Autor: Semana del salitre
IQUIQUE vive de fiesta
IQUIQUE vive de fiesta El año pasado, Hernán Pereira (68) y Pamela Daza (70) se pasaron todo el tiempo de fiesta en fiesta. Claro que no lo hicieron porque tengan la vida resuelta, ni porque solo les importe el presente. Lo hicieron, más bien, porque debían terminar un proyecto soñado: un libro fotográfico sobre las festividades populares más importantes de su ciudad, Iquique. “Participar en estas fiestas es parte de la vida iquiqueña. Nosotros fuimos a hacer fotos porque nos gusta, pero también porque son celebraciones interesantes, coloridas e intensas”, explica Pereira, que es profesor de inglés y académico de la Universidad Arturo Prat, pero además fotógrafo patrimonial. Junto a su esposa, Pamela Daza, que es anestesióloga y también fotógrafa, lleva más de dos décadas retratando distintas manifestaciones culturales de esta región. El trabajo de Pereira y Daza ha desembocado en una serie de libros fotográficos sobre el norte de Chile, como Tarapacá entre parinas y cormoranes (2000) o Iquique, huellas en el tiempo (2003), entre otros.
Y ahora acaba de agregar uno más a su lista: Celebrar la vida: Iquique y sus festividades, un proyecto Fondart que se lanzó la semana pasada y que hace un recorrido por las fiestas más importantes que ocurren desde enero hasta diciembre en distintos barrios de Iquique, y que dan cuenta de una las identidades culturales más particulares de Chile. Cada evento incluye un texto escrito por el sociólogo iquiqueño y académico de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Arturo Prat, Bernardo Guerrero. “Las identidades no son ahistóricas, como tampoco están fijas y dadas para siempre. Hombres y mujeres las portan, las trasladan y a menudo mutan de una a otra, sin cuestionamientos, pero siempre en base a una línea de continuidad”, escriben en el prólogo de su libro.
“Creemos en la identidad como un proceso inacabado que tiene por función construir una imagen del colectivo en contraste no en contraposición con el otro () La identidad es el despliegue del sentido de pertenencia”. A continuación, ambos autores reseñan algunas de estas fiestas y las características que las convierten en eventos notables, especialmente para los visitantes de paso que quieran descubrir el auténtico espíritu de esta ciudad. Carnaval Pocos lo saben, pero Iquique tiene un multitudinario carnaval callejero que se realiza todos los años a fines de febrero y que tiene como objetivo conmemorar el fin del verano.
La celebración ocurre en barrios tradicionales como El Colorado y El Morro, y uno de sus rituales consiste en quemar la figura de un “rey Momo”, que se lleva en balsa hacia el mar, lo que simboliza su purificación y también el fin de esta temporada del año. “En esa fiesta los iquiqueños nos damos permiso para volvernos locos durante varios días”, dice Hernán Pereira. “La gente se tira harina y pintura, muchos hombres se disfrazan de mujer, hay bailes con bandas de bronces, cumbias... y también mucho alcohol.
Es un chipe libre que dura tres a cuatro días”. Semana Santa Esta fiesta religiosa se celebra en todo Chile, claro, pero en Iquique muestra características distintivas, como la quema de una figura de Judas que se lleva a cabo en la plaza de Arica, o el ascenso de cientos de fieles niños, jóvenes y adultos hasta el cerro Esmeralda, donde hay una cruz que mira hacia la ciudad y la bahía. El ascenso comienza desde antes del Domingo Santo y es una suerte de viaje de expiación de los pecados. “Es un cerro empinado y el ascenso, muy difícil, por senderos de arena”, explica Pamela Daza. “Cada persona sube como puede, los adultos incluso llevan a los niños en la espalda.
Arriba hay un altar, al que también llega un sacerdote y en lo alto se hace una misa”. Día del Trabajador En Iquique, el 1 de mayo no solo recuerda las luchas obreras del siglo XIX y los mártires de Chicago, como sucede en disARIEREPNÁNREH AZADALEMAP AZADALEMAP AZADALEMAP “Yo diría que esta fiesta es incluso más masiva que La Tirana chica”, asegura Daza. “Las calles se embanderan con colores amarillos y rojos, y con globos. San Lorenzo es el santo de los comerciantes y también de los mineros. Cuando este va pasando, los globos se revientan y caen las challas. Es una celebración tremendamente colorida”. 18 de septiembre En Iquique, las Fiestas Patrias se celebran con algunos rasgos bien particulares. Uno de ellos tiene que ver con los desfiles, muy característicos en esta ciudad.
