Autor: José Luis Franco Montaña, rector Santo Tomás Chillán
COLUMNAS DE OPINIÓN: Lo que el invierno nos recuerda en Ñuble
COLUMNAS DE OPINIÓN: Lo que el invierno nos recuerda en Ñuble Columna JoséLuis Franco Montaña, rector Santo Tomás Chillán Lo que el invierno nos recuerda en Ñuble ace solo unos días, las regiones del centro H: de Chile enfrentaron una de las jornadas más frías de las últimas siete décadas, según lo confirmó la Dirección Meteorológica de Chile. En Chillán, el termómetro descendió hasta los -9,3 grados, la temperatura más baja desde 1947, año que. quedó inscrito coPorque detrás de cada moreferencia histócifira hay historias, rica para la zona.
E Como era de esperostros y vidas que rarse, el Ministerio esperan más que un de Desarrollo Social Código Azul. ha activado el Código Azul, una medida que, aunque oportuna, no fue suficiente para evitar la tragedia: un hombre en situación de calle perdió la vida en una comuna precordillerana de nuestra región, expuesto a las condiciones extremas de la intemperie. Más allá de la noticia puntual y del fenómeno climático que la provocó, este hecho desnuda una realidad que va mucho más allá de un frente de mal tiempo. Ñuble no solo sufte el rigor del invierno; también enfrenta desafíos estructurales que siguen postergando a miles de sus habitantes.
La Encuesta Nacional de Empleo (ENE), elaborada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), acaba de informar que la tasa de desempleo en la región alcanzó un 10,4% en el trimestre marzo-mayo de 2025, una de las más altas a nivel país. Sia esto sumamos las cifras de pobreza por ingresos, Sia esto sumamos las cifras de pobreza por ingresos, Sia esto sumamos las cifras de pobreza por ingresos, la situación se torna aún más compleja. Según el último estudio de la encuestadora CASEN, Ñuble encabezó el ranking nacional en 2023, con un 12,1% de su población bajo la línea de la pobreza. Un dato que duele, pero que también interpela. Somos la región más joven admin trativa y políticamente hablando, pero eso no puede seguir siendo una excusa para permanecer en los últimos lugares en indicadores sociales claves. La conjunción de estos tres datos --clima extremo, desempleo y pobreza= revela una urgencia ineludible: la necesidad de políticas públicas integrales que vayan más allá de la emergencia. Se requiere inversión sostenida en educación, empleo digno, acceso a vivienda y servicios básicos que garanticen calidad de vida. En medio de este panorama, iniciativas como los trabajos de invierno que desarrollan distintas instituciones de educación superior, cobran un valor especial. No solo representan una oportunidad de aprendizaje desde los entornos reales para los estudiantes, sino que también son un puente entre la teoría y la dura realidad social de muchos sectores de nuestra región. Ellos son testigos directos del frío, de la calefacción a leña que aún predomina en las casas más vulnerables y de la ropa de lana que sigue siendo el único abrigo para muchas familias. Estos encuentros entre la academia y el territorio son una señal de que es posible construir conciencia social y generar cambios reales.
Porque detrás de cada cifra hay historias, rostros y vidas que esperan más que un hay historias, rostros y vidas que esperan más que un hay historias, rostros y vidas que esperan más que un hay historias, rostros y vidas que esperan más que un hay historias, rostros y vidas que esperan más que un Código Azul..