Autor: Elena Sabat Directora IPG sede Panguipulli.
Columnas de Opinión: Emprender no es para románticos
Columnas de Opinión: Emprender no es para románticos N os llenaron de discursos motivacionales, de recetas mágicas y de frases en tazas que prometen que si sigues tu pasión, el univerni del dinero que puedas invertir. Ni siquiera del conocimiento técnico. Todo eso ayuda, si, pero la verdad incomoda es que vas a tener que trabajar como nunca antes y sin horarios.
Y no solo eso: tendrás que construir equipo, liderar conflictos, leer silencios, detectar talentos ocultos en tus colaboradores, muchas veces tu propia familia, y tener el coraje de decir lo que se tiene que decir, de frente y con empatia. El otro ingrediente invisible es la información. La que está flotando en las conversaciones de tu mercado, en las tendencias globales que parecen lejanas pero que te pueden alcanzar sin aviso. En Panguipulli producimos arándanos que llegan a China, y en las ferias tomamos te chino y usamos cafeteras coreanas. El mundo ya no es un tablero local: es una rea iterconectada donde, tarde o temprano, tu cerveza artesanal compite con multinacionales. Y si no te diferencias, te extingues. so conspirará. Pero cuando hablamos de emprender -de verdad, sin adornos-, lo primero que hay que saber es que esto no es una película de superación personal. Es más parecido a una travesía en la que cada dia se reman aguas desconocidas, con el mapa en una mano y el balde en la otra, sacando agua del bote para no hundirse. Emprender no es para soñadores ingenuos. Es para líderes lúcidos. Porque más allá del capital semilla, del plan de negocios o del apoyo estatal, lo que te sostiene son factores invisibles para la técnica: liderazgo real y perseverancia brutal. Dos condiciones humanas que no se enseñan en ninguna sala. El emprendedor no se mueve por la lógica tradicional. El éxito no depende solo de la idea brillante Y cuando las cosas no salgan como esperabas va a pasar-, necesitaras mas que optimismo. Necesitarás porfia. Perseverancia en su versión más resistente. No rendirse a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera. No se trata de arriesgarlo todo, sino de crecer sin reventar, de invertir con cabeza y avanzar con una visión clara, flexible, pero decidida. Cada persona tiene derecho a construir su propia riqueza, a diseñar su éxito y a redefinirlo cada vez que sea necesario. Fracasar es parte del camino, no el final. Emprender es equivocarse, levantarse y seguir. Es sentirse orgulloso de haberlo intentado con dignidad y con estrategia. Porqueal final, la felicidad integral no es una meta abstracta. Es saber que te jugaste por lo que crefste, que fuiste protagonista de tu historia y que, aun con caldas, te mantuviste en ple. Emprender es eso: una manera valiente de vivir.. C Columna