La última generación de profesores normalistas
La última generación de profesores normalistas 8i domingo 1 EL LLANQUIHUE 1 Domingo 24 de marzo de 2024 Pablo Fábrega Zelada Historiador puertomontino Las Las Educación Básica en Chile tuvo su origen en la formación realizada por la Escuela Normal de Preceptores, Preceptores, fundada en 1842 bajo la dirección dirección de Domingo Faustino Sarmiento, las que se multiplicaron multiplicaron por todo el país y que siguieron siguieron cumpliendo su labor pedagógica por poco más de 130 años.
Dejaron una huella profunda profunda a tal grado que aún hoy, cientos de profesores jubilados siguen siendo un testimonio vivo vivo de un país más campesino y humilde, que vivió una profunda profunda transformación en estos últimos últimos 50 años.
A fines de la dictadura dvico militar (1973-1990), hubo un poco conocido proyecto piloto a nivel nacional -entre 1985 y 1989para retomar esa tradición tradición formativa, reviviendo la antigua Escuela Normal Rural Experimental de Ancud, inaugurada inaugurada en 1931.
Fueron cerca de 100 profesores, profesores, en cuatro generaciones, que siguen en servicio, quienes han vivido en carne propia la fuerte transición de los enormes enormes cambios y desafíos pendientes pendientes que tiene hoy la educación educación pública. LOS INICIOS Juan Manuel González Labra (nacido en Valdivia en 1972), perteneciente a la segunda generación, generación, relata que “salí de básica en 1985. Vengo de Niebla, Niebla, en un momento en que las opciones eran estudiar o hacerme hacerme pescador. Mi papá trabajaba trabajaba para la Sociedad Constructora Constructora de Establecimientos Educacionales y mi mamá en el economato de la escuela donde yo estudiaba. Supe de la posibilidad de la Escuela Normal Normal por mis profesores de básica; básica; ellos eran casi todos normalistas normalistas y me motivaron mucho, mucho, porque yo era como una prolongación de ellos. Ahora es totalmente distinto... A los 13 años postulé, tuvimos que dar pruebas de conocimientos especfficos, especfficos, de habilidades sociales sociales y musicales. Todo eso duraba duraba una semana, todos los días con pruebas. Postularon muchos muchos jóvenes en la Provincia de Valdivia y sólo quedamos cuatro cuatro en un curso. Finalmente, fuimos 40 quienes estudiaríamos estudiaríamos siete años, para después egresar como profesores normalistas. normalistas. Esta oportunidad calzójusto. calzójusto. Viví el desarraigo total con mi familia.
Tú mandabas una carta a tu mamá y demoraba demoraba una semana; las encomiendas encomiendas eran 15020 días”. Patricio Velásquez Lafuente (nacido en 1971 en Puerto Montt), destacado músico del Daem, estudió en la Escuela Melipulli. Melipulli. “Postulé en octavo básico. básico. Quedamos como seis. Se postulaba desde la novena región región hasta Punta Arenas. El profesor profesor Tito Rosas nos tomó la prueba en la Escuela Árabe Siria. Siria. Para mí fue más traumático, porque era el menor, con muchas muchas restricciones en el internado. internado. Dependíamos de la Secretaria Secretaria Regional de Educación de Puerto Montt. El encargado era Fernando Olavarría (jubilado del Ministerio de las Culturas). Siempre dice que nuestra generación generación es la mejor de Chile. También era porque éramos muy cuestionadores de nuestros nuestros profesores, de querer saber por qué nos ponían esas notas”. Claudio Barrientos Piñeiro es doctor en Educación por la Universidad de Barcelona. Trabaja Trabaja como secretario general de la Corporación Municipal de Queilen. “Soy chilote, nacido nacido en Queilen en 1973. Mi madre madre era funcionaria municipal y mi papá era buzo mariscador de Bahía Mansa. Llegó con la fiebre del erizo. Nuestros profesores profesores fueron clave para todos. No eran normalistas, pero tenía tíos normalistas. Soy de la tercerageneración, tercerageneración, del año 1987. Era duro estar allí en la Normal. Además de la pseudo competencia, competencia, había mucho bullying, con apodos ofensivos. Reírse delante de ti, el castigo era limpiar limpiar el internado y no poder salir salir a pololear. En la Escuela Normal Normal no podías repetir”. Gastón Figueroa Vásquez, nació en 1973 en Santiago, porque porque su padre trabajaba en FenSa. FenSa. “Pero con el golpe (de 1973) nos fuimos a San Pablo, de donde donde era mi mamá. Ahí vivi hasta los 13 años. El director de miescuela era normalista. Nos ayudaron ayudaron mucho, porque no teníamos teníamos buena condición económica. económica. En 1987 postulé en Osorno, quedamos cinco seleccionados. seleccionados. El encargado de la Dirección Dirección Provincial de Educación me dijo que desde Temuco a Porvenir estaban 300 alumnos en lo mismo.
Mi papá ya estaba trabajando en el puente Pudeto, Pudeto, por lo que todos nos venimos venimos a vivir a Ancud”. CAPITAL EDUCACIONAL Hasta 1982 Ancud fue la capital de la Provincia de Chiloé, desde desde que fuera incorporada forzadamente forzadamente a la soberanía chilena chilena en 1826.
Era un centro de comercio importante y a mediados mediados de los años 80 habia un auge de la venta de productos del mar, lo que reforzaba la larga larga tradición de emblemáticos establecimientos educacionales, educacionales, lo que hacía que cientos de jóvenes de la Patagonia Norte emigraran allá.
