Autor: Por Marta Quinteros
China se suma a la lucha por el control del Ártico
China se suma a la lucha por el control del Ártico E CHINARE CHINARE Investigación científica, patrufundador de The Pechko Persllas conjuntas con Rusia cerca de Alaska y una creciente presencia económica.
China está entrando, y con rapidez, dice la cadena BBC. pective, quien agrega que "Estados como Reino Unido, con una presencia histórica en el Ártico, tienen una mejor relación con la región que China". Cuando se denomina como Un lugar en la mesa un actor "casi ártico", "significa que China se considera un Pese a la presión que el gigante asiático ha puesto en el Polo Noractor clave en el Artico y quiere un puesto en el Consejo Artico, te, sus actividades hasta ahora la organización internacional han sido "muy exageradas" al secompuesta por ocho Estados arfalar que China esta "comprando ticos, aunque no tiene la mayor el Artico", debido al "lenguaje influencia en el Ártico", dice a alarmista en términos de escala, La Tercera Kiel Pechko, analisalcance y riesgo", según concluyó ta de asuntos internacionales y el estudio "Abordando las narrativas sobre las inversiones chinas en el Ártico", publicado por investigadores de la Universidad de Harvard en junio pasado.
La conclusión de los investigadores viene a partir del autoproclamado papel de "Estado casi ártico" de China, siendo que, de 57 proyectos chinos en el Ártico, sólo 18 están activos, y apenas uno está en Canada. Muchos proyectos están cancelados, estancados o nunca se concretaron. Y los datos de inversión. que apuntan a más de 90 mil millones de dólares, están inflados con iniciativas fallidas, asegura el estudio.
En Canadá, China tiene presencia en una mina de níquel activa en Nunavik, y dos proyectos de desarrollo mineral en Yukón y los Territorios del Noroeste que han estado "paralizados durante muchos años". "Es evidente que la mayor parte de esta ansiedad se centra en lo que podría ser, En julio y agosto de 2024, el hielo del Mar Ártico se rompió bajo el acero de tres pesados rompehielos: el Xuelong 2, el Ji Di y el Zhong Shan Da Xue Ji Di.
Los tres buques ensayaron un paso libre por la zona que rodea al polo norte pero al mismo tiempo enviaron una señal contundente. "El Artico se está volviendo chino", tituló la agencia de noticias rusa RIA Novosti en octubre.
En el Ártico el deshielo a causa del cambio climático está abriendo nuevas rutas comerciales y zonas ricas en minerales, lo que ha vuelto a colocar a la región polar en el centro de la geopolítica global.
Mientras Estados Unidos y Rusia compiten por influencia, presencia militar y recursos estratégicos, a la batalla se sumó China, que se ha posicionado como un actor "casi ártico" impulsando su "Ruta Polar de la Seda". En 2013, se concedió a China el estatus de observador en el Consejo Ártico, una organización intergubernamental de las ocho naciones árticas: Canadá, Estados Unidos, Rusia, Noruega, Dinamarca, Finlandia, Islandia y Suecia. Cino años después, BeiJing anunció su estrategia para la Ruta de la Seda Polar. Esta preveia una mayor participación en la gobernanza del Ártico, junto con la exploración minera y científica de la región.
La iniciativa polar forma parte de la estrategia Iniciativa de la Franja y la Ruta, emprendida por el Presidente XI Jinping desde 2013, y pretende establecer un corredor que cruce el Círculo Polar y conecte al país asiático con tres grandes polos económicos: América del Norte, Asia Oriental y Europa Occidental.
Desde entonces, China se ha proclamado un "Estado casi ártico", a pesar de no tener ningún territorio en las zonas polares, Mientras tanto, EE.UU. busca reforzar su presencia militar en Groenlandia y Rusia esta moderizando sus bases clave como Kola.
Pero, lejos de ser solo un punto muerto entre antiguos enemigos de la Guerra Fría, ahora China busca impulsar una vía de comercio por los mares alrededor del Polo Norte, que permita crear un paso de navegación alternativo al Canal de Suez egipcio, según el sitio InfoBRICS. Las rutas marítimas se verían abiertas por el calentamiento global, lo que permitirá abreviar el tiempo y el costo del intercambio comercial con algunos de sus principales socios. Y aunque no tiene costa ártica, lo que si tiene Nagurskoye y la peninsula de son rompehlelos, estaciones de Dos rompehielos chinos desplegados en el Ártico.
