Perú refuerza contingente policial en 11 kilómetros de la frontera con Chile por nueva oleada migratoria
- - - - - Hace poco más de cuatro meses finalizaba en la frontera norte una crisis migratoria que tuvo durante semanas a un promedio diario de 400 extranjeros acampando junto a la Línea de la Concordia, o límite internacional con Perú, a la espera de que los dejaran ingresar al país vecino.
El principal obstáculo para ellos, en su mayoría ciudadanos venezolanos y en menor cantidad haitianos, colombianos y personas de otras nacionalidades, era la falta de documentos que a c r e d i t a r a n s u identidad y la entrada regular a un país de la región. La crisis se resolvió en esa oportunidad con un plan de ingreso a Perú, que se resolvía caso a caso en el Servicio de Migraciones peruano.
Además, grupos de extranjeros dejaron la zona por sus propios medios, otros fueron derivados a albergues transitorios habilitados en Arica e incluso un vuelo de repatriación (hasta ahora el único) desde el aeropuerto Chacalluta para 115 ciudadanos venezolanos. La problemática se reactivó desde el fin de semana pasado, aunque hasta ayer en menor cantidad.
Según registros de organizaciones nacionales e internacionales que ayudan a migrantes y que operan en Arica, consultadas ayer por "El Mercurio", desde mayo pasado el flujo de personas en esa situación que a diario se acercaba a la frontera, en promedio, "no alcanzaba el medio centenar y ni siquiera la veintena". Un escenario al que se sumó, en forma paralela, el paulatino cierre de albergues transitorios en Arica luego que sus ocupantes los abandonaran para retornar a sus ciudades de origen en otras regiones del país y en menor medida tras concretar trámites para ingresar a Perú por la fronteriza región de Tacna. En los últimos días, las cifras cambiaron. Grupos de hasta 150 personas, que han incluido familias y en su mayoría ciudadanos venezolanos, se han congregado en forma intermitente junto a la Línea de la Concordia.
Hasta ayer no se había montado ningún campamento improvisado como ocurrió hasta mayo pasado, donde incluso fueron instalados en forma provisoria depósitos de agua, baños químicos, entre otros servicios en que se atendían las necesidades de familias completas.
Hasta ahora, según indicaron autoridades locales y usuarios de los aledaños complejos fronterizos Chacalluta (Chile) y Santa Rosa (Perú), la presencia de personas ha sido intermitente, concentrada en la noche "y más pacífica" que hace algunos meses.
Sin embargo, el sábado en la noche se reportó un bloqueo del tránsito de vehículos que duró más de 20 minutos en la carretera que une a los pasos fronterizos y a las ciudades de Arica y Tacna.
Por vía marítima Para prevenir el ingreso masivo de ese tipo de flujos, la Policía Nacional del Perú (PNP) anunció que se destinarán una veintena de vehículos y un refuerzo de 180 efectivos, distribuidos en tres turnos diarios, los que desde las últimas horas se están concentrando en puestos fijos y operativos desplegados entre los hitos 1 al 14 de la frontera con Chile. Esto es, entre el borde costero y la zona noreste de los recintos de Chacalluta y Santa Rosa.
Se trata de una despoblada y desértica área de poco más de 11 kilómetros de extensión, que abarca el litoral, la Quebrada de Escritos, zonas recientemente desminadas y parte del trazado del ferrocarril que une a Arica y Tacna, además de la carretera Panamericana, que es la continuación, en el país vecino, de la Ruta 5 Norte chilena.
Desde la PNP también se informó ayer que habría antecedentes sobre intentos de ingresos clandestinos al Perú utilizando rutas "pegadas al mar" e incluso se indicó la posibilidad "del uso de botes". Mientras tanto, en el lado chileno de la frontera se mantendrá hasta noviembre próximo, al menos, la vigencia de la Ley de Infraestructura Crítica, que permite a efectivos de las Fuerzas Armadas reforzar los operativos de personal de Carabineros y de la Policía de Investigaciones para resguardar la frontera norte, con el objetivo de impedir cruces clandestinos y delitos asociados como tráfico de personas, tráfico de drogas e ingresos de armas de fuego, además de diversos tipos de contrabando. Una medida que, a juicio de la Gobernación Regional de Arica y de la Municipalidad de Arica, "debería ser una política permanente", sobre todo con el próximo término de la temporada invernal.
Al norte de Arica, junto a la Línea de la Concordia o límite internacional: Perú refuerza contingente policial en 11 kilómetros de la frontera con Chile por nueva oleada migratoria En los últimos días han sido detectados grupos de hasta 150 personas, en su mayoría venezolanos, que intentan ingresar al país vecino cerca de pasos no habilitados. MARIO ROJAS M. PUNTO CRÍTICO. -Esta carretera internacional es la única vía terrestre que une en forma directa a Arica y Tacna. En crisis anteriores ha sido cortada. CEDIDA APOYOS A los patrullajes terrestres, se están sumando drones y torres de iluminación. Perú refuerza contingente policial en 11 kilómetros de la frontera con Chile por nueva oleada migratoria.