Elevando la discusión: los debates que marcaron la semana
Elevando la discusión: los debates que marcaron la semana En la tierra de Oz "Ya no estamos en Kansas", decía Dorothy en el Mago de Oz y esa vieja frase parece describir a la perfección el momento que atraviesa el mundo. Las certezas se desvanecieron y lo impredecible está a la vuelta de la esquina --en rigor ya la cruzó. Alguien podría decir que todo empezó por allá por 2014 en Crimea -otros, que fue en 2016 con Trump y el Brexit.
Pero lo cierto es que en el último tiempo el asunto se aceleró, desde la invasión a Ucrania, la violación de la embajada de México en Ecuador y el ataque de Irán alsrael, en respuesta a la acción israelí contra el consulado iraní en Siria. Parafraseando a Disraeli, en estos tiempos parece que lo inesperado siempre termina sucediendo.
Como apunta Óscar Contardo, "vivimos una época de cambio, un tránsito hacia algún sitio que nadie aún puede describir". Y en este proceso, agrega, "hay transformaciones visibles en curso, veloces, sobre todo las tecnológicas y otras imperceptibles, con movimientos tectónicos que se desplazan la mayor parte del tiempo de manera sigilosa" basta leer la entrevista de Luigi Zoja sobre los sorprendentes cambios en la sexualidad humana.
Contardo, sinembargo, apunta a los desafíos sociales que enfrenta Chile y que no parecen "existir en la discusión política actual". Al contrario, dice, "esta está consumida por la miseria", es incapaz de "atender alas alertas" y, peor aún, de "ofrecer algún futuro". Es el engranaje de la política que terminó entrampándose. Y la pregunta que resurge cada cierto tiempoes la versión local de la quese hacía Zavala en Conversación en La Catedral, ¿en qué momento se jodió Chile? o se "chingó", como apunta Sebastián Edwards.
Y según él, fue "alrededor de 2015". No es casualidad, dice, que "el 2014 se haya reemplazado el sistema binominal por un pésimo sistema proporcional que fomenta la fragmentación política". Pero para él, "tan importante como reformar el sistema político es retomar la *audacia" en política económica". "Eso es lo que se hizo hasta, aproximadamente, 2014". Y, por eso, propone algunas ideas, como una revolución desregulatoria y apostar por contar con dos o tres puertos entre los 10 más eficientes del mundo.
Para qué limitarse, hay que "pensar en grande". Pero volviendo a Oz, hoy estamos en un mundo donde se rompieron los consensos a nivel global, como dice Jaime Abedrapo. "La conferencia de Yalta ha llegado a su fin y con ello la efectividad de Naciones Unidas", escribe. El mundo nacido tras el trauma de la Segunda Guerra Mundial se está desvaneciendo. "El orden del mundo alcanzado por Josef Stalin, Winston Churchill y Franklin D. Roosevelt ha colapsado instituklin D. Roosevelt ha colapsado instituklin D.
Roosevelt ha colapsado instituElevando la discusión: los debates que marcaron la semana Por Juan Paulo Iglesias Je Je cional y moralmente" y este desahucio del sistema internacional se confirma "en la anomia de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad". Por ello, sólo queda, según Patricio Morales, defender los pilares de la democracia y apostar por más globalismo para generar mejores políticas y poder hacer frentea esta "inestabilidad estructural". Sin consensos Como en Years and Years, esa distópica serie protagonizada por Emma Thompson sobre el avance del populismo en Reino Unidoenun mundo cada vez más caótico, a veces las cosas suceden sin imaginar sus consecuencias. Esla vieja fábula de la rana.
Solo el tiempo ofrece la perspectiva de los hechos, aunque a veces. e ya es demasiado tarde. 7 Einstein decía queel tiem, poexiste sólo para quelas MES cosas no sucedan todas juntas, pero hay que admitirquea veces la máxima nose cumple.
