EDITORIAL: Salud mental y damnificados
EDITORIAL: Salud mental y damnificados U na dimensión poco abordada por las informaciones sobre el megaincendio de 2024 es el impacto provocado por el desastre en la salud mental de los damnificados y sus familias.
Los problemas surgidos luego de este tipo de crisis suelen anidar lentamente en la medida que no encuentran un tratamiento adecuado, para aflorar años después en la forma de distintas patologías que pueden convertirse en dificultades graves.
De alli que es relevante la respuesta dada por la ministra de Salud, Ximena Aguilera, al oficio enviado por la Comisión Especial Investigadora (CEI) del megaincendio en la Cámara de Diputados, que solicitaba un informe completo sobre la situación de salud mental en la zona afectada.
En su respuesta, la ministra precisa que durante el período comprendido entre febrero y octubre de 2024 se registraron un total de 15.729 acciones en salud mental y apoyo psicosocial en el contexto de los incendios forestales en Viña del Mar, las cuales fueimprescindible como ron ejecutadas por equipos de respuesta inicial y equipos de recuperación (principalmente por duplas psicosociales y COSAM móviles). Estas acciones incluyeron 1.851 atenciones de primera ayuda psicológica e intervención en crisis, 12.034 consultas de salud mental asociadas a emergencias o desastres, y 996 intervenciones psicosociales grupales.
Además, los equipos de respuesta realizaron 269 pesquisas activas de necesidad de cuidado de salud mental, 338 acompañamientos psicosociales individuales, 31 pesquisas de riesgos psicosociales, 55 actividades de psicoeducación y 155 acciones clasificadas como "otras". En el marco global del megaincendio, este trabajo resulta tan imprescindible como el levantamiento de viviendas, y su seguimiento debe estar asegurado para los próximos años, como confirma la propia ministra en su respuesta, como una forma de garantizar la atención integral que requieren los damnificados. Este trabajo es tan el levantamiento de viviendas, ysu seguimiento debe estar asegurado para los próximos años, como la atención integral que merecen los damnificados..