Autor: JUAN PABLO GUZMÁN
Capacidad de gobernar juntos: El desafío opositor pendiente frente a las elecciones
Capacidad de gobernar juntos: El desafío opositor pendiente frente a las elecciones OLLAVRACNÁITSIRC “Primero tenemos que ganar”. Esa fue la frase más repetida ayer por el candidato presidencial del Partido Republicano, José Antonio Kast, cuando fue consultado respecto de los dichos de algunos integrantes de Chile Vamos, que esta semana marcaron su distancia sobre un eventual gobierno en conjunto en caso de que sea él quien se imponga en la elección.
Este fin de semana, tanto el senador de Evópoli Felipe Kast, en “El Mercurio”, como el timonel de RN, el senador Rodrigo Galilea, afirmaron que si los republicanos ganan, debiesen gobernar con sus aliados de pacto solamente. La ofensiva de Chile Vamos no es casual y responde a una misma estrategia: diferenciarse con republicanos, mostrándose como los más capaces de ofrecer gobernabilidad.
Pese a ello, en la coalición hay quienes dudan de que sea la mejor estrategia ponerse en una situación de derrota de cara a las elecciones de noviembre, uno de los motivos por los que Matthei aún no ha dicho con claridad que respaldaría a Kast en una segunda vuelta.
De hecho, ayer, en una pauta a la misma hora, la candidata volvió a eludir el tema y aseguró que “nosotros vamos a pasar a segunda vuelta y ganar, por lo que ni siquiera me pongo en ese escenario”. En tanto, Kast respondió ayer incorporando al economista Bernardo Fontaine (ind. ) a su equipo (ver B 1). Desde su comando acotan que esta es una señal de que las figuras “más técnicas” van a apoyar al candidato de oposición que esté mejor posicionado para vencer al oficialismo.
La compatibilidad de proyectos Con todo, los dichos abrieron un debate que lleva algún tiempo rondando entre los partidos de derecha, ¿son capaces de gobernar en conjunto? Lo ocurrido en el Consejo Constitucional para algunos es una señal de alerta, pues no se hizo valer la mayoría que obtuvieron como sector, argumento con el que en la centroderecha critican al P. Republicano, que obtuvo la mayor parte de los consejeros.
Aun así, especialmente en Chile Vamos, han sido enfáticos en que deberían congregar al 62% que estuvo por el Rechazo al texto constitucional elaborado por la Convención en 2022, al estilo de lo hecho por la Concertación durante el retorno a la democracia. Defienden que hoy son más las similitudes que las diferencias y que comparten ideas en torno a la urgencia de combatir la delincuencia y retomar el crecimiento económico. Sin embargo, las diferencias también se han hecho evidentes, especialmente en partidos como Evópoli, Demócratas o Amarillos. que son los que han marcado más distancia. Incluso, hace un mes la propia Matthei cuestionó las credenciales democráticas del P. Republicano en una entrevista en Radio Infinita, donde, a raíz de la denuncia de una campaña sucia en su contra, afirmó que eso “pone en duda la idoneidad de los líderes del P.
Republicano, porque son campañas propias de los regímenes autoritarios”. Consultado Kast ayer por si siente la responsabilidad de congregar a toda la oposición en un mismo proyecto, el candidato respondió que “nosotros estamos invitando a todos los chilenos a sumarse a un proyecto de cambio radical (... ). Pero, de nuevo, primero hay que ganar, y si nosotros ganamos, hay que sumar a las mejores personas que estén disponibles libremente.
Nosotros no buscamos un cuoteo”. Para el director del IES, Claudio Alvarado, “sí es perfectamente posible pensar en un proyecto en conjunto de la derecha. ¿Por qué? Porque a diferencia de lo que ocurría con la nueva izquierda, las coincidencias programáticas en el sector son muy grandes.
No hay dos proyectos radicalmente distintos, a diferencia de lo que ocurría originalmente entre el Frente Amplio y el Socialismo Democrático”. Agrega que “es evidente que hay diferencia en los estilos” y que “las relaciones entre los dirigentes no son del todo buenas”, lo cual cree que es lo que hay que “pulir”. Sobre los dichos de Matthei, dice que “hay que leerlos en el contexto del fragor de la campaña y que los candidatos a veces se dejan dominar por el ánimo faccioso y las disputas propias de la coyuntura política”.. Aunque en ambas fuerzas reconocen que se necesitarán mutuamente para enfrentar un eventual balotaje contra Jara, las desconfianzas aún priman en el sector, recordando lo ocurrido en el Consejo Constitucional.
Ante la distancia marcada por dirigentes de Chile Vamos sobre participar en una administración liderada por Kast Evelyn Matthei, en una pauta donde detalló su plan para crear un millón de empleos, volvió a eludir el tema de apoyar a Kast en una segunda vuelta, pues dijo que no se pone en ese escenario. Kast resaltó la incorporación de Bernardo Fontaine a su equipo frente a las críticas en Chile Vamos, aunque advirtió que primero se debe ganar antes de pensar en quiénes integrarían un eventual gobierno.