Postergación SLEP en Santiago y la burla a las regiones
E El funcionamiento de laeducación mediante los Servicios Locales de Educación esel simbolomás potente del rotundo fracaso de la ideología estatista.
Gracias a esta política educacional de la zquierda, hay alumnos sin matrícula o en colegios que no eligen, sin clases, con menores rendimientos académicos (SIMCE) y que no distinguen de qué sirveaprender, porque desapareció el mérito estudiantil, Esesistema estatista seguirá perjudicando la educación de Atacama mientras exista. Por eso la ciudadanía desea el término del sistema (tómbola) y una urgente reformulación que elimine el centralismo, la ineficiencia y la captura política de la estructura administrativa, dirigencial y docente del mundo educacional. Un sistema que haga protagonispersonas.
Sin embargo, la preocupación de la izquierda gobernante no es la educación de las personas, sino mantener el financiamiento de sus serviles feligreses, tal como lo revelaron los mismos parlamentarios de izquierda que acusaron al PS de capturar el SLEP. Mientras el sistema educacional del Estadosigue perjudicandoa laregión de el Gobierno del Presidente Bola postergación en la Región Metropolitana.
El ministro de Educación del PCseinclinó por postergar laimplementacion de los SLEP en Santiago ante el requerimiento de las Municipios de Providencia, Las Condes, Vitacura, Lo Bamechea y La Reina, justificadoen que la programación de entrada en vigencia noafectaríala decisión de implementarlos. Ello esconde una razón ajena a la educación: mantener la estructura de poder.
No les preocupan las comunas del sector oriente de Santiago, ni lo que ocurre con el SLEP Atacama, sino conservar el poder sobre los recursos de la educación en losmunicipios a cargo del PC, como el Municipiode Santiago.
La idea noserá mejorar la calidad dela educación, sino mantener al servicio dela izquierda una estructura de financiamientopúblico, El problemaque vive Chile es laizquierda enel Estado y enlos Municipios, y la prevalencia del aparato públicosobre las personas. La solución es lo contrario. Patricio Urquieta, ex delegado presidencialde Atacama