Autor: Marcelo González Cabezas

Ludopatía en Chile: las mujeres muestran más riesgo patológico
Ludopatía en Chile: las mujeres muestran más riesgo patológico La adicción al juego en Chile expone cifras alarmantes, pues las personas afectadas por esta situación quintuplican a las que mantienen problemas patológicos relacionados con el consumo de alcohol y de drogas. Y pese a ello no hay instancias públicas para el tratamiento de la ludopatía, así como tampoco recursos y visibilidad para facilitar el acceso de pacientes.
Así lo expone el terapeuta Daniel Pinto Naranjo, del Centro Walnut, entidad dedicada al tratamiento de la ansiedad y de las adicciones, y que promueve la cultura del buen trato en el abordaje de esta condición. Advierte que, en este panorama, las mujeres podrían ser la población más amenazada. Y no sólo porque los números muestran que adquieren hábitos adictivos de forma más frecuente que los hombres, sino que también porque, tradicionalmente, tardan mucho más en buscar ayuda profesional.
“Las mujeres con adicción suelen consultar en etapas más graves de deterioro, ya que existe un estigma social mayor hacia ellas que hacia los hombres La presión social que recae sobre las mujeres, en especial en torno al rol de madre o cuidadora, hace que oculten sus conductas adictivas durante más tiempo. Y cuando piden ayuda, muchas veces ya hay consecuencias severas en los niveles psicológico, social y económico”, dice el terapeuta en rehabilitación de adicciones.
Y aunque en el país hay centros de salud mental del sistema público que pueden abordar estas adicciones, muchas veces no cuentan con programas específicos, personal especializado ni Daniel Pinto naranjo Terapeuta del centro Walnut capacidad de respuesta.
Por ello, Pinto dice que “se requiere con urgencia de una estrategia nacional que incluya prevención, detección precoz y tratamiento integral, con campañas educativas que derriben el estigma”. A diferencia de otras adicciones más visibles, la ludopatía se desarrolla en silencio. Y puede llevar a un endeudamiento grave, a la pérdida de vínculos afectivos a y un deterioro emocional profundo que, en casos extremos, desemboca en pensamientos o actos suicidas.
“Puede parecer más solapada, pero sus consecuencias suelen ser igual de destructivas, incluso con riesgo vital Y en la actualidad, la ludopatía está siendo más visible para la sociedad, pero aún faltan datos para generar cruces que aporten evidencia más contundente respecto a la situación de la última década.
Con todo, es importante entender que es un Graves consecuencias del juego excesivo La ludopatía se caracteriza por la participación reiterada y descontrolada en juegos de apuestas, que terminan dominando la vida del individuo, manifestándose como una incapacidad progresiva para resistir el impulso de jugar y afectando de manera grave los ámbitos social, laboral, familiar y económico de quien la padece. Al igual que otras adicciones conductuales o químicas, el juego compulsivo estimula el sistema de recompensa del cerebro de manera potente, especialmente debido a la naturaleza intermitente e impredecible de las ganancias y pérdidas. Tal estimulación constante puede generar una dependencia comparable a la provocada por sustancias como el alcohol o las drogas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la adicción al juego de azar como un trastorno mental que requiere tratamiento, ya que puede desencadenar consecuencias severas, como dificultades financieras, rupturas en las relaciones personales, violencia doméstica, trastornos mentales e incluso un aumento en el riesgo de suicidio.
El estudio “Conductas de juego y juego patológico”, realizado por la Facultad de Administración y Economía (FAE) de la Universidad de Santiago de Chile, en colaboración con la Corporación Juego Responsable, reveló que el 11,7% de la población encuestada presenta problemas asociados al juego, superando el 2,2% de consumidores de drogas duras, como cocaína o pasta base. Según el reporte, el 85,7% de la población evaluada se clasifica como de bajo riesgo, el 8,9% en riesgo, el 2,9% como jugadores problemáticos y el 2,4% como jugadores patológicos. Del total de esta última categoría, el 79% son mujeres.
La estimación normalizada de los daños que provocan los juegos de azar y de apuestas a nivel mundial es limitada, si bien ciertos datos parecen indicar que el 1,2 % de la población adulta en el mundo sufre un trastorno del juego, de acuerdo a la OMS. “Los analistas calculan que los ingresos mundiales generados por estas actividades alcanzarán los US$ 700.000 millones en 2028. El uso de teléfonos inteligentes en países de ingreso bajo y mediano impulsará gran parte de este crecimiento.
Con sus pérdidas, los jugadores más empedernidos generan aproximadamente el 60 % de los ingresos del sector”, plantea la agencia sanitaria mundial. trastorno de salud mental, que se sustenta en la existencia de un proceso químico relacionado con la liberación de dopamina”, acota Pinto.
Según el terapeuta, la adicción al juego aumentó durante la pandemia y es catalogada como una de carácter comportamental, es decir, a pesar de que no hay consumo de una sustancia externa, el hábito de apostar activa el “circuito de recompensa” del cerebro, una red neuronal que juega un papel crucial en la motivación, el placer, el aprendizaje y la regulación de la conducta. “Aunque no se consume una droga, el cerebro de un ludópata libera dopamina y se genera una sensación de placer que se quiere repetir.
Al principio, la motivación es ganar dinero, pero a medida que se instala la adicción, la persona ya no juega para ganar, sino que para experimentar la sensación de jugar El placer proviene del acto mismo de apostar, aunque se pierda dinero. Ademá, la ludopatía está creciendo por el acceso fácil e ilimitado a plataformas digitales, diseñadas para ser adictivas, igual que ocurre con las drogas legales”, precisa. En muchos casos, la ludopatía se relaciona con contextos difíciles o “círculos no cerrados” (traumas, duelos u otros), casos en los que el juego funciona como un mecanismo de escape emocional. En Chile, ocho de cada diez personas consideradas jugadores patológicos son mujeres, lo que es coincidente con la evidencia en otras formas de adicción. “Ellas están cada vez más presentes en todas las formas de consumo problemático, incluso en drogas ilegales. En ludopatía, específicamente, el porcentaje de personas del sexo femenino es muy alto”, señala Pinto. Los motivos por los que las mujeres desarrollan el hábito se relacionan con factores de género: estrés, rutina, sobrecarga emocional y dificultad para buscar asistencia.
Y cuando ellas llegan a terapia, lo hacen con graves niveles de deterioro físico, social y psicológico. cifrA 8 De cada diez personas consideradas jugadores patológicos son mujeres. b “La ludopatía puede parecer más solapada, pero sus consecuencias suelen ser igual de destructivas, incluso con riesgo vital”. Estigma femenino Decidora realidad. Ellas tardan más en pedir ayuda cuando caen en esta situación, que se traduce en estados físicos, emocionales y sociales deteriorados. EL DATO. Durante la pandemia creció la ludopatía, condición q