LA SEMANA POLÍTICA
LA SEMANA POLÍTICA Una fuerte arremetida comunicacional hicieron ministros y, sobre todo, el Presidente de la República, Gabriel Boric, al cumplirse esta semana dos años de la llegada al gobierno. Abundaron las entrevistas, declaraciones, giras, inauguraciones y puntos de prensa buscando generar un relato que mostrara que el país estaba en mejor pie hoy que cuando lo recibieron.
Tampoco faltaron expresiones más propias de campañas electorales por sus ribetes populistas, como la de la ministra del Trabajo, que insólitamente culpó a los empresarios del crecimiento del trabajo informal y los conminó a que "paguen mejor" (ver editorial arriba). El Presidente Boric sostuvo que "nosotros recibimos un país en marzo de 2022 que tenía muchos nudos críticos. Estaba desestabilizado.
Un país que tenía más de un 9% de inflación y que llegó a estar en el orden de un 14% y hoy la hemos bajado al orden de un 4% y este año vamos a llegar a la meta del Central del 3%". Afirmó que "recibimos un país en condiciones muy difíciles, con problemas de orden público prácticamente todas las semanas y yo creo que hemos normalizado el país". Se preocupó también de resaltar que su gobierno ha sido el que más leyes en materia de delincuencia ha despachado.
Al poner la normalización del país en materia de orden público, el control de la inflación, una aprobación legislativa sin precedentes en materia de seguridad pública, como ejemplos del éxito de su gestión el Presidente levanta, sin embargo, un relato que resulta inconsistente.
No está de más recordar que su sector, incluyendo actuaciones del entonces diputado Boric, contribuyó a la desestabilización política y económica del gobierno de entonces, además de alentar el desorden en las calles --algunos derechamente la violencia-y debilitar las fuerzas de orden. La aprobación de los retiros de las AFP es una buena muestra de cómo acciones concretas que antes defendieron ayudaron a que creciera la inflación. Por lo demás, la tarea de combatirla le corresponde en forma principal al Banco Central y no resulta justo que el Gobierno se atribuya este éxito. Respecto de las leyes en materia de seguridad, se olvida de que ellas solo pudieron ser aprobadas con apoyo de la oposición. No pocas veces, incluso, parlamentarios de gobierno se desmarcaron de los proyectos del Ejecutivo. De ahí cabe hacer un reconocimiento en este punto también a la oposición, que ha estado lejos de cumplir un papel obstruccionista comparable al que sufrió el anterior gobierno.
Mirando en perspectiva, quizá el principal hito que ha cooperado a la estabilización del país fue el rechazo al proyecto constitucional refundacional de la Convención, texto que el Gobierno entusiastamente apoyó. ¿Cómo estaría hoy la economía si se hubiese seguido la opinión del ministro de Hacienda, Mario Marcel, que llamaba a votar Apruebo? ¿ Cómo se controlaría el orden público en la zona de La Araucanía si ese texto eliminaba el estado de emergencia? LA SEMANA POLÍTICA Oasis presidencial Mirando en perspectiva, quizá el principal hito que ha cooperado a la estabilización del país fue el rechazo al proyecto constitucional refundacional de la Convención, texto que el Gobierno entusiastamente apoyó. Lo ocurrido con el director de la PDI da cuenta de la necesidad urgente de una reforma modernizadora de las policías, la que sorprendentemente no ha tenido mayor avance. Debilidad institucional Esa especie de oasis presidencial, como no podía ser de otra forma, chocó rápidamente con la realidad.
Al desesperado llamado a las FF.AA. a intervenir en sus comunas que formularon diversos alcaldes, incluyendo varios de izquierda, se agrega la solicitud de renuncia al director nacional de la Senapred por mala evaluación de su gestión en las catástrofes y la formalización del director de la PDI por revelación de secretos al abogado Luis Hermosilla. La gravedad de este último episodio trasciende este caso particular y da cuenta de un nuevo golpe a la credibilidad de las policías.
En momentos en que el crimen organizado amenaza, mata y toma el control de diversas zonas del país, el que la cabeza de la PDI aparezca involucrada en un caso de estas características muestra el grado de vulnerabilidad de nuestras instituciones para hacerle frente.
Si quien comanda una institución como esta puede cooperar con una defensa filtrando información secreta en un proceso en que se investiga al anterior director por lavado de activos, con mayor razón ello puede hacerlo cualquiera, tratándose de la criminalidad organizada, en que las presiones y el dinero involucrado son más altos.
Hay que consignar también que exdirectores de carabineros estuvieron involucrados en el llamado fraude a Carabineros y que, aunque se trata de una situación de distinta connotación y valoración, el anterior y el actual director de carabineros van a ser próximamente formalizados por sus responsabilidades del mando por hechos ocurridos en el estallido social. Todo ello implica la necesidad urgente de una reforma modernizadora de las policías, la que sorprendentemente no ha tenido mayor avance. De no realizarse, es muy posible que hechos como estos se repitan, deteriorando la credibilidad de las instituciones.
Se requiere incorporar los aprendizajes que dejaron los graves casos de la última década, mayores controles de probidad en todos sus niveles y el reforzamiento de los protocolos utilizados en la represión del desorden y el delito, incluyendo las más modernas técnicas y tecnologías que las prácticas internacionales comparadas puedan aportar.. - - -