¿Y si la solución a las inundaciones urbanas viniera de la naturaleza?
¿ Y si la solución a las inundaciones urbanas viniera de la naturaleza? ¿ Y si la solución a las inundaciones urbanas viniera de la naturaleza? Mientras la Región Metropolitana enfrenta un escenario de creciente escasez escasez hídrica, también aumenta el riesgo de inundaciones y aluviones.
Entre 2000 y 2017, los aluviones se multiplicaron casi por seis y las inundaciones crecieron un 22% respecto al periodo 19121999 (EH2030,2018). Esto los vemos repetirse cada invierno en Santiago y en muchas otras ciudades del país: bastan unas horas de lluvia intensa para que las calles se inunden, los sistemas de evacuación colapsen y el agua ese recurso cada vez más escaso escaso termine como escurrimiento sucio perdido en el alcantarillado.
Solo un ejemplo de esto fue el sistema frontal que azotó a Chile en junio de 2024 y que dejó miles de damnificados en nueve regiones del país (DW, 2024), evidenciando evidenciando una infraestructura urbana vulnerable frente al cambio climático. Sin embargo, este escenario también es una oportunidad urgente de repensar repensar y transfonnar cómo nuestras ciudades gestionan el agua, tomando experiencias experiencias exitosas.
Ciudades como Bogotá, Copenhague, Barcelona o Melbourne Melbourne ya han invertido en Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) para hacer frente a lluvias extremas, combinando canales verdes, techos vivos, corredores ecológicos, prácticas agroecológicas urbanas y jardines de lluvia. En Chile, aunque estamos en etapa incipiente, ya existen señales de avance.
En la comuna de Peñalolén, en plena Región Metropolitana, se implementó implementó en 2024 un jardín de lluvia, gracias al financiamiento del Gobierno de Santiago, el apoyo de la Municipalidad de Peñalolén, Peñalolén, el liderazgo de Escenarios Hídricos 2030 de Fundación Chile y el apoyo experto del Centro de Estudios Agua Tierra. ¡Y funciona! Esta infraestructura infraestructura verde de 450 m2 permite capturar cerca de 3.500 m3 de agua lluvia anual, que antes escurría por Avenida Avenida Sánchez Fontecilla con calle Central, filtrándola de forma natural a través de vegetación y sustratos permeables, facilitando su infiltración al acuífero, lo que ha logrado recuperar una función esencial en un territorio que enfrenta una crisis hídrica prolongada.
La experiencia de Peñalolén es un ejemplo concreto concreto de cómo una SbN puede cumplir múltiples funGerardo funGerardo Díaz, jefe de proyectos Escenarios Hídricos 2030 de Fundación Chile ciones con una sola intervención, captando el agua directamente desde la calzada, con costos de mantenimiento considerablemente más bajos que las soluciones tradicionales basadas en hormigón, reduciendo la escorrentía escorrentía superficial y los problemas de inundación que afectan a las personas que viven alrededor. Esto permite integrar vegetación nativa que promueve la biodiversidad y valor paisajístico, pudiendo además ser utilizados como aula pedagógica para la educación ambiental de la comunidad. Esta es una estrategia simple pero poderosa: en vez de evacuar rápidamente el agua, la ciudad la retiene, la limpia y la devuelve al ciclo hídrico natural.
Replicar este tipo de iniciativas como ya lo ha hecho Providencia y Renca Renca no es solo una decisión técnica, sino una declaración política: significa que estamos dispuestos a trabajar con la naturaleza, y no contra ella, reconociendo reconociendo que cada calle puede convertirse en parte de la solución. Es hora de pensar en verde, actuar con inteligencia y planificar una ciudad preparada para enfrentar el futuro; apostando por SbN que regeneran el ciclo hídrico urbano. Chile requiere de más naturaleza en la ciudad, no solo por estética, sino por necesidad. Yamil Najie Alee Ewesa NeiaIdoLLIL DIRECTOR REPRESENTANTE LEGAL YAUILNP. JLE ALEE OACINA$: UNARES YUMBEL 658 COANAS ELECTRONICO DIrnIh. ,Id,. E,,e. e1Rll. cEm EdIarIoeIherRIdocI pRAl cidaeI raIdo@gmaILcoRl. - -