“Aquí desfila todo el mundo, desde los jardines infantiles y escolares hasta las juntas de vecinos y las agrupaciones de ancianos”, dice Daza y Pereira agrega: “También se baila cueca, con versiones nortinas, y además hay danzas andinas. Nosotros como ciudad llegamos tarde a esta celebración: solo empezó después de la Guerra del Pacífico, cuando ocurrió el proceso de chilenización de Tarapacá.
De manera que aquí replicamos el tipo de cueca, la iconografía de la casa de campo... Se respetan los símbolos del Chile central, a pesar de que la gastronomía, el paisaje, las costumbres y las temperaturas sean otras.
Es un fenómeno muy interesante de fotografiar”. Esta celebración es relativamente reciente: se realiza desde 1981 y es una suerte de “puesta en escena de un pasado previamente interpretado por la nostalgia, en el que los malos recuerdos no tienen lugar”, como escribe el sociólogo Bernardo Guerrero en el libro. “Agrupaciones de expampinos y sus descendientes recrean la época en que funcionaban las salitreras con desfiles en que usan trajes típicos, vuelven a hacer juegos antiguos, hay mucha añoranza del pasado”, agrega Pereira.
Los epicentros de esta fiesta, que suele celebrarse en noviembre, son la Iglesia La Casa del Pampino y el Monumento al Pampino Salitrero, que están en las afueras de la ciudad, pero también hay actividades que se realizan en oficinas históricas como Humberstone. Navidad y Año Nuevo “a la iquiqueña” La fiestas de fin de año también tienen algunos ritos particulares. En el caso de la Navidad, existe una costumbre muy arraigada: se trata de los carros navideños que durante todo el mes circulan por las calles repartiendo regalos a los niños. La tradición se remonta a la década del 50 del siglo pasado, cuando los trabajadores del Correo preparaban un camión con adornos navideños y un Viejo Pascuero. “Hoy esto lo siguen haciendo distintas empresas de la ciudad, que reparten regalos a los hijos de sus trabajadores, y también reparten dulces y otras golosinas”, cuenta Pamela Daza.
“En diciembre, todo el día escuchamos pasar estos camiones que llevan parlantes donde suenan canciones navideñas, como Rodolfo, el reno y muchas otras”. Año Nuevo, en tanto, también es especial, pero sobre todo en barrios como Pueblo Nuevo, Matadero, La Puntilla y El Colorado, donde los vecinos, equipos de fútbol y otras agrupaciones se reúnen desde la mañana y, entre otras cosas, confeccionan un “Mono”, un muñeco que representa a algún personaje, por lo general que despierta poca simpatía, que será quemado como símbolo del año que se va. “La identidad iquiqueña se manifiesta absolutamente en estas fiestas”, asegura Pamela Daza.
“Lo que pasa es que a veces uno vive muy al margen, pero cuando te metes en los barrios ves cómo vive la gente de verdad; todos se conocen, son amigos y en estas fiestas se unen. Nosotros teníamos esta idea hace varios años, contactamos a sus organizadores y fuimos a fotografiar a sus participantes. Todos fueron muy cooperadores, más aún cuando explicas lo que estás haciendo y vas con respeto.
El objetivo era registrar estas fiestas como patrimonio de la ciudad, porque si bien hay un porcentaje no menor de iquiqueños que vibran con ellas, también son manifestaciones que de alguna forma se están perdiendo”. D ARIEREPNÁNR AZADALEMAP AZADALEMAP ARIEREPNÁNREH ARIEREPNÁNREH AZADALEMAP ARIEREPNÁNREH CARNAVAL.
Particularmente festejado en barrios tradicionales como El Colorado y El Morro. tintos lugares del mundo, sino también otras tragedias ocurridas en la ciudad, como la Matanza de la Escuela Santa María, en la que (el 21de diciembre de 1907) cientos de obreros del salitre incluso hay recuentos que hablan de miles fueron masacrados por unidades militares, en el contexto de una huelga. “En la plaza Montt existe un monolito que recuerda a esos obreros y es el epicentro de todos los actos conmemorativos”, dice Pamela Daza. “Allí se ponen ofrendas florales, se instala un escenario y llegan todos los dirigentes sindicales, algunos muy antiguos, que van con sus bastones.
