Podólogo Javier Vidal, un compromiso con la salud de los pies y el bienestar comunitario
Podólogo Javier Vidal, un compromiso con la salud de los pies y el bienestar comunitario L liclades diversas y prestar un servicio accesible a personas que de otro modo tendrían dificultades para recibir atención profesional. Además, participa en operativos comunitarios que se organizan una vez al mes. reforzando su compromiso con la salud proventiva. ra desarrollar heridas que pueden derivar en complicaciones graves. Superación personal y formación continua La trayectoria de Javier es también un ejemplo de perseverancia. Retomo sus estudios de enseñanza media en 2017, ya en la adultez, para luego especializarse en podología. Antes de dedicarse a esta área, trabajó en masoterapia, lo que le dio un conocimien to previo sobre el cuidado físico y el trato personalizado con pacientes. Actualmente cursa el segundo semestre de la carrera de Trabajo Social en Santo Tomas, una meta personal que considera complementaria a su labor sanitaria. Javier enfrenta su labor profesional con una discapacidad fisica y sensorial, que incluye disminución visual y auditiva. La pérdida parcial de audición lo ha llevado a desarrollar la lectura labial como principal herramienta de comunicación. Su consulta ha crecido gracias a la autogestión y también al respaldo de programas públicos.
Ha sido beneficiario de dos proyectos del Fondo de Solidaridad e Inversión Social (Fosi): uno básico, con el que adquirió su primera camilla y equipamiento esencial, y otro avanzado, aún por ejecutar, que le permitira seguir modernizando sus herramientas de trabajo. Con estos recursos ha incorporado una nueva camilla, lampara, fresas, bisturies, pesa y otros instrumentos fundamentales para un tratamiento seguro y eficiente. Esta inversión se traduce en una mejora directa en la experiencia y resultados que reciben sus pacientes. Una vocación que nació con el voluntariado El vinculo de Javier con la Cruz Roja no surgió por casualidad. Cuando supo que la institución necesitaba un podologo, se ofreció para colaborar como voluntario, rol que ha desempeñado durante más de cuatro añios. Esta experiencia le ha permitido conocer reaa historia de Javier Vidal Vidal es la de una persona que ha sabido unir vocación, esfuerzo personal y compromiso social. Titulado como podólogo en plena pandemia, en 2021, inició su carrera en un contexto adverso, marcado por las restricciones sanitarias y la incertidumbre laboral. Pese a ello, encontró en su trabajo no sólo una fuente de ingresos, sino también una oportunidad para servir a quienes más lo necesitan, especialmente adultos mayores y personas con enfermedades crónicas como la diabetes. Desde sus primeros pasos en la podolo. gía, ha ofrecido servicios tanto en atención particular como a domicilio, adaptándose a las necesidades de cada paciente.
Sin embargo, uno de los aspectos más distintivos de su labor es su participación en la Cruz Roja de Punta Arenas, donde brinda atenciones a un valor reducido de $10.000 como aporte directo a la comunidad.
Alli trabaja tres días a la semana-lunes, miercoles y viernesentre las 10.30 y las 17,30 horas, en un modelo de atención que prioriza la calidad sobre la cantidad. "Máximo atiendo a cuatro o cinco personas por dia, porque mi objetivo es que cada paciente reciba un trabajo esmerado", sostiene. Este cuidado se refleja en su método: una exploración detallada del pie, identificación de posibles patologías y, cuando es nocesario, derivación médica acompañada de un informe.
A diferencia de la creencia común de que la podología se limita al corte de uñas, Javier subraya que se trata de una disciplina de salud que aborda un amplio espectro de afecciones, siendo la onicomicosis -popularmente conocida como "hongo"una de las más frecuentes.
Su especialización se ha orientado hacia el cuidado de pies en pacientes diabéticos, grupo que requiere especial atención debido a la fragilidad de su piel y la facilidad pa-. Voluntario de la Cruz Roja, actualmente estudia trabajo social Javier Vidal ofrece servicios de podologia.