Autor: Michel Olivares Consultor en SOAINT, diplomado en Hidrógeno Verde de la PUC
Hidrógeno verde
E Cambio de mando, pero el foco sigue estando en materias como la aceleración del proceso de descarbonización de la matriz energética, de acuerdo a los objetivos establecidos para 2030.
Precisamente, el primer discurso del nuevo ministro de Energía, Diego Pardow, apuntó a esa línea, “renovar nuestro compromiso con encontrar los mecanismos para enfrentar de la mejor manera los desafíos que nos pone el cambio climático y aprovechar las ventajas naturales que tiene nuestro país para seguir potenciando las energías renovables”. Sin duda, valoramos estas palabras, pues consideramos fundamental que el sector público y privado trabaje en esta senda.
El escenario en el cual nos encontramos el día de hoy respecto a la crisis hídrica, las emisiones de gases de efecto invernadero GEL, el cambio climático, la dependencia de combustibles fósiles, entre otros, así lo demanda. Desde hace más de 15 años hemos ido aumentado considerablemente el consumo eléctrico, donde la generación con combustibles fósiles lleva la delantera en comparación con la generación hídrica y energías renovables. El desafío es disminuir ese consumo y la tecnología debe ser el elemento clave en la transición energética para la descarbonización. La producción de hidrógeno verde y de amoníaco verde son alternativas concretas que no podemos desperdiciar. Y las proyecciones así lo indican, tenemos la capacidad para lograr ser uno de los países con mayor producción de hidrógeno verde en el mundo.