"Chile debería poner a Bolivia como prioridad en su política exterior"
"Chile debería poner a Bolivia como prioridad en su política exterior" La profesora titular de la ANEPE Loreto Correa. 14 Conversación La Segunda viernes 22 agosto 2025 L os resultados de las elecciones en Bolivia --presidenciales y parlamentarias del domingo pasado-dejaron algunas sorpresas: habrá balotaje por primera vez en la historia; Rodrigo Paz Pereira, a quien las encuestas daban menos de un 10%, ganó la primera vuelta con el 32% (competirá con el candidato de la derecha Jorge "Tuto" Quiroga); y la izquierda representada por el MAS de Evo Morales quedó fuera juego: cero diputados, cero senadores.
La historiadora, doctora en Relaciones Internacionales y profesora titular de la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos (ANEPE), Loreto Correa, dice tener dos visiones con respecto a la situación boliviana tras los resultados: "Por el lado optimista, veo borrado del mapa al MAS. Esa es la mejor noticia para la región completa.
No hubo fraude y eso es un gran alivio", indica. ¿La mala noticia? El MAS puede que esté dando señales de una rápida rearticulación: "Evo Morales citó para hoy a su gente en el Chapare, en el centro del país, mostrando que él sigue libre para seguir haciendo de las suyas". Correa --especialista en las relaciones chileno-bolivianas, miembro en su momento del grupo de reflexión impulsado por la Cancillería para establecer una política bilateral entre ambos países-señala que Chile debe poner a Bolivia dentro de sus prioridades independiente del resultado de la segunda vuelta presidencial. "En Bolivia queda algo de paciencia" --¿ Qué explica la sorpresa de Rodrigo Paz? Se ha dicho que su campaña modesta en recursos y el haber recorrido toda Bolivia en una camioneta ayudaron bastante. --Rodrigo Paz --y su compañero de fórmula, Edman Lara, un excapitán de policía exonerado de la institución, perseguido y torturado-surge porque quería formar un partido político anticorrupción. Ambos se han adelantado porque han sabido sintonizar con la gente. Paz no solo es hijo de un expresidente, ha hecho la carrera política desde abajo: alcalde, presidente del Consejo Municipal de Tarija, senador. Se gastaron los zapatos en una campaña hecha con sentido y abrazando a la gente por todo el país.
Paz puede ser todo lo refinado que quieras, porque tiene los estudios para ello, pero también tiene la cancha de venir de una familia de políticos, de muchas campañas en el cuerpo; Lara, en tanto, sintoniza con la injusticia. "Tuto" Quiroga no la tiene fácil.
La segunda vuelta tiene a dos líderes con muchísima experiencia y énfasis diferentes, pero a mi entender, dos personas convencidas de la importancia de la democracia viable, no la de cartón. --¿ Qué representa Paz? El escritor boliviano Edmundo Paz Soldán dijo que "una de sus virtudes discursivas ha sido su capacidad de indefinición. Para algunos es un neoliberal de derecha, para otros un centrista tibio e incluso hay quienes lo ven como un delfín de Evo". --Bolivia es un país muy politizado.
Si algo muestra el mapa electoral del domingo pasado es que los bolivianos ni quieren el desfile de un millonario (Samuel Doria), ni quieren al MAS con su estela de violencia y casi 200 muertos a cuestas. Se han ido al centro. Para mí, este binomio (Paz-Lara) está centrado en la gente; no en el maniqueísmo de izquierdas o derechas. Su plan de gobierno tiene cuestiones de sentido común para una Bolivia en el límite.
El conteo de votos muestra que en aquellos departamentos en donde siempre ganó el MAS, ahora ganó la dupla del PDC (Partido Demócrata Cristiano). No calza que sean de derecha: se trata de zonas donde tiene más peso la economía informal, la pobreza y el indigenismo. --Samuel Doria, quien fue tercero en la elección (20%), ya anunció su apoyo a Paz. ¿Eso bastará o habrá un balotaje más cerrado? --Creo que el balotaje será cerrado, porque el apoyo a Quiroga es importante y viene de un sector que lleva 20 años muy golpeado. Es la agroindustria, el sector exportador, el de los pequeños y medianos empresarios, que no ven tan claro que Paz dé espacios concretos.
Todos los sectores están hartos de los abusos del MAS, de sus impuestos, de las coimas que exigen para Loreto Correa: "Chile debería poner a Bolivia como prioridad en su política exterior" "Un cierre de frontera, no solo es un absurdo, es impracticable y con unas consecuencias impredecibles", dice la historiadora y doctora en Relaciones Internacionales. F O T OGR AFÍA : CL A UDIO COR TE S V. Martín Romero E.. "Chile debería poner a Bolivia como prioridad en su política exterior" mover el comercio, y quieren un cambio. Ese sector votará por Quiroga y no por un invitado de un partido político que estaba por desaparecer como el PDC. Porque eso también hay que aclararlo: Paz ha pasado por varios partidos, excepto el MAS. Por otra parte, Quiroga ganó con holgura en el voto en el exterior y en Santa Cruz. Esto es un indicador que Paz no puede perder de vista.
