Autor: JOAQUÍN AGUILERA R
Confianza ciudadana en la economía cumple siete años en terreno pesimista
Confianza ciudadana en la economía cumple siete años en terreno pesimista La percepción ciudadana sobre el desarrollo económico y sus expectativas se tornó pesimista en 2018 y no ha vuelto a recuperarse.
De acuerdo con el Índice de Percepción de la Economía (Ipec) que desarrolla la consultora GfK, donde se pondera en una escala de 1 a 100 las opiniones sobre factores como situación económica familiar o estabilidad del país --a mayor puntaje, más optimismo--, el resultado de la última encuesta se ubica por debajo de los 50 puntos, lo que se considera una zona "pesimista". Si bien la variación de julio constató un ligero avance de 0,2 puntos, este resultado implica que el Ipec cumple siete años consecutivos con resultados negativos, tras caer por debajo de su punto de equilibrio en julio de 2018.
En los resultados de julio, el Ipec registró 35,2 unidades, especialmente influenciado por un incremento en la expectativa sobre la estabilidad del país de aquí a cinco años, que avanzó desde 31,8 a 35,8 puntos, o el avance marginal en las expectativas sobre la economía a 12 meses, que pasó desde 40,4 a 40,9 puntos.
El contrapeso fueron los descensos en subindicadores relacionados con la percepción en tiempo presente, como los que miden la situación país actual, la situación económica personal de cada hogar y el escenario para hacer compras de artículos para el hogar.
En términos generales, considerando que el índice también tuvo un leve avance en junio, el documento resalta que "un IPC más bajo durante junio y un escenario político que adelanta ciertos cambios podrían estar determinando la consistencia en la percepción sobre la economía en los últimos dos meses". Por otro lado, considerando que hubo un contraste en los resultados de la medición entre hombres (+2,9 puntos) y mujeres (-2,4 puntos), también plantea que "un leve incremento en las cifras publicadas de desempleo del trimestre marzo-mayo (que afectó más a las mujeres, con un 8,8%) podría estar incidiendo en un mayor pesimismo en estos segmentos". Algo similar ocurre con la segmentación socioeconómica, donde el único grupo con un descenso (-2,1 puntos) fue el D/E. GfK sostiene que "recientes hechos delictuales de alta connotación pública" podrían estar repercutiendo en un mayor pesimismo de este grupo. El Ipec se calcula mediante la aplicación mensual de un cuestionario estructurado a una muestra aproximada de 1.100 personas mayores de 18 años, residentes en las principales ciudades del país.
Avances y rezagos En el resultado de julio, el documento resalta que "la estabilidad del país a los próximos 5 años (+4,0 pp) tiene un repunte histórico, alcanzando su cifra más alta desde el 2018, principalmente apalancada por hombres y el grupo socioeconómico C2, mientras que la expectativa económica a 12 meses también tiene un leve aumento". Aventura además que "un contexto político que anticipa cambios podría estar determinando una mayor esperanza hacia un futuro más lejano". Sin embargo, al hacer la comparación histórica de los resultados, se observa que el subíndice sobre las expectativas a cinco años es el más rezagado, y el que más ha costado recuperar a partir de julio de 2018. "Aunque la expectativa de estabilidad país en el mediano-largo plazo tuvo una recuperación importante durante julio, es un indicador al que le ha costado repuntar.
Algo similar ocurre con la situación de compra de artículos para el hogar, indicador que solía ser uno de los más altos y que cayó abruptamente el 2019 sin señales claras de recuperación desde entonces", detalla la senior research consultant de GfK, Gabriela Jorquera.
Con todo, aunque existe una brecha relevante entre la situación de 2018 y la actual, el Ipec ha ido repuntando en relación con lo observado en 2022, cuando llegó a ponderar mínimos de 21 puntos. "Si bien las cifras siguen estando lejos del punto de equilibrio, sí se evidencia una clara mejoría si contrastamos con los tres últimos años. La última vez que el indicador estuvo por debajo de los 30 puntos fue justamente en julio 2024, donde el Ipec fue 7,2 pp más bajo que el de este mes", destaca Jorquera. Elementos de riesgo Cuando el Ipec cayó en zona negativa en julio de 2018, una coincidencia central con el panorama actual era un contexto internacional convulsionado.
Por entonces, en la primera administración del Presidente Donald Trump en Estados Unidos, se veía la primera versión de la guerra comercial con China, que hoy se replica con aranceles generalizados a sus distintos socios comerciales alrededor del mundo. Esto puede coincidir con la mayor debilidad en las expectativas de largo plazo. Por otro lado, el escenario electoral tiene una influencia directa en las expectativas, pero con resultados heterogéneos. "Las elecciones siempre tienden a influir en las proyecciones que tienen las personas sobre el futuro.
Entre quienes tienen cierta afinidad con alguno de los candidatos, estas expectativas pueden evolucionar hacia un mayor optimismo y esperanza, mientras que quienes tienen una postura más independiente de todas formas pueden reaccionar a un contexto donde se ponen en la palestra temas que les pueden afectar en su vida cotidiana.
Sin embargo, cuando las campañas se polarizan demasiado pueden generar el efecto contrario y, a la larga, producir mayor incertidumbre y temor de lo que puede ocurrir, por lo que es importante observar cómo avanza la campaña de primera y segunda vuelta y si esto llega a determinar la percepción sobre la economía", dice Jorquera.
En medio de convulsionado escenario externo y período electoral: Confianza ciudadana en la economía cumple siete años en terreno pesimista El índice que elabora la consultora GfK para medir percepciones y expectativas en materia económica muestra resultados negativos desde 2018, con la mirada de mediano y largo plazo como uno de los factores más rezagados en la recuperación. JOAQUÍN AGUILERA R. MUJERES El pesimismo es mucho mayor en mujeres que en hombres, y puede haber caído a causa del desempleo femenino..