Autor: Por Joaquín López Barraza
«Esto no tiene precedentes en el siglo XXI»
«Esto no tiene precedentes en el siglo XXI» La colectividad árabe palestina de La Serena se sumó a una jornada internacional en apoyo a Palestina, convocada en diversos países como un día global de solidaridad.
La actividad, realizada en el Faro Monumental, tuvo como eje central el respaldo a iniciativas de ayuda humanitaria que buscan llevar alimentos y medicamentos a Gaza, principalmente a través del paso por Egipto. «Nosotros hicimos esta actividad y esta manifestación sumándonos a un llamado que se hiciera a través del mundo en apoyo a la ayuda humanitaria que se está haciendo a pie», explicó Karima Salamé, tesorera de la colectividad, quien añadió que parte de la campaña está siendo canalizada desde Chile por medio de la Fundación Belén 2000 y de la doctora Chomalín, «que incluso se encuentra ella dentro de los que hoy día están tratando de entrar a Gaza». A casi dos años del inicio de la ofensiva militar de Israel en la Franja de Gaza, Salamé fue tajante: «Llevamos 20 meses desde que partió este genocidio y no podemos quedar indiferentes». Valoró además la alta convocatoria de la manifestación del domingo: «El 2024 hicimos múltiples actividades por Palestina y no habíamos tenido ni la cobertura ni la participación de la comunidad como fue ayer». «ESTO ES UN GENOCIDIO» Consultada por la situación actual en Gaza, la dirigenta recalcó la magnitud de los ataques y sus consecuencias: «Contar con más de 55 mil vidas arrebatadas por Israel, esto es un genocidio que no tiene precedentes en el siglo XXI. Más de 16 mil personas son niños. Han roto sus ilusiones, cientos de miles han quedado mutilados». También acusó ataques a infraestructura civil y organismos humanitarios: «Israel no ha cumplido con ningún convenio sobre las guerras. Atacó hospitales, escuelas, organismos internacionales, ONG.
Hoy día mata de hambre a la población que ha podido resistir los horrores de este asalto, porque no puede haber guerra sin ejército». A su juicio, el conflicto no se reduce a los últimos 20 meses: «Esto parte en el año 48. Por lo tanto, son 77 años de ocupación, donde en diferentes etapas de la historia han masacrado distintos pueblos, distintos lugares.
El éxodo, la Nakba que se genera en el año 48, fue el inicio de una catástrofe sin precedentes para el pueblo palestino». CHILE Y LA COMUNIDAD PALESTINA Si bien Salamé no tiene familiares directos en Palestina, reconoce que muchas personas en la región sí mantienen esos vínculos: «Hay muchos que tienen familiares directos o en segunda y tercera generación. Imagínese que Chile es la colonia palestina más grande del mundo. Es imposible no tener a alguien vinculado, no solo en sangre, sino también en el espíritu.
Esa familia nos espera: espera de nosotros estas movilizaciones, el apoyo económico y, sobre todo, el apoyo solidario». Respecto al rol del gobierno chileno, valoró la posición del presidente Gabriel Boric: «Ha condenado esto desde un principio.
Nosotros, como parte de la colectividad palestina en Chile, estamos muy agradecidos de la actitud que ha tomado este gobierno». No obstante, indicó que esperan pasos más decididos: «Queremos que, de alguna manera, pueda romper relaciones con Israel, entendiendo lo que eso significa.
En la cuenta pública, el presidente fue muy perentorio en buscar limitar las importaciones que hace Israel, que son de territorio ocupado». «Esto no nos puede dejar indiferentes» Karima Salamé concluyó con una reflexión dirigida a la comunidad internacional. «Queremos que las personas recuperen la sensibilidad, que seamos más humanos», dijo, subrayando la importancia de mantener la solidaridad con el pueblo palestino.
En esa línea, expresó su inquietud frente a la normalización del uso de la fuerza en conflictos internacionales: «Esto no nos puede dejar indiferentes».. Karima Salamé, tesorera de la colectividad árabe palestina, valoró la masiva manifestación realizada en El Faro realiza hace algunos días y pidió romper relaciones con Israel. «Queremos que las personas recuperen la sensibilidad, que seamos más humanos», señaló. DOLOR EN GAZA