Autor: Juan Olivares Meza cronicaUlidersanantonio.cl
Llevan meses habitando entre las grietas y filtraciones de sus casas sin terminar
Llevan meses habitando entre las grietas y filtraciones de sus casas sin terminar promesas, porque desde entonces, todo ha sido un vaivén entre sobrevivir y esperar. No tenemos la recepción final y no podemos seguir arreglando las casas COn recursos propios porque legalmente no nos pertenecen”, aclaró Silvia Morales.
Consultada por nuestro diario, Daniela Donoso, de la entidad patrocinante que acompaña a los beneficiados con las viviendas, reveló que “la constructora a cargo de las obras tiene casi abandonado el proyecto, no han podido terminar los trabajos y por urgencia social tuvimos que pedir una habitabilidad La provisional. constructora lleva más de 2 años y no termina, el último plazo era fin de abril o y nose cumplió”. n la entrada de la viE lla Padre Andrés, en el balneario de Las Cruces, comuna de El Tabo, las fachadas esconden el drama de 76 viviendas sociales para igual número de familias que debían haber sido terminadas hace meses, pero basta cruzar el umbral de la primera casa para descubrir que aquí se levantan parodias de hogares. Paredes a medio terminar, muros agrietados, sistemas eléctricos cruzados como laberintos absurdos.
Todo luce a medias, como sila vida de sus habitantes hubiera sido puesta en pausa a mitad de una frase, “Nos dejaron tirados, así, con todas sus letras” denunció a nuestro diario Margarita Díaz Acevedo, hija de una de las propietarias, tejiendo un relato que se tensa entre la rabia y la impotencia.
Margarita habla rápido, como si cada palabra debiera salir antes de que el silencio vuelva a imponerse, y asegura que “la constructora se fue, dejó la obra sin terminar y los trabajadores se fueron dejando todo a medio terminar. Algunos hasta se llevaron materiales. Las conexiones de la electricidad están muy mal hechas, como si lo hubieran hecho a propósito”, afirmó. En el grupo hay familias que esperaron más de 17 años por estas viviendas. Diecisiete inviernos de promesas, subsidios en papel y comités que envejecieron esperando. Y cuando finalmente les autorizaron a vivir en sus casas, por urgencia social y temor a tomas ilegales, las viviendas no estaban listas. Algunas no tenían agua, ni luz, ni baños conectados. Pero la alternativa era perderlo todo.
“Uno no puede llevar a su mamá discapacitada a una casa donde hay piedras en el suelo, donde no hay accesos. ¿Cómo la subo? ¿ Cómo la cuido? Hace como cuatro meses fue la última reunión con Serviu. Desde entonces no sabemos nada porque los obreros aparecen dos días y desaparecen tres semanas. Hay baños desconectados que nadie arregla. En mi casa el interruptor de luces del comedor prende las luces del dormitovienda hace 15 años.
Ella resume el drama en una sola palabra: “embarrada”. Según relata, la empresa original abandonó las obras porque el Serviu no habría pagado a tiem“Nos dieron la opción de vivir en las casas el 30 de enero, sabiendo que estaban inconclusas. Nos fuimos porquesi no, selas tomaban otros”, explicó. “Ya llevamos más de cuatro meses en esto. Vivimos con fugas, sin baños conectados, con filtraciones. ¿Y la respuesta? Solo rio”, cuenta Margarita Díaz, esbozando al final una sonrisa por lo absurdo del trabajo mal hecho. En otra casa de la villa, Silvia Morales cuenta que pertenece al comité de vi76 viviendas sociales conforman el conjunto habitacional villa Padre Andrés de Las Cruces. Margarita Díaz vecina Villa Padre Andrés. Familias recibieron la autorización para ocupar de emergencia sus viviendas sociales sin que estuvieran concluidas. Hoy viven en la humedad, con baños desconectados y un silencio burocrático que desespera. és Hay baños desconectados que nadie arregla. En la casa el interruptor de luces del comedor prende las luces del dormitorio”. HAY IMÁGENES, COMO ESTA, QUE NO NECESITAN EXPLICACIÓN. LAS FACHADAS DE LA VILLA PADRE ANDRÉS DE LAS CRUCES ESCONDEN EL DRAMA DE SUS MORADORES