Axel Callís y el rol de la ex abanderada ante las tensiones del Frente Amplio:

"No estar en el Parlamento, conspira bastante contra el liderazgo de Beatriz Sánchez"

JORGE ESPINOZA
Bernardo Navarrete analista de la USACH afirma que Sánchez "no es el liderazgo que pareciera darle cohesión y agenda" al FA.
Por Claudio Salinas y Nicolle Peña Nuestra forma de hacer oposición
B ® los pone en jaque (al oficialismo) no la entienden, tienen el binominal en la cabeza". De esta manera ayer Beatriz Sánchez, en Estado Nacional de TVN, habló sobre la derrota política del
Frente Amplio, cuya acusación constitucional contra el ministro de Salud no prosperó en la Cámara. Lejos de hacer una autocrítica ante los cuestionamientos de la ex Nueva Mayoría, donde se acusó apresuramiento y falta de coordinación con las otras bancadas opositoras, la ex abanderada presidencial defendió el libelo y afirmó que la oposición del Frente Amplio "está encontrando su lugar. No hay reglas de cómo hacer oposición, nosotros queremos hacer una política distinta". También indicó: Se está cumpliendo con el deber. Si correspondía una acusación, se presenta; si correspondía participar en una comisión importante como Infancia, se participó". El revés político del bloque, sumado a las tensiones entre Revolución Democrática y el Movimiento Autonomista por pugnas al interior de la FECh, motívaron reflexiones autocríticas de algunos de sus referentes sobre los primeros cien días de su nueva bancada en el Congreso. Alberto Mayol habló de un debut "confuso" y con "poca directriz"; el alcalde Jorge Sharp (MA) llamó a "revisar profundamente nuestra relación dentro del FA"; y el diputado Giorgio lackson (RD) advirtió que "si queremos ser gobierno no podemos seguir cometiendo este tipo de errores ni teniendo estas disputas internas". En ese marco, los ojos se vuelven hacia el liderazgo de Beatriz Sánchez, en su condición de ex carta presidencial. Para Nicolás Grau, economista del FA, una vez que éste desarrolle una institucionalidad más clara para construir posturas políticas colectivas, Sánchez puede asumir un rol más claro. "Ella no es la única líder del Frente, pero tiene un liderazgo más transversal. Para el futuro del FA, para generar una comunidad política, son importantes liderazgos independientes como el de ella", dice. Manuela Veloso, integrante de la asamblea feminista del bloque, confirma que Sánchez participa en esa instancia y sostiene que "es nuestra líder indiscutida". El sociólogo y analista Axel Callís dice que el problema central del FA "es que no logra dar con una forma de tomar decisiones colectivas y acatarlas en forma disciplinada". Y que Sánchez "tiene la legitimidad de estar por sobre el bien y el mal dentro del Frente Amplio, pero el hecho de no estar en el Parlamento, que es donde se está haciendo la política en este momento, conspira bastante en su contra".
"Ella podría ser el comienzo de una forma de institucionalización para regular

los conflictos, pero a esa tarea también pueden aportar gente respetada y con experiencia como un Tomás Moulian" ejemplifica.
En el mismo sentido, el analista Bernardo Navarrete, de la Universidad de
Santiago, señala que "lo que hacen los líderes es darle orden y priorizar en el quehacer diario en el Congreso. Eso no existe" en el Frente Amplio. "Y lo que está claro es que Beatriz Sánchez no ordena, no es el liderazgo que pareciera darle cohesión y agenda", dice.
Navarrete puntualiza que la bancada del FA "es una verdadera legión extranjera donde, más allá del músculo de la denuncia y ser oposición, no hay elementos doctrinarios en común. Está más preocupado del debate con la derecha sobre la agenda valórica, pero no de los temas sustantivos del común de los chilenos como pensiones, salud y seguridad ciudadana". Por su parte, Mireya Dávila, del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile sostiene que Sánchez "no tiene tanto poder dentro del Frente Amplio (...) Por como se han ¡do conformando figuras fuertes como Boric y Jackson, se ve difícil que ella tenga autoridad suficiente para imponer dentro de lógicas democráticas, sus criterios, proyecto político y estrategia". Sin embargo, la experta recalca que "no es indispensable para el futuro del Frente Amplio que ella tome un rol más activo, porque el FA tiene líderes potentes. Afecta que no esté dentro del Congreso, pero si tuviera la convicción, podría imponer agenda a través de los medios".