Autor: CARLOS FERNÁNDEZ Presidente de Sochicar
Cartas: Mes del Corazón: Una emergencia silenciosa que merece atención
Cartas: Mes del Corazón: Una emergencia silenciosa que merece atención sonas conozcan y controlen sus "números personales": glicemia, colesterol, presión arterial, peso e indice de masa corporal. Estos datos, más allá de ser cifras, son señales que el cuerpo entrega y que permiten actuar a tiempo. Uno de los pilares para mantener el corazón en buen estado es la actividad fisica.
Basta con 150 minutos semanales de ejercicio moderado, para fortalecer el sistema cardiovascular, mejorar la circulación, reducir el estrés y mantener un peso adecuado, Además, moverse es también una oportunidad para compartir, socializar y sentirse mejor emocionalmente. Junto a esto, no se puede ignorar el impacto de los factores de riesgo: hipertensión, diabetes, colesterol elevado y tabaquismo. Muchos de ellos se pueden controlar con una dieta equilibrada, ejercicio regular y tratamiento médico cuando corresponde. Optar por alimentos ricos en frutas, verduras, granos integrales y bajos en grasas saturadas, junto con reducir el consumo de sal y azúcar, puede tener un efecto positivo y directo en la salud del corazón. Incorporar estos hábitos no solo previene enfermedades graves, sino que mejora sustancialmente la calidad de vida. El Mes del Corazón nos recuerda que la salud cardiovascular no se cuida solo con intervenciones médicas: comienza en lo cotidiano, en nuestras elecciones diarias. Hoy mas que nunca, prevenir es vivir. El inicio del Mes del Corazón es un buen momento para poner en el centro de la conversación, un tema que muchas veces pasa desapercibido: la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
En Chile, más de 30 mil personas fallecen cada año por causas relacionadas con el corazón, lo que las convierte, junto al câncer, en las principales responsables de muerte en el pais, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Entre las enfermedades cardiovasculares más frecuentes en la población chilena destacan el infarto agudo al miocardio, la insuficiencia cardiaca y los accidentes cerebrovasculares, que afectan principalmente a personas adultas y mayores. Además, la hipertensión arterial y las arritmias, son trastornos que pueden aparecer a cualquier edad y requieren atención oportuna para evitar complicaciones de largo plazo.
Sin embargo, no hay que olvidar que los problemas cardíacos también pueden presentarse en la infancia, como ocurre con las cardiopatias congénitas, que son malformaciones presentes desde el nacimiento y constituyen la principal causa de enfermedad cardiaca en infantes. Frente a esta realidad, prevenir no es una opción, es una necesidad. Adoptar una actitud proactiva puede marcar la diferencia entre una vida saludable y la aparición de complicaciones graves. Para eso, es clave que las per-.