Autor: Juanita Ortiz Bonilla cronica@lidersanantonio.cl
Mamá primeriza denuncia negligencia médica por tratamiento anticonceptivo
RESPUESTA Desde la Dirección de Salud de la Municipalidad de San Antonio, entregaron una escueta respuesta sobre este caso. “Como Dirección de Salud estamos al tanto del tema, se ha acompañado a la usuaria y se realizarán los procedimientos administrativos correspondientes”, explicaron sobre el caso. VARIOS EXÁMENES SE HA DEBIDO REALIZAR DE MANERA PARTICULAR. Asna Birkner Garri Y: (30) está desesperada, debido a que cuando su bebé tenía un mes, decidió ponerse un Implanon (implante anticonceptivo), para lo que acudió al Cesfam 30 de Marzo. Hasta ese momento todo iba bien; sin embargo, al día siguiente, amaneció con el brazo, donde se realizó el procedimiento, completamente inflamado. “El 16 de noviembre fui a colocarme el Implanon al Cesfam 30 de Marzo. Al otro día mi brazo amaneció inflamado. No pude ir ese mismo día a Urgencias porque no tengo red de apoyo acá y tuve que llamar a mi mamá para que viajara desde Santiago y me ayudara a vera mi hija.
Fui el día 19 a la Urgencia del hospital (Claudio Vicuña) y me atendió el doctor Ortiz, me mandó a hacer exámenes, un TAC (tomografía computarizada) sin contraste, el que salió bueno porque no era ningún problema óseo”, comienza relatando su caso. Para continuar con lo sucedido. “Después me dijeron que si mi hombro seguía inflamado después de tres días, me presentara en el consultorio.
Siguió la inflamación y fui al Cesfam, me atendió el doctor Jiménez, me dio una interconsulta para ir nuevamente al hospital porque Procedimiento se aplicó en el Cesfam de la 30 de Marzo y hace tres meses que la mujer de 30 años tiene un brazo inflamado. No puede amamantar ni cargar a su pequeña hija. él pensó que podía ser un absceso, algo más complicado.
Fui el día sábado, a las 11 de la mañana me presenté en el hospital, me mandaron a hacer un TAC con contraste, estuve hasta la medianoche y el resultado fue el mismo, no tenía nada óseo”. Ante esto, recuerda que debió hacer un tratamiento con antibióticos, por lo que debió suspender la lactancia a su pequeña hijita. “Me volvieron a mandar para la casa, con antibióticos, para ver qué evolución tenía. Tomé antibióticos por 15 días, no había cambios, seguía con la infección que detectaron con un examen de sangre.
Tuve que comprar tarros de leche a mi hija, siendo que yo tenía leche para poder amamantarla, pero con todos los antibióticos que estaba tomando, la pediatra particular que vi, me los suspendió”. LUEGO DEL PROCEDIMIENTO EL BRAZO DE YASNA DE INFLAMÓ A CAUSA DE UNA INFECCIÓN. iNFECCIÓN Luego de acudir a diversos especialistas como traumatólogo, ginecóloga y kinesióloga en el hospital Claudio Vicuña, Yasna Birkner, indica que se realizó una resonancia magnética, la que aclaró lo que sucedía con su brazo. “Tuve que hacerme una resonancia en Santiago, ya que tendría que ser con sedación, porque no soportaba el dolor. El resultado arrojó que tenía una infección en tres partes del húmero, comprometiendo algunos músculos como el bíceps. Volví a San Antonio y hablé con la kinesióloga en la última sesión de 10. Fui al consultorio a hablar con el director y en ese momento me enteré que lo habían cambiado, por el director (s) Gabriel Saldías. El me atendió ese mismo día, le presenté mi caso y me trató de ayudar. Empezó a hacer todas las gestiones correspondientes, para que tuviera una atención más pronta. Fue la única persona que se preocupó realmente de mi caso”, agradeció. HOSPITALIZACIÓN Producto de que no presentaba ninguna mejoría y la infección persiste, esta educadora de párvulos de profesión, cuenta que estuvo hospitalizada durante 9 días en el Claudio Vicuña. “Tuve una reunión con el director de Salud municipal, Jaime Reyes y le expuse el caso.
Me dijo que estaba conmigo, que me iban a ayudar, pero hasta el momento la única ayuda que recibí fue entrar al hospital, donde tuve que ingresar por Urgencias, me hospitalizaron del 10 al 18 de febrero y durante siete días no me hicieron nada. Eso me hizo frustrarme, llorar mucho. En la sala que estuve el baño no tenía luz y el lavamanos estaba tapado. Dicen que en pandemia hay que lavarse las manos frecuentemente y con la otra paciente, no podíamos ni lavarnos los dientes”, reclama la joven madre. Actualmente está con hospitalización domiciliaria, a la espera de que le confirmen una atención en el hospital Carlos van Buren de Valparaíso. “Estoy sufriendo por mi hija, porque no puedo cargarla, ni amamantarla. Lo único que necesito es alguna solución para mi brazo, para poder atender a mi hija como corresponde. Ojalá esto no vuelva a pasarle a otra paciente, porque lo que estoy viviendo no se lo doy a nadie”, acotó con tristeza. O