Autor: Matías BOBADILLA A.
“El lunar tenía un borde asimétrico, estaba descolorido, elevado y era bastante grande”
El coach del equipo de hockey sobe hielo Vancouver Canucks, siguió el consejo de la muchacha y fue el doctor. El lunar era canceroso. C C ] engo una familia maravillosa y pienso que Nadia (Popovici) extendió mi vida. Ella no me sacó de un auto en llamas, sino que de un fuego lento.
El médico me dijo que, si ignoraba esto durante cuatro o cinco años, no estaría aquí”, declaró Brian “Red” Hamilton, ex jugador de hockey y actual asistente de los Vancouver Canucks, quien fue alertado por la aficionada de un lunar maligno que tenía en el cuello.
Nadia Popovici (22) estudia medicina en la University of Washington y el pasado 23 de octubre ocupó los boletos de su padrastro para asistir a un partido entre los Kraken versus los Canucks, válido por la National Hockey League de Estados Unidos. Ella se sentó justo detrás del banco del equipo visitante, en el estadio Climate Pledge Arena de Seattle. Allí comenzó la hazaña que concluyó en estos primeros días de enero. "Asistí a ese juego porque fue el primero en casa de los Kraken. Es un equipo nuevo y mi ciudad (Seattle) ha deseado un club de hockey durante mucho tiempo.
Originalmente soy fanática de los Canucks, que era el elenco visitante en ese partido, por lo que significaba aún más para mí estar allí para ver a mis equipos de hockey favoritos”, cuenta Popovici, desde Seattle. - ¿ Cómo vio el lunar maligno que tenía Hamilton? -Noté el lunar en un momento muy raro. Hamilton pasaba por mi lado de vez en cuando. De repente se detuvo un par de segundos frente a mí y me fijé en la parte trasera de su chaqueta, la que caía un poco por el cuello. Luego me incliné ha- “Nadia extendió mi vida. Ella no me sacó de un auto en llamas, sino que de un fuego lento”, dijo Hamilton.
Nadia Popovici, estudiante de medicina, alertó a Brian Hamilton de un melanoma en el cuello cia adelante y divisé una mancha preocupante en ese sector de su cuerpo. - ¿ Qué era lo preocupante? -El lunar tenía un borde asimétrico, estaba descolorido, elevado y era bastante grande. Fue entonces cuando supe que era algo alarmante. -¿Cómo alertó al entrenador?-Sostuve mi teléfono con el mensaje “el lunar en la parte de atrás de su cuello es posiblemente canceroso. Por favor, vaya a ver a un médico”. Me acerqué lo más que pude al cristal donde él podía verlo y comencé a golpearlo hasta que capté su atención. Tuve suerte de que se detuviera un momento y lo leyera. Estudiado este tipo de cáncer, Nadia? -Fui voluntaria en un hospital donde se estaba tratando a muchos pacientes con cáncer. Vi a varias personas con cáncer de piel y pude estudiar su forma, color y tamaño en general. Eso me permitió usar las imágenes del cáncer de un paciente anterior y compararlo con el lunar de Hamilton y vi muchas similitudes. “Gracias a usted Hamilton se salvó. -Sí, Hamilton vio al médico del equipo de Canuck después de pensar en mi nota y le hicieron una prueba de cáncer. Resultó positivo, por lo que le quitaron el lunar hasta que dio negativo en los tests. La estudiante de medicina recibió US$10.000 como recompensa. Los invertirá en sus estudios.
“Quiero crear conciencia sobre el cáncer de piel”, dice. ¿Cuándo alertarse de un lunar maligno? Juan Marcelo Lefimil, miembro de la Sociedad Chilena de Dermatología, explica que para detectarlos hay que fijarse en la regla ABCDE. "La A es su asimetría, la B son bordes irregulares, la C es color (en una lesión se pueden encontrar dos o más colores), la Des diámetro (que para ser maligno debe ser mayor a 6 mm), y la Ees su evolución”.