Autor: Valeria Barahona Medios Regionales
El pitotoy chico viaja del Ártico a Chile y mejora la vida de emprendedores
El pitotoy chico viaja del Ártico a Chile y mejora la vida de emprendedores pitotoy chico (Tringa Estavipses un ave que se puede ver en las playas desde Arica a Magallanes, de tamaño pequeño, aunque luciendo su pico largo y plumas moteadas color marrón grisáceo, blanco y negro.
Pese a ser un vecino habitual, cada año emprende un viaje de miles de kilómetros entre el Ártico y Chile, porque acá pasa su temporada de veraneo o no reproductiva, aunque, al igual que los humanos, hay algunos que se quedan a vivir. Estas rutas son las que investiga la doctora en Biología de la Universidad de Texas (EE. UU. ) Rocío Jara, junto a los habitantes de Maullin, en la Región de Los Lagos.
Actualmente, el pitotoy chico está categorizado como vulnerable en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (IUCN). Estudios realizados en áreas de Estados Unidos y Canada han demostrado una disminución en la población de esta ave debido al uso excesivo de pesticidas, la caza indiscriminada y la destrucción de su hábitat a causa del relleno de humedales en proyectos de desarrollo urbano, entre otros factores. "No sabemos nada de la migración de los pitotoyes que vienen a pasar su temporada de descanso o no reproductiva en Chile", indicó Jara, razón por la cual centro en estos pájaros su investigación postdoctoral del Centro de Desarrollo Local de la Universidad Católica (Cedel UC). La académica busca entender la ecología del movimiento-que estudia como el movimiento de los organismos se relaciona con su entorno y con otros, afectando la dinamica de poblaciones ir a los humedales de Cáhuil (Región de O'Higgins) y Batuco (Valparaíso), además del Parque San Carlos de Apoquindo (Metropolitana). SALUD MENTAL Otra habitante del lugar que se unió al proyecto de monitoreo del pitotoy chico es la psicóloga Bernardita Muñoz, quien precisó que "la zona de 'pajareo' es Lepihué y La Pasada, y es donde siemprevamos". Esta área es la desembocadura los rios Maullin y Quenuir, que "te lleva al contacto con la naturaleza, eso es esencial para la salud física y, sobre todo, para la salud mental", adjuntó la especialista, que respondió a un llamado a voluntarios realizado por la Red de Observadores de Aves de Chile (ROC), junto a otras 12 personas.
La bióloga que lidera la investigación apuntó que "son ellos y ellas quienes tienen información clave sobre la dinámica de las aves en este lugar", por lo que "trabajar con la comunidad es clave". La psicóloga destacó además que "es un hito para la región, para la zona de Lepihué, donde llegan muchas aves migratorias", mientras que el operador turístico sumó que "todos tenemos que aprender todavía mucho más". O que pueden sobrepasar los diez días. "No sabíamos nada sobre estas aves, para nosotros todas eran patos", agregó Ruiz, quien, gracias a la invitación a trabajar en proyectos como el del seguimiento al pitotoy chico, "hoy puedo distinguir a las aves, sé de su importancia. (. .. ) y ya sé que hay una cadena a nivel mundial relacionada con el medioambiente, las aves y su conservación". El Servicio Nacional de Turismo (Sernatur) en su portal Chile. travel recomienda en la zona sur de Maullín para la observación de pájaros, así como Chiloé, también en Los Lagos, junto lagunas y humedales de Magallanes y Tierra del Fuego. En el norte es destacada la zona de Arica y el altiplano, con énfasis en el humedal de la desembocadura del río Lluta.
Si la idea es mirar aves en la zona central, el sitio gubernamental aconseja y ecosistemasy conectividad migratoria de los pitotoyes chicos, mediante transmisores que pesan menos de un gramo y son instalados en la espalda de las aves, entre su plumaje. Estos aparatos emiten ondas de radio, dando cuenta de su movimiento a través de distintas estaciones de monitoreo del sistema Motus. Cualquier persona que sea *pajarero', curioso, científico, va a querer llegar y conocerel lugar", dijo el propietario del complejo turístico, Erwin Ruiz, quien se hizo parte de la investigación.
El empresario también es quinta generación de pescadores en Lepihué, por lo que desde hace una década ha visto llegar a científicos e interesados en la observación de aves, en medio de una corriente mundial llamada birdwatching.
Un observador de pajaros, según el sitio chileno especializado en medio ambiente, Ladera Sur, puede gastar alrededor de US$400 diarios en viajes y estadías, CONOCER LOS PÁJAROS La estación en los humedales de Maullín se instaló en marzo.
El lugar se eligió porque es parte de "una red de sitios importantes para aves playeras a nivel hemisférico", detalló Jara, en referencia a la Western Hemisphere Shorebird Reserve Network (Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras). El equipo de monitoreo se ubica en las cabañas Lepihué, con vista privilegiada del humedal. "Me da un valor agregado a mis cabañas.
Cualquier persona que sea pajarero', curioso, científico, va a querer llegar yconocerel lugar". Erwin Ruiz, propietario de cabañas.. El avistamiento de aves es una industria creciente en el país, en que un viajero interesado en el rubro puede gastar alrededor de US$400 diarios.
En Lepihué, Región de Los Lagos, una psicóloga incluye a los pájaros en su terapia. [TENDENCIAS] Cualquier persona que sea ‘pajarero', curioso, científico, va a querer llegar yconocerel lugar". EL PITOTOY CHICO VIAJA A CHILE EN SU ÉPOCA DE DESCANSO, CUANDO NO SE ESTÁ REPRODUCIENDO. LOS DISPOSITIVOS DE MONITOREO EMITEN ONDAS DE RADIO.