Origen del SARS-CoV-2: Transparencia y cooperación científica son elementos claves para prevenir futuras pandemias
Origen del SARS-CoV-2: Transparencia y cooperación científica son elementos claves para prevenir futuras pandemias A más de cinco años del inicio de la pandemia de COVID-19, el mundo mundo sigue enfrentando incertidumbres críticas sobre los orígenes del SARSCoV-2. SARSCoV-2.
En su evaluación más reciente, el Grupo Asesor Científico para los Orígenes de Patógenos Nuevos (SAGO) de la OMS reitera que, aunque la evidencia científica disponible apoya mayoritariamente un origen zoonótico, zoonótico, aún persisten importantes vacíos de información que impiden llegar a una conclusión definitiva.
La evaluación basada en datos recopilados entre noviembre de 2021 y junio de 2025 examinó cuatro posibles hipótesis: transmisión zoonótica directa o vía hospedero intermediario, accidente de laboratorio, introducción introducción a través de la cadena de frío, y manipulación deliberada seguida de falla en bioseguridad. De todas ellas, sólo la primera cuenta con respaldo científico sustantivo, incluyendo análisis genómicos que sugieren múltiples introducciones y evidencia metagenómica de especies susceptibles al virus en el mercado de mariscos de Huanan, China. Sin embargo, el informe de SAGO también señala una limitación fundamental: fundamental: la imposibilidad de acceder a datos clave.
Países como China, Alemania Alemania y Estados Unidos no han entregado información crítica, incluyendo registros de salud del personal de laboratorios de Wuhan, protocolos de bioseguridad bioseguridad vigentes en 2019 o secuencias genéticas de casos tempranos. Esta barrera en la obtención de información obstaculiza seriamente los esfuerzos por entender cómo, cuándo y dónde ocurrió el primer contagio humano, y limita las lecciones que podrían prevenir una próxima pandemia. Chile y América Latina no pueden ser observadores pasivos en este proceso. proceso. La experiencia del COVID-19 demostró que la falta de transparencia y colaboración científica global tiene consecuencias directas en la capacidad de respuesta de todos los países.
Desde el Centro de Investigación de Resiliencia Resiliencia a Pandemias (CRP) de la Universidad Andrés Bello, sostenemos que la comprensión de los orígenes del SARS-CoV-2 no es solo un problema técnico, sino una cuestión de seguridad sanitaria global. Las pandemias del futuro pueden surgir en cualquier parte del mundo. Para enfrentarlas, se requiere construir un ecosistema global basado en la ciencia, la confianza mutua y el acceso abierto a la información.
Actualmente, Actualmente, diversos patógenos están mostrando un preocupante aumento de brotes, como el virus Nipah en Asia, el hantavirus en América del Sur, y las variantes variantes de la gripe aviar (como H5NI) que han cruzado la barrera interespecie. Además, el resurgimiento del sarampión en regiones con baja cobertura de vacunación y la propagación de enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue y el chikungunya, se perfilan como amenazas significativas. Estos brotes tienen el potencial de evolucionar hacia epidemias o incluso pandemias si no se abordan de fonna oportuna y coordinada. Chile, con su trayectoria científica y su compromiso con la salud pública, debe ser un promotor promotor activo de estos principios, fortaleciendo su capacidad de vigilancia, investigación y cooperación internacional. Origen del SARS-C0V-2: Transparencia y cooperación científica son elementos claves para prevenir futuras pandemias Dr. Claudio Cabello (Director) y Dr. Jorge Soto (Investigador), Centro de Investigación de Resiliencia a Pandemias.