Conclusiones y desafios para los equipos de salud y educación
Una de las autoras de la investigación, la académica Dra.
Alejandra Caqueo Urízar del Instituto de Alta Investigación de la Universidad de Tarapacá destacó que los cambios observados en las dos oleadas implican retos en materia de salud mental escolar que apunten a mejorar la coordinación de los equipos de salud mental en establecimientos educacionales, así como la necesidad de una mayor inversión en salud mental a nivel de Atención Primaria.
“La importancia de esta investigación radica en que, en el ámbito de la Educación, más allá de la adquisición de contenidos y aprendizajes por parte de los y las estudiantes, se hace prioritario generar los dispositivos para diagnosticar e intervenir los problemas de salud mental de esta población”, explicó la también investigadora del Centro de Justicia Educacional de la Universidad Católica.
En esa línea, Caqueo Urizar enfatizó en la necesidad de continuar inyectando recursos en salud mental más allá de la baja en los casos de Covid-19 que puedan presentarse a nivel nacional, ya que “los efectos de la pandemia y el confinamiento que implicó no se resolverán en el corto plazo, por lo tanto es vital que sea un foco central de las políticas públicas tanto de Salud como Educación”.
AGENCIAUNO A he e TRAS EL CONFINAMIENTO, LOS EQUIPOS DE EDUCACION Y SALUD DEBEN TRABAJAR DE LA MANO PARA ATENDER SUS EFECTOS.