Juan Manuel González recuerda recuerda que “el Ancud en que vivimos nosotros, siento que fue el mejor Ancud que ha habido en la historia, con mucha vida comercial, deportiva, cultural”. Patricio Velásquez señala que “estábamos en el mismo edificio de la Escuela Normal. Tenía una carga simbólica enorme. Dentro de la sociedad ancuditana, nosotros éramos los chiches de la educación. Nos vestíamos muy formalmente. formalmente. Lo que escuchamos es que, si funcionaba nuestro piloto, en Victoria se iba a abrir la de mujeres. mujeres. Fuimos el único experimento experimento a nivel nacional. La condición condición geográfica y de infraestructura infraestructura debe haber primado para poder recibir a tantosjóyenes, tantosjóyenes, de una zona tan grande. Ancud era una referencia”. Gastón Figueroa comparte que “Ancud, en ese tiempo, era una ciudad que manejaba mucha mucha plata. Había pesqueras y mucho básquetbol. Era una ciudad fascinante, con mucha vida nocturna también.
Era en parte por la fiebre del loco”. Con sólo 13 años, estos niños niños decidían su destino e ingresaban ingresaban a un internado que controlaba controlaba completamente sus vidas: vidas: “Vivíamos en un régimen de internado muy estricto. Teníamos Teníamos que portarnos muy bien para tener la posibilidad de salir el sábado y domingo. Estudiábamos de 8 a 18 horas, de lunes a jueves; los viernes hasta las 13 horas. Luego teniamos teniamos un momento de libertad. Cenábamos y después teníamos teníamos una hora de estudio, que terminábamos a las 20 horas” dice Juan Manuel. “Era una forma de vida. Teníamos Teníamos todos los horarios acotados, acotados, por lo que ordenábamos la cama de una manera, lo mismo mismo con los cuadernos. Nos tocó tocó vivir una época muy distinta distinta a hoy”, afirma Claudio. En 1988, el Gobierno Militar Militar decidió no continuar con el proyecto piloto. “Mi teoría es que cuando la dictadura estaba estaba tan mal en 1983, decidió volvera abrir de a poco las escuelas escuelas normales. Siempre hubo una oposición al cierre de ellas. No se prolongó la experiencia, porque Pinochet perdió el plebiscito”, plebiscito”, reflexiona Claudio. Lo que complementa Patricio Velásquez: Velásquez: “Cuando se cerró la Escuela Normal, nos fuimos a paro en 1988. Solicitamos que el ministro de Educación y Carlos Carlos Witwer, que era el encargado encargado en Puerto Montt en esos años, fueran a Ancud. Entramos Entramos 160 alumnos, pero algunos algunos postularon a otras carreras ose fueron quedando en el camino. camino. Terminamos como 100 titulados. Cuando lo tomó la Universidad Austral, en 1988, incluso hubo un auge de la pedagogía pedagogía en Ancud, porque Max Neef(1994-2002 rector), las cerró cerró en Valdivia. Por el paro, en plena dictadura, llegamos a un acuerdo con la Austral.
En el segundo paro, aparecimos en el diario La Cuarta con el título 50 cabros pobletes quedaron en la calle (risas)”. Juan Manuel siente que ellos son “como el último eslabón eslabón antes del precipicio, porque porque uno tiene demasiado amor por la pedagogía”. Claudio afirma afirma que “lo mejor que me pudo haber pasado, es ser normalista. normalista. Todos los días está conmigo, es una filosofía de vida. Había un sello social muy importante. Cada uno de los compañeros, en sus comunidades, es líder en algún aspecto. Más allá de la escuela, escuela, eso lo echamos de menos menos en los nuevos profesores, carecen en formación de hábitos hábitos y responsabilidades. Tienen zapatos de clavos para salir hasta la hora que le pagan”. Gastón Figueroa reconocer que “para nosotros, con el cambio ala Universidad Austral, la Normal Normal resultó ser mucho más difidil. difidil. La universidad era más relajado. relajado. Nos sentimos distintos a otros profesores en nuestro espíritu espíritu vocacional, porque prolongamos prolongamos en nuestras vida profesional profesional la formación que recibimos. recibimos. Por eso el lema del escudo escudo la exigencia lleva a la excelencia. excelencia.
Hemos dejado una huella en muchos de nuestros estudiantes, había una mística muy importante que no tenían las universidades”. La última generación de profesores normalistas en Chile, Chile, entre 1985 y 1988, seguirá reuniéndose reuniéndose por muchos años, ya que vivieron una tradición centenaria marcada a fuego por una educación integral en un internado donde pasaron hambre y frío en muchas ocasiones. ocasiones. La mayoría de ellos ha cumplido su promesa de trabajar trabajar en zonas rurales, aportando con el liderazgo social que tenían tenían los antiguos profesores.
Como una señal del cierre de los grandes ciclos de la historia, historia, en abril de 2023 se realizó realizó la ceremonia de promoción de la generación 1973 de la Escuela Escuela Normal Rural Experimental Experimental de Ancud.
Decenas de profesores normalistas, de edad avanzada, se reunieron en Chiloé, donde pudieron, simbólicamente, realizar un rito rito público que no pudieron disfrutar disfrutar por el abrupto cambio de régimen que, a pesar de todo, todo, no pudo impedir invisibilizar invisibilizar el enorme aporte a la educación educación pública de los queridos normalistas.
La última generación de profesores normalistas En febrero pasado, se reunió un grupo de ex alumnos de la Escuela Normal Rural Experimental de Ancud (1985-1989), proyecto piloto que intentó revivir esa formación, luego del abrupto cierre de esos establecimientos. CEDIDA EN 1985 SE DIO INICIO AL PROVECTO PILOTO EN LA ESCUELA NORMAL RURAL EXPERIMENTAL DE ANCUD..