Autor: MANOLA SÁNCHEZ Directora de empresas
SER CIUDADANO
SER CIUDADANO Análisis He tenido la suerte de vivir en varios países y, como a todos los inmigrantes nos pasa, añoramos e idealizamos nuestra patria.
Es cuando uno vuelve al día a día de su terruño, que nos damos cuenta de pequeñas cosas que afectan el diario vivir y que hacen que nuestra calidad de vida decaiga y comprendemos, como comúnmente se dice, que no era todo color de rosas. En nuestro querido Chile, hay temas que han ido decayendo paulatinamente como la seguridad, el no andar tranquilo por las calles, y poder disfrutar de actividades familiares, como ir al estadio.
En mi caso, soy viñamarina y me cuesta ir al centro de la ciudad o a Valparaíso sin tomar suficientes precauciones (un catastro mostró que la mayoría de los monumentos de la ciudad han sido vandalizados). ¿Que nos queda hacia adelante si las libertades de disfrutar tu tierra se van mermando día a día? Existe una teoría muy famosa que se llama la “teoría de las ventanas rotas” que consiste en que si hay una ventana rota, hay que repararla lo antes posible porque de lo contrario se entiende que a nadie le importa y ello conlleva a una mayor destrucción del barrio y aumento del crimen.
Es ahí donde me surge la pregunta: ¿ Cuál es la responsabilidad de nosotros, los chilenos, en todo esto, y qué podemos hacer para revertirlo? El recientemente elegido rector de la Pontificia Universidad Católica lo definió como “el declive de los valores ciudadanos”. ¿Cómo recobramos el orgullo por nuestro país y lo cuidamos y protegemos para que todos podamos disfrutarlo? Siempre se puede comenzar con pequeños pasos, por ejemplo, en México se hizo toda una campaña del uno a uno, es decir cuando hay un taco en la autopista porque algún carril está cortado, dejar pasar alternativamente un auto de cada carril, tratando de esa manera de eliminar la mentalidad de “winner” que impera en nuestro tráfico en Chile.
No puede ser que vivamos en una sociedad que tengamos que enseñar a nuestros hijos que, aunque haya luz roja, tienen que tener cuidado al cruzar la calle porque los autos se las saltan por tratar de apurar. Está en nosotros liderar con el ejemplo.
Debemos de preocuparnos de ser más amables, tanto en lugares públicos como en nuestro entorno (empresa y familia). Debemos trabajar en recuperar la empatía como ciudadanos, entender hasta dónde llega nuestra libertad sin entorpecer la del otro. Nuestro país ha cambiado mucho demográficamente, se hace más necesario que nunca reeducar esa cultura a nivel nacional. Hay mucho por hacer, veamos donde tenemos incidencia, aunque sean pequeñas cosas, y sintámonos responsables. Paso a paso y con intención podemos ir trabajando TODOS en un mejor país..