Si actuaran ambos con lógica, deberían terminar formando un gobierno de coalición para extirpar lo que muchos denominan "el cáncer masista". A estas alturas, el desafío no es ganar el 19 de octubre, es dar gobierno a un país que no tiene sistema judicial, que tiene un sistema electoral enredado, que no tiene cancillería ni instituciones sanas en ningún nivel, que padece del crimen organizado transnacional y que el año pasado tuvo el 0,1% de inversión directa de América Latina según la CEPAL. Sume la cuestión de las divisas y el tema del diésel. En Bolivia queda algo de paciencia, pero sobre todo esperanza.
Esa es la realidad. --Evo Morales llamó a votar nulo en la primera vuelta y es evidente que su influencia ha perdido peso, pero ¿ qué cabe esperar de su liderazgo en el mediano plazo? --Si a Evo Morales se le arranca el poder, correrá tras él, a como dé lugar.
No le importa Bolivia, le importa no ir preso, causar alarma, que lo sigan venerando desde un indigenismo mal entendido y mantener su nexo con aquellos que le dan tribuna a él, y a García Linera: Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Por eso, la alianza con Irán, con Rusia, con China. --En la campaña se expusieron algunos problemas que, en principio, son comunes a muchos países del continente: déficit fiscal, inflación, problemas en el acceso a bienes básicos, etc. ¿Cuál es el problema más urgente con el que deberá lidiar el próximo presidente? --Recomponer el Estado de Derecho. En Bolivia, la institucionalidad, los cargos, la ley y la certeza jurídica no existen gracias a dos décadas de una gestión ideologizada. Te doy un solo ejemplo: la pausa ambiental que toda la oposición pedía a gritos por los incendios. Para que se entienda: en plena época de "chaqueo" (quemas en temporada seca antes de sembrar) y dada la situación de incendios del año pasado, que el gobierno declarara desastre nacional para mover recursos. Un equivalente a nuestro estado de emergencia, después de 40 mil hectáreas quemadas. Esto era algo que el presidente podía hacer, que debía hacer.
Pues pasaron meses, sí, meses, para que el Ejecutivo hiciera cumplir la ley, porque eso implicaba limitar el sembradío y la usurpación de tierras en el oriente del país. ¿Dónde está el resguardo a la Constitución, a la propiedad privada, la protección de los parques nacionales? Otro tema: el litio. ¿Cómo es posible que, entre gallos y medianoche, faltando una semana para las elecciones, la Asamblea Plurinacional aprobara un contrato de litio con «Uranium One Group» de Rusia? El MAS teniendo mayoría en el Congreso y en sesión reservada lo aprobó. Eso es el modelo socialista del siglo XXI y el Grupo de Puebla. "Bolivia no es un país fácil" --Como nunca, Chile no fue tema de la campaña presidencial. ¿Cuál es la razón? --Cierto. Es una buena noticia para ambos países.
La razón es todo lo que te vengo comentando: la crisis institucional, una economía que vive al día con unas subvenciones a la compra de combustibles, incluso hasta para la compra del arroz. ¡Un país que produce arroz! Paz habló de mejorar el relacionamiento con Chile. Quiroga lo mismo.
El cómo depende también de quien salga electo en Chile y que la sintonía se institucionalice. --¿ Se puede esperar que las relaciones entre Chile y Bolivia mejoren? --La relación con Chile es determinante para Bolivia. Otra cosa es que en Chile nos hagamos los lesos. Las relaciones con Chile deberían pasar desde los convenios de foto y papel a una cooperación estratégica. Bolivia, y esto hay que decirlo alto y claro, no es un país fácil, pero es un país que hoy nos resulta fundamental. Mientras el norte de Chile decrece en población nacional, al otro lado de la cordillera crece. Los departamentos fronterizos de Bolivia viven conectados con el norte nuestro. Mientras sigamos viéndoles sin pensar integralmente, seguiremos con los mismos problemas.
Esto es más que los puertos, más que la frontera, más que el narco, más que el decreto 265 (apoyo de las FF.AA. en el control fronterizo) y los estados de excepción. --Algunos hablan de cerrar la frontera. --Un cierre de frontera, no solo es un absurdo, es impracticable y con unas consecuencias impredecibles.