Lo resume dramáticamente Max Colodro al recordar cómoel mismo día en que asesinaron a un teniente de Carabineros "también fue acribillado por pistoleros un hombre que tenía 99 detenciones previas y llevaba asu hija ala escuela" y "le dispararon a quemarropa a un cantante urbano". Es parte de "la nueva normalidad", según Colodro, a la que sesumaen los últimos días, algo "verdaderamente asomtimos días, algo "verdaderamente asomtimos días, algo "verdaderamente asombroso": que un fiscal nos informe "que, según las evidencias recogidas hasta ahora, el exmilitar venezolano Ronald Ojeda habría sido asesinado por extranjeros que ingresaron al país con ese específico fin" y que el crimen "fue de carácter político". Y si bien "eralo quetodos presumían", apunta Colodro, "lo que empieza a develarse es brutal", el hecho de que "una dictadura extranjera habría tomado la decisión de asesinar en Chile a un exmilitar disidente". Y si eso ya es delirante, "más delirante" aún, dice, es "que el Presidente le *exija' a esa dictadura colaboración". Unadictadura que, como apunta Daniel Matamala, recordando esa expresión usada en el siglo XIX para describir alimperio Otomano, se ha convertido en "el hombre enfermo" de Occidente.
Porque, dice, "más allá de queel colapso económico y social provocado" por el régimen de Maduro "es considerado por expertos como el peor derrumbe en décadas de un país que no está viviendo una guerra", lo cierto es que sucrisis "afecta a toda América". "La migración de millones de personas en tan breve tiempo", dice, "tieneun efecto desestabilizador sobre cualquier sociedad". Y estose remonta yaa una década.
Sin embargo, los países aún sonincapaces "de abordar el problema en conjunto". Un asunto complicado, eso de no poder enfrentar el tema en conjunto, cuando como dice Lucía Dammert, "América Latina está en un claro proceso de consolidación de una serie de mercados ilegales". Son "tiemposrecios", como agrega Carolina Valdivia, donde sería ideal que América Latina hablara con "una que América Latina hablara con "una NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN Suscríbase al newsletter de Opinión, Elevando la discusión, los debates que marcaron la semana, para conocer los temas que fijaron agenda y las columNas de la semana. latercera. com Nas de la semana. latercera. com Nas de la semana. latercera. com sola voz", pero "las divisiones y alineamientos empiezan a ser claros eirreconciliables. Y el problema deeso, volviendo a Dammert, es que "los enfrentamientos verbales (... ) pueden terminar fortaleciendo" al crimen organizado. Divide y vencerás, como el viejo dicho. Un problema de confianza Y si de enfrentamientos verbales se trata, los que llevan sacudiendo la política chilena en los últimos años tampoco ayudan a reforzar las instituciones.
El futuro sobre el que advertía hace algunos años Carlos Meléndez al recordar las consecuencias que podía tener en Chile la lógica de fragmentación y transfuguismo político de Perú parece estar cada vez más cerca -si no llegó ya.
Lo dice Carlos Correa, por ejemplo, al escribir sobre la elección de la mesa de la Cámara, que según él, "muestra la nueva realidad de la fragmentación política", porque "el primer vicepresidente elegido es un exdiputado RN ahora matriculado en la pyme política del profesor Pari Y, en la vereda del frente, "las cosas no eran muy distintas". Decir que los partidos políticos no atraviesan un buen momento ya es una obviedad. Pero algunos tampoco ayudan a revertir eso, como sugieren Gabriel y Cristóbal Osorio.
Según ellos, si bien "se entiende que el gobierno quiera mover todas las cartas" para empujar sus reformas, "y ello incluye la de llamar a los movimientos sociales ala acción", "la discusión extravía el rol de los partidos". Cada cual tiene un papel, y más allá de los problemas que estos ya arrastran, "el sistema no puede agregar el de su reemplazo (... ) por los movimientos sociales". Porque son los partidos "los únicos capaces de articular intereses y movilizar a la ciudadanía". Más vale fortalecerlos que debilitarlos.
Y si de reforzar los partidos y la institucionalidad se trata, tampoco ayuda la creciente percepción de corrupción entre los chilenos que advierte Ascanio Cavallo. "En los últimos 10 años Chile retrocedió siete puntos en el Índice de Transparencia", apunta. Y más grave aún, "una encuesta Criteria reciente muestra que un 90% piensa que la corrupción en Chile es "un problema muy grave"". Adiós a la excepcionalidad chilena. Y si, como la define la RAE, "la corrupción es un deterioro de la honestidad", es al final "la cultura social" la que se está deteriorando.
Solo queda "el poder del voto", parafraseando a Don Winslow y su clásico libro sobre el narco en México, para castigar a autoridades "asociadas a algún grado de corrupción". Pero... estamos en la tierra de Oz. Pero... estamos en la tierra de Oz..