Un combate incrustado n la historia naial dl mundo
Un combate incrustado n la historia naial dl mundo ese día en un encuentro tan desigual? ¿ Qué ánimo destilaban destilaban los tripulantes tripulantes de una desta rta lada fragata que sabían que iban al sacrificio? PARA PARA dimensionar la hazaña de Iquique, esta vez presento a mis lectores un documento documento inédito que intenta reflejar lo que sucedió en un día que está destinado a marcar surco y camino en la historia naval del planeta. Se trata de la carta de un tripulante tripulante de la Esmeralda, testigo de primera fila de un combate combate encarnizado, sangriento, desigual y de funestas consecuencias. consecuencias. El contenido medular de esta carta pertenece al guardia guardia marina Vicente Zegers Recasens enviada a su padre padre una semana después del Combate Naval de Iquique.
En ella, queda de manifiesto que hay hechos inefables, pues las palabras (por muy bien escogidas escogidas que sean) no pueden traslucir las emociones... o la crudeza de un episodio como el de aquel 21 de mayo. QUERIDO PAPÁ: No sé siesta carta llegará llegará a sus manos, pero quiero relatar/e el desigual combate combate habido entre el blindado peruano Huáscar y nuestra débil pero gloriosa corbeta Esmeralda.
Es natural que no relate muchos de los incidentes incidentes de esta horrible tragedia... pero es natural, debido en parte a lo intenso y sensible que me resulta relatar escenas terribles, infernales,.. infernales,.. que sería necesario verlas para comprenderlas. (... ) Es natural que nuestra nuestra gente, al ver la inmensa superioridad del enemigo hubiese desmayado, perdido perdido el entusiasmo o haberse rendido, Pero no fue asi... y al ofrse el toque de corneta todo el mundo corrió a sus puestos y con la esperanza que se experimenta al defender defender la patria querida.
Cuando el enfrentamiento enfrentamiento de las naves era inminente, inminente, mi capitán Prat lanzó una arenga que vino a fortalecer el propósito de nuestros tripulantes, tripulantes, al expresarse en estos términos: Muchachos: la contienda contienda es desigual, pero ánimo y valor. Hasta ahora ningún buque chileno ha arriado su bandera y espero que no sea ésta la ocasión de hacerlo. Por mi parte, os aseguro que mientras viva tal cosa no sucederá, y después que yo falte, mis oficiales sabrán cumplir con su deber.
Querido papá, sería necesario... necesario... que usted se hubiera hubiera hallado en un caso semejante semejante para comprender el entusiasmo que es capaz de despertar un Viva la Patria, lanzado por un jefe querido, en aquellos supremos instantes. instantes.
A muchos les vi lá grimas en los ojos... Nos habíamos acercado mucho a tierra y nos sentíamos seguros de los espolonazos, cuando una lluvia de balas de cañón y rifle lanzadas desde tierra... la primera sangre que corrió fue causada por esos disparos, disparos, Una de las granadas dio en el estómago a uno de los sirvientes de un cañón, matándolo matándolo en el acto. Casi a las dos horas del combate, el Huáscar acertaba su primer balazo, el que penetró por babor y llevándose ¡ apierna de uno de los marinos. Yo me encontraba próximo próximo a la amura de estribor (costado del buque) con el teniente Uribe, cuando una granada dio en ella hiriendo gravemente a un sirviente del cañón en que yo estaba.
En ese momento se me acercó el teniente Serrano y me dijo: Vamos a la cámara cámara a tomar la última copa: Lo seguí y luego de darme un abrazo, me dijo algunas palabras que indicaban lo resuelto que se encontraba a todo.
Luego, subíporla escotilla escotilla a cubierta, impresionado impresionado por sus palabras, cuando encontré a un mecánico que también me abrazó, diciéndome: diciéndome: Señor Zegers, adiós... llegó la hora de darse hasta el final: Le aseguro, querido papá, que aquellas escenas eran de partir el alma a cualquiera. cualquiera. Cuando me encontraba encontraba ya en cubierta el combate estaba en su momento más cruel.
Jorge Abasolo Periodista, Diplomado en Marketing Político y Miembro de la Sociedad de Historia y Geografía de Chile. jorgeeibar13gmail. com ) Primera Parte ¿ Qué sucedió Un combate incrustado n la historia naial dl mundo El guardia marina Vicente Zegers, Zegers, fue testigo de primera fila de aquel Combate del 21 de mayo de 1879 (continúa próxima edición).