Vulnerabilidad de Chile ante los efectos del Cambio Climático: La urgencia de una infraestructura resiliente para climas extremos
Vulnerabilidad de Chile ante los efectos del Cambio Climático: La urgencia de una infraestructura resiliente para climas extremos El cambio climático o más bien, la crisis climática climática ya no es una amenaza amenaza lejana. Sus efectos se sienten con tuerza en distintas distintas partes del mundo y cada vez más intensamente. intensamente.
En este escenario global, global, Chite es particularmente particularmente vulnerable: según la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), (CMNUCC), el país cumple con 7 de los 9 criterios que definen definen a una nación como particularmente vulnerable frente al cambio climático. Esta condición nos impone avanzar decididamente en la mitigación de emisiones y, al mismo tiempo, fortalecer fortalecer nuestras capacidades de adaptación. Chile pierde anualmente anualmente más de 4.500 millones de dólares a causa de desastres desastres naturales. Esta cifra, proveniente de la Hoja de Ruta para la Resiliencia de la Infraestructura en Chile, es solo un síntoma vez más extremo. Olas de calor, sequías prolongadas, lluvias torrenciales y deslizamientos deslizamientos de tierra ya no son eventos aislados, sino parte de una nueva normalidad normalidad que exige respuestas inmediatas.
Desde nuestra experiencia experiencia en estudios de cambio cambio climático, glaciología y riesgos geológicos, hemos observado que, en las zonas zonas de alta montaña, donde donde nacen muchos de los ríos que alimentan a comunidades, comunidades, industrias y ecosistemas, la información es escasa y los cambios, acelerados. acelerados. La pérdida de permafrost permafrost y la reducción en la acumulación de nieve alteran alteran la disponibilidad de agua y exponen el terreno a nuevos peligros naturales. naturales. Esta transformación no es abstracta: impacta directamente directamente en la seguridad de las personas y en el funcionamiento funcionamiento del país. Es momento de dejar atrás la lógica de reacción frente al desastre. La resiliencia resiliencia no se trata solo de reconstruir lo perdido, sino de anticiparse, planificar y actuar. Eso implica diseñar infraestructura que resista, promover una ocupación territorial informada por el riesgo, e invertir en monitoreo, estudios y herramientas herramientas de adaptación. Todo esto requiere colaboración colaboración entre instituciones, empresas y comunidades. Chile debe avanzar hacia hacia una infraestructura flexible, flexible, segura y preparada. No solo por los costos económicos económicos que enfrentamos, sino por la vida y bienestar de quienes habitan estos territorios.
Hacemos un llamado llamado al Estado, al sector privado y a la academia a trabajar juntos, desde hoy, para construir un país verdaderamente verdaderamente resiliente. públide una crisis más profunda: la creciente vulnerabilidad de nuestras infraestructuras infraestructuras frente a un clima cada.