que permita definir criterios técnicos, reglamentos y nuevas normas que permitan diversificar el suministro de agua para incluir el uso de este tipo de sistemas, a la vez que se garantiza la protección de los consumidores. Con los recursos hídricos exigidos al máximo, y un mayor riesgo de sequías prolongadas causadas por el cambio climático, es necesario repensar la forma de enfrentar la crisis hídrica. Aunque las fuentes alternas de agua no son sustitutos de las fuentes tradicionales, su uso permitirá aumentar la resiliencia de la infraestructura y prepararnos para un panorama complejo en el mediano y largo plazo. 4
Dr. Rafael Guerra Silva Profesor Escuela Mecánica PUCV