Si gana un gobierno de centro o de derecha en Bolivia, al día siguiente Chile no solo debería poner a Bolivia como prioridad en su política exterior, sino buscar complementar la economía del norte grande con la del oriente de Bolivia; fortalecer la relación consular en Santa Cruz, aumentar la capacidad de negocios del país y colaborar con el fortalecimiento institucional de Bolivia en todo aquello que podamos y que nos pidan. Ambos países saldríamos beneficiados porque tenemos márgenes de complementariedad extraordinarios: servicios, retail que ya está en Bolivia, pero también mercados del vino que podrían potenciarse, en fruta, carne, lácteos y azúcar. Respecto del litio, Quiroga habló de crear un área de trabajo conjunto.
Lo veo complicado, pero hay marcos por donde avanzar y está el tema del agua, y los puertos por donde debería salir ese litio. --El exdiplomático Jorge Guzmán ha dicho que Bolivia, por ser una vía de contrabando, tráfico de drogas e inmigración irregular, es un problema para la seguridad de Chile. ¿Cómo lo ves tú? --A estas alturas la droga entra por todas partes y es de todos los tipos. Estigmatizar a Bolivia no es justo para Bolivia, pero tampoco es realista en Chile. Respecto de la migración la debemos atajar por otras vías.
Si abrimos los complejos fronterizos 24/7 para el comercio, ¿para qué, con qué, queremos cerrar las fronteras? ¿ Alguien me puede decir cómo van a cerrar eso? ¿ Con drones? Como dicen los españoles: un poquito de por favor. La Bolivia del MAS no tiene cómo colaborar con Chile en estas materias. Con otra institucionalidad boliviana y con más conocimiento sobre cómo funcionan los espacios de circulación del norte chileno, deberíamos tener muchas herramientas y voluntad real. Lo que hay que hacer con la frontera boliviana son tres cosas: repoblarla, reordenarla y acondicionarla. Se debe revisar la ZOFRI de Iquique, y deben examinarse las políticas de poblamiento urbano en Arica, Iquique y Antofagasta. Hemos llegado a un límite.
El resto son parches. --De todas estas problemáticas, la inmigración irregular parece ser la más urgente. ¿Qué tipo de colaboración realmente factible se le puede pedir a los bolivianos? Como dijo el excónsul chileno en La Paz, Milenko Skoknic, "recordemos que Bolivia tampoco es un país con instituciones que controlen absolutamente todo ". --El excónsul está en la línea correcta. Pero la inmigración irregular en Chile no es de los bolivianos en términos generales, sino de otra gente que cruza por sus territorios para llegar al nuestro. El problema de la migración es regional, no de Bolivia. Ellos también hacen lo que pueden. Mira, este último año viajé a Bolivia varias veces. Viví personalmente cómo han modernizado el sistema, que ha mejorado con cooperación internacional, y es mejor que el nuestro en materia de control de extranjeros en el ingreso al país.
Pero lo que ni ellos ni nosotros logramos es que las fronteras dejen de ser vulneradas por el mundo criminal y por gente que no quiere seguir en Venezuela o huye de la guerrilla colombiana, o de la minería ilegal del oro en Perú. La migración irregular es un problema de seguridad, pero también de desarrollo. La colaboración que debemos impulsar es una sola: todos en línea, todos registrados, todos con patrón biométrico y con tratados de extradición operativos y expeditos.
El resto es retórico. --¿ Qué hacer con nuestra frontera con Bolivia? Se han escuchado ideas como salirse de la convención de Ottawa e instalar minas antipersonales, por ejemplo. ¿Crees que aquello es viable? --Claro que es viable, pero es caro, sería triste y además un retroceso. Gastemos en desarrollo local, en educación para la gente, en mejorar la conectividad, los servicios en la frontera. La soberanía no se recita, se ejerce. Reminar, crear campos de refugiados o cualquier cosa que lleve a que una persona en la frontera termine en las costas como pasó en pandemia es un craso error. A veces leo a algunos en Chile y me pregunto si hemos vuelto a la época de los hunos con Roma. Evite la informalidad y sea constante. Ah, y lo otro: en el siglo XXI, la seguridad se junta con el desarrollo y eso no siempre se entiende. Este diálogo es necesario para fortalecer la frontera en su conjunto. Hoy la estamos pensando como límite territorial y puede que esto sea un error, porque es como la pavimentación de una calle entre municipios: hasta dónde yo y desde dónde tú. El problema es que la calle debe estar transitable y sin baches. Si a Evo Morales se le arranca el poder, correrá tras él, a como dé lugar.
No le importa Bolivia, le importa no ir preso, causar alarma, que lo sigan venerando". En Bolivia, la institucionalidad, los cargos, la ley y la certeza jurídica no existen gracias a dos décadas de una gestión ideologizada"..