Editorial: La ironía de los 12 años para 12 km
Editorial: La ironía de los 12 años para 12 km E I anuncio de la "recomendación satisfactoria" (RS) que entregó el Ministerio de Desarrollo Social para el proyecto de doble via en la Ruta El Tepual deberia ser un motivo de celebración. Sin embargo, la noticia ha sido recibida con una mezcla de escepticismo y preocupación por parte de la comunidad de Puerto Montt. El motivo es claro: la proyección de 12 años para remodelar apenas 12 kilometros de esta ruta crucial. Ese ritmo equivale a avanzar un kilómetro por año, lo cual es un despropósito evidente frente a la urgencia que vive toda esa zona. La congestión vehicular es un calvario diario, y cada vez mayor, para miles de personas, afectando directamente su calidad de vida y productividad.
Además, la Ruta El Tepual no es cualquier camino; es la principal arteria de acceso desde la capital regional al aeropuerto más importante de Los Lagos, una puerta de entrada y salida vital para el sur austral. Mantenerla en obras por mas de una década es inaceptable. Dirigentes sociales del sector de El Tepual han expresado, con justa razón, sus legítimas dudas. No sólo les preocupa la desmedida extensión en el tiempo de las obras, sino también la ausencia de rutas alternativas que puedan aliviar la carga vehicular cuando los trabajos comiencen. Esta falta de planificación permite augura un caos vial que podría paralizar un sector ya sobrecargado, impactando desde el comercio local hasta la vida familiar. Puerto Montt se ha erigido como la principal ciudad del sur austral del pais, un franco y vibrante polo de desarrollo dinámico. Su vertiginoso crecimiento, impulsado por industrias como la acuicultura, el transporte marítimo y el sector servicios, permite fácilmente prever que los 12 años de construcción de la doble via serán un problema de marca mayor.
Mientras en Santiago se construyen lineas de Metro a una velocidad envidiable, que Puerto Montt deba esperar 12 años para ver renovados 12 kilómetros de una vía tan vital llega a generar más que incomodidad; produce frustración y la sensación de un desarrollo asimétrico que margina a las regiones.
Es hora de que la autoridad central responda a la realidad y a las necesidades de Puerto Montt con la celeridad y la visión que la ciudad merece.. Algo no cuadra bien en el proyecto de la doble via a El Tepual. Hay incomprensión de la urgencia y desprecio hacia el sur austral. E Editorial