La Contraloría General de la República y la probidad
La Contraloría General de la República y la probidad Columna JoséIgnacio Martínez Estay La Contraloría General de la República y la probidad a Contraloría General L de la República ha pasado a ocupar un lugar destacado en las noticias de las últimas semanas.
El escándalo delas licencias médicas de funcionarios públicos transformó a su vez a la contralora en uno delos personajes públicos mejor evaluados por los ciudadanos, quienes valoran el importante rol que está desempeñando esta insti: tución en defensa del principio de probidad al que están sometidos todos los órganos que ejercen funciones públicas. Sin embargo, han aflorado algunas críticas a la actuación dela Contraloría.
Se ha señalado que la forma en que este desempeño de su cargo, con preeminencia del interés pú blico sobre el privado" (art. 61 letrag). Pues bien, esas normas dan sentido y sirven para validar jurídicamente la informa1n que requirió la Contraloríaa la Policía de Investigaciones y ala Superintendencia de Seguridad Social, que detonó el escándalo de las licencias :dicas. Y es que la supervim del cumplimiento del principio de probidad es parte de las funciones de la Contraloría.
Enefecto, su Ley Orgánica dispone quela Contraloría General de la República tiene por objeto vigilar el cumplimiento de las disposiciones miento de las disposiciones miento de las disposiciones "Se ha señalado que la forma en que este organismo obtuvo la información sobre las licencias médicas no está amparada por el Derecho, ya que este organismo carecería de facultades para hacerlo". organismo obtuvola información sobre las licencias médicas no está amparada por el Derecho, ya que este organismo carecería de facultades para hacerlo. Pero unanálisis de nuestro ordenamiento jur co parecieraindicarlocontrario. Veamos. Elartículo 8 dela Constitución dispone que quienes ejercen funciones públicas deben dar estricto cumplimientoal principio de probidad, en todassus actuaciones.
Asimismo, la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado (artículos 52 al 68), regula en detalle este principio, en tanto queel Estatuto Administrativoseñala que una delas obligaciones de los funcionarios públicos es la estricta observancia del "principio de probidad administrativa, que implica una conducta funcionaria moralmente intachable y una entrega honesta y leal al una entrega honesta y leal al una entrega honesta y leal al del Estatuto Administrativo (artículo 1), entre las que se cuenta obviamente el principio de probidad, y queelContralor General puede solicitar a cualquier autoridad, jefe de servicio o funcionario los datos e informaciones que necesite para el mejor desempeño desus labores (artículo 9). Como se ve, la Contraloría obtuvo la información sobre las licencias médicas fraudulentas ejerciendo sus competencias fiscalizadoras, que incluyen la posibilidad de requerirlos datos necesarios para velar por el principio de probidad, al que, como se dijo anteriormente, están especialmente obligados todos los funcionarios públicos.
Por eso los esfuerzos de todas las autoridades del Estado deben poúnerse más en el fortalecimiento de la probidad, que en la crítica a quien sólo está cumpliendo con su labor de control. *profesor de Derecho Constitucional. Investigador de Polis, el Observatorio Constitucional de la U. de los Andes. - - -