Hay actos musicales y se bailan cuecas nortinas y del centro de Chile”. 21 de mayo La hazaña de Arturo Prat y el Combate Naval tuvieron por escenario a Iquique, entonces es fácil entender por qué esta fiesta patriótica se celebra con tanto fervor. Es, según los autores, mucho más importante aquí que el 18 de septiembre. “Los estudiantes desde prekínder hasta universitarios desfilan por la costanera hasta la plaza Arturo Prat, para la cual se preparan durante marzo a mayo. Todos usan uniformes de gala, con pantalón blanco, chaqueta y cinturón. Además, se realiza la navegación hasta la boya donde se hundió La Esmeralda”, explica Hernán Pereira. “La televisión local, el canal RTC, transmite todo en vivo, lo que tiene un efecto multiplicador. Es un factor de cohesión y también de comercio. En el libro se ve cómo vendedores ambulantes peruanos aprovechan la ocasión para vender banderas chilenas, gorros de marino, de todo.
El 21 de mayo en Iquique tiene elementos patrióticos, pero también de las fiestas populares”. Fiesta de San Pedro Como buen puerto, la tradicional Fiesta de San Pedro en homenaje a los pescadores y su patrono es multitudinaria y colorida. El epicentro ocurre en la península de Cavancha y en el barrio El Colorado, que está cerca de la Zofri. “Cada caleta tiene a su santo y lo lleva en sus embarcaciones por el mar. Hay muchos bailes religiosos y bandas de bronces. La imagen de San Pedro se saca de la iglesia y se lleva en procesión, en una fiesta que también comienza el día anterior”, explica Pereira. La Tirana chica Una semana después de la fiesta original, que ocurre cada 16 de julio en el pueblo de La Tirana, en Iquique se sigue festejando a la Virgen del Carmen, la Chinita.
El evento se llama “La Tirana chica” y sus orígenes se remontan a 1934, cuando un brote de viruela y tifus obligó a suspender la celebración en el pueblo, por lo que se realizó en la plaza Arica de la ciudad. Allí se conmemora hasta hoy, pero también en el sector de Fátima/Emaús y en Alto Hospicio. “Aunque se junta un poquito menos de gente, el fervor, los bailes y el colorido son los mismos”, cuenta Pamela Daza. “En la plaza Arica está la Capilla del Carmen y desde allí sacan a la Virgen en procesión.
Pero la plaza se hizo pequeña para tantos bailes, entonces por eso se hace en estos otros dos lugares del Iquique muy devoto y popular”. Octava de San Lorenzo Aquí sucede lo mismo: mientras la fiesta original en homenaje a San Lorenzo el Lolo, como le llaman sus devotos se realiza cada 10 de agosto en el pueblo de Tarapacá, en Iquique, específicamente en la población San Carlos, cerca del Cementerio 1, se hace la llamada Octava de San Lorenzo. SEMANA DEL SALITRE. Recuerda con nosta CELEBRAR.
El libro incluye textos del sociólogo Bernardo AZADALEMAP A lo largo del año, los barrios más tradicionales de Iquique son el escenario de una serie de fiestas populares, religiosas y urbanas que han ido conformando una de las identidades regionales más particulares de Chile. Un nuevo libro fotográfico rescata estas manifestaciones que permiten acercarse al más genuino espíritu iquiqueño. POR Sebastián Montalva Wainer.. SAN LORENZO. Una celebración con fecha propia, y muy masiva, en la población San Carlos. e de esta actividad. LA TIRANA CHICA. Esta celebración se realiza una semana después AÑO NUEVO. Varias comunidades se organizan para crear figuras, incluyendo algunas que LOCURA. Los iquiqueños se dan permiso para salirse de los márgenes durante el carnaval, dicen los fot SEMANA SANTA. Una de las tradiciones es el ascenso al cerro Esmeralda, donde se encuen e Cavancha. 1 DE MAYO. El Día del Trabajador centra sus actividades en pl Guerrero. FIESTAS PATRIAS. Un rasgo muy local es que aquí todo NAVIDAD. Es típico que empresas locales repartan regalos en distintos COMBATE NAVAL. Por razones obvias, el 21 de mayo es único ANIVERSARIO. La ciudad tiene una celebración especial el 25 SAN PEDRO. El patrono de los pescadores protagoniza las celebraciones en la península d