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Abren convocatoria a programa Fulbright-Conicyt Igualdad de Oportunidades:
Tres profesionales narran su experiencia y dan consejos para postular a una de las becas de doctorado más prestigiosas. Este año beneficiará a 30 postulantes en situación vulnerable.
En Austin, Héctor Chávez, académico en la Usach, compitió con otros chilenos en campeonatos deportivos e integró dos bandas musicales. s:Ü o El académico César Peña formó junto a otros latinoamericanos un grupo de música andina mientras estudiaba en Washington, Seattle. Amigos de todas partes es una de las ganancias que obtuvo Natalie Urrutia en Pensilvania. Ahí estudió junto a su marido y tuvo un hijo.
PAULA LEIGHTON N.
Ala primera clase de su doctorado en Educación en la Universidad de Washington, en Seattle, César Peña llegó con una grabadora. "Le pedí permiso al profesor para grabar, porque mi temor era no entender el inglés", recuerda. Pero cuando terminó la clase, dice, "¡me di cuenta de que entendía todo!".
Peña —hoy profesor asociado de la Facultad de Pedagogía de la U.
Católica de Valparaíso— había ganado la Beca Fulbright-Conicyt Igualdad de Oportunidad (BIO) en 2009 para hacer un doctorado en una universidad estadounidense.
Hijo de un ferroviario y una dueña de casa, estudió en una escuela y un liceo municipal de Chillán para luego titularse de profesor de Filosofía y Magíster en Curriculum en la U. de Chile. Y, tal como la mayoría de los becarios BIO, cuando obtuvo la beca su manejo del inglés era mínimo.
El jueves, Fulbright y Conicyt lanzaron la décima convocatoria a esta beca, que permite a estudiantes de excelencia con vulnerabilidad socioeconómica e insuficiente dominio del inglés cursar un doctorado en cualquier universidad de EE.UU. ubicada entre las mejores 150 de los rankings internacionales ARWU y THE.
Además de pasajes, arancel de estudios, mantención mensual para el becario, su cónyuge e hijos y dinero para comprar libros e instalarse, la BIO incluye para los seleccionados cursos de inglés intensivos en Chile y en EE.UU. antes del doctorado. Esto les permite alcanzar el nivel necesario para rendir los exámenes TOEFL y GRE, y cursar el programa escogido.
Con las cosas claras Héctor Chávez, ex alumno del Liceo Darío Salas, profesor asociado y director del magíster en Ciencias de la Ingeniería mención Ingeniería Eléctrica de la U. de Santiago, cuenta que durante el semestre y medio del curso de inglés en EE.UU., aprovechó de visitar tres universidades para hablar con profesores y elegir la que más se ajustaba a su proyecto.
Su elección fue un Ph.D. en Ingeniería Eléctrica y Computacional en la U. de Texas en Austin.
"Recurrí a la comunidad de becarios Fulbright para conseguir alojamiento", cuenta Chávez, quien destaca el apoyo que los becarios reciben de Fulbright durante todo el proceso. "Te asesoran en la búsqueda de universidades, en cómo escribir el ensayo para postular, te aconsejan sobre cómo deben ser las cartas de recomendación y a quién pedírselas y, una vez aceptado, se encargan de las gestiones administrativas en la universidad... es una asesoría muy importante", subraya.
"Te dan apoyo concreto, por ejemplo, contactar a estudiantes para llegar a un profesor guía o saber más sobre cómo es o te guían en cómo presentarte y hablar con los profesores", añade Natalie Urrutia, ex alumna del Liceo Municipal de Maipú y veterinaria de la U. de Chile.
Tras ser aceptada en las cinco universidades a las que postuló, optó por un Ph.D. en Ciencia Animal en la U. Estatal de Pensilvania. Hoy es investigadora en nutrición de vacas lecheras en el INIA-Remehue, de Osorno.
"Muchos estudiantes que han ganado esta beca luego se han insertado en lugares donde pueden ser motor de cambio, como es el caso de quienes trabajan en la academia" dice el ministro de Educación, Gerardo Varela. Por eso, agrega, este año el número de becas se amplió de 20 a 30.
Para aumentar las posibilidades de ser uno de los seleccionados, los tres becarios coinciden en que es clave tener un proyecto de investigación con un foco muy claro y específico. "Y mostrar una experiencia laboral y académica acorde con ese objetivo", agrega Peña.
Chávez añade que también se valora "tener claro a dónde quieres ir a estudiar, con qué profesor, y que eso coincida con tu proyecto académico", mientras que otro elemento relevante es "la intención de volver a Chile y aportar con lo aprendido al país".
Requisitos ¦ Ser chileno residente en el país y tener grado de licenciado (8 semestres) o título profesional (10 semestres).
- Haber cursado enseñanza media en un establecimiento municipal, particular subvencionado, técnico-profesional, o en particular con beca por situación económica desfavorable.
- Haber cursado el pregrado con crédito y/o beca por situación socioeconómica desfavorable.
- Nivel educacional de los padres igual o inferior a Educación Media completa.
- Promedio de egreso del pregrado igual a 5,0 o más o ser parte del 30% superior de su promoción de pregrado.
La postulación está abierta hasta el 19 de julio. Más detalles en: a
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