China se suma a la lucha por el control del Ártico no en lo que realmente ha sucedido", determinaron los investigadores del Centro Belfer para la Ciencia y los Asuntos Internacionales de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, la escuela de políticas públicas de Harvard. Aún con pocos logros concretos, China se mantiene al acecho.
Sherri Goodman, investigadora senior del Instituto Polar y del Programa de Cambio Ambiental y Seguridad del Centro Internacional Woodrow Wilson, comenta a La Tercera que "China siempre tiene la vista puesta en el Ártico". "De hecho, Australia y Nueva Zelanda tienen ejercitos, y la Guardia Costera informa haber visto muchos más buques chinos en el Océano Ártico en la última década que en los años 80 y 90. En resumen, China ha aumentado su capacidad militar y también su alcance económico", agrega la autora del libro Multiplicador de amenazas: clima, liderazgo militar y la lucha por la seguridad global, de 2024. Goodman añade que China "está desarrollando su estrategia y tienen planes a muy largo plazo, y ahora han estado aumentando, al mismo tiempo, su capacidad para romper el hielo.
Están aumentando sus capacidades navales y militares en general, no solo en el Artico, sino también en el Pacifico, en el Océano Antártico, para aumentar su capacidad de defensa y de extender su alcance más allá de sus aguas territoriales". Kathryn Lavelle, profesora de Asuntos Mundiales en la Case Western Reserve University en Cleveland, Ohio, plantea que "China es una gran potencia o aspira a serlo. Por lo tanto, desea en el Artico lo mismo que cualquier otra gran potencia: un lugar en la mesa.
Así que cuando el hielo se derrita y se tomen las decisiones sobre la navegación. la pesca y la extracción de minerales, China querrá estar presente y tomar decisiones", "A mucha gente en China, por decirlo de alguna manera, le gusta comer pescado. Así que el su "asociación estratégica sin límites" en 2022, en esta ocasión el Dragón necesita más al Oso. Ello, por la importancia histórica de la Federación Rusa en el Polo Norte. Los inicios de Rusia en el Ártico son de larga data, con exploraciones y asentamientos que se remontan al siglo XI.
La creciente militarización, sumada a las sospechas de esplonaje y la competencia por los recursos naturales del Polo Norte, están amenazando con desestabilizar una región que durante años se mantuvo en relativa calma bajo la lógica de "Alto Norte, baja tensión". Los movimientos de China y Rusia tienen preocupados a Estados Unidos, Dinamarca y los pueblos nativos del Ártico. Estados Unidos está en modo de alerta ante la unión sino-rusa.
De hecho, el deseo de Trump de comprar Groenlandia se basa en parte en preocupaciones de seguridad sobre el acceso chino y ruso al Ártico, según el portal The Conversation. pais tiene un interes muy específico en el resultado una vez que se abra la pesca. También China tiene mucha tecnologia para minerales de tierras raras. Y se cree que gran parte de la mineria se realizará en el Ártico. Eso no está ocurriendo ahora, pero se cree que eso es lo que tendrán", vaticina Lavelle. Gran potencia polar En materia polar, las dos potencias asiáticas están juntas pero no revueltas. Como China quiere convertirse en una "gran potencia polar", le conviene cooperar con los países árticos. Y Rusia es el único país ártico que permite una presencia significativa de China.
Asi que el conocido eje del "Dragón y el Oso" ha estado cooperando más en el Ártico, pero su unión es limitada, estratégica y llena de tensiones, según el Instituto Danes Para Estudios Internacionales (DIIS). A diferencia de la mayoría de los proyectos que China y Rusia han anunciado desde que declararon La iniciativa polar de China pretende establecer un corredor que cruce el Círculo Polar y conecte al país asiático con tres grandes polos económicos: América del Norte, Asia Oriental y Europa Occidental. 57 Proyectos tiene China en el Artico, pero solo 17 están activos, según un estudio de Harvard.. La iniciativa polar de China pretende establecer un corredor que cruce el Círculo Polar y conecte al país asiático con tres grandes polos económicos: América del Norte, Asia Oriental y Europa Occidental. 57 Proyectos tiene China en el Artico, pero solo 17 están activos, según un estudio de Harvard.