100 AÑOS DE “VEINTE. POEMAS DE AMOR..”: Las luces y sombras de la poesía amorosa de Neruda
100 AÑOS DE “VEINTE.
POEMAS DE AMOR.. ”: Las luces y sombras de la poesía amorosa de Neruda 100 AÑOS DE"VEINTE POEMAS DE AMOR... ": Las luces y sombras de la poesía amorosa de Neruda FRANCISCO JAVIER OLEA "Neruda, cállate tú", se ha leído en decenas de pancartas de marchas feministas, impugnándole al poeta una carga machista en su obra. Quizás es una lectura simplista, pero también el eco de una biografía controvertida que hoy parece haberlo sacado de las fiestas oficiales. A 100 años de la publicación de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", diferentes escritores evalúan la actualidad del libro, uno de los más clásicos de la poesía en español. Su "belleza intrínseca" resiste a cualquier moda, dicen, pero agregan que las nuevas lecturas, especialmente hechas por mujeres, también son bienvenidas y necesarias. U n muchacho flaco, de cara larga y delgada, aún de pocas palabras, pero decidido. Pálido, casi amarillento, lo describieron esos días. Llegó una mañana hasta la librería Nascimento, ubicada en Ahumada 125, para hablar con su dueño, el editor Carlos George Nascimento. Corría el año 1924. Quería que le publicara un libro, un puñado de poemas sobre amor, despecho y desesperación que había escrito en su pieza en una pensión de la calle Maruri.
Tenía 19 años, colaboraba en algunas revistas y diarios, había publicado un libro que, aunque de escasísima circulación, se leía con sorpresa, "Crepusculario". Lo que llevó ese día a la librería eran 21 poemas y ya los firmaba con el nombre con el que iba a ser conocido mundialmente, Pablo Neruda.
En buena medida, la fama iba a venir de ese volumen, "Veinte poemas de amor y una canción desesperada". Publicado en junio de 1924 por la editorial Nascimento, a un siglo de su lanzamiento es difícil calcular el impacto de los poemas.
Desde que en 1961 se celebró la venta de 1 millón de ejemplares de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", la cifra ha crecido de manera tan tumultuosa que es imposible seguirle la pista.
Se sabe que ha sido traducido a más de 50 idiomas y sistemáticamente se imprimen nuevas ediciones: la semana pasada, el director de la Fundación Neruda, Fernando Sáez, recibió una nueva versión bilingüe publicada en China. Pero acaso más que cualquier número, el libro consiguió lo más difícil de todo: convertirse en un clásico popular de la poesía amorosa.
Mil veces declamado, pirateado, impreso en póster de ferias artesanales, citado en todos los idiomas. "Aún hoy no existe, en esta categoría, un libro de amor más desesperado, más sediento y húmedo que los 20 poemas de amor, y eso lo instala muy cerca de la experiencia del lector de cualquier época.
Estamos frente a un clásico de la poesía", asegura Verónica Jiménez (Santiago, 1964), poeta que en los últimos años ha explorado en talleres de lectura y columnas una zona mucho menos luminosa del poeta: Jiménez ha discutido con textos a la mano una embestida de voces que han declarado a Neruda como machista icónico y símbolo de los valores patriarcales del siglo XX.
Las críticas parten en la vida del escritor y llegan hasta el corazón de su obra: "Neruda, cállate tú", ha aparecido en pancartas de marchas feministas, parafraseando su clásico verso en el poema 15: "Me gustas cuando callas porque estás como ausente". Jiménez cree que esa idea sobre el poema 15 proviene de una lectura errónea. Editora del sello Garceta y autora de libros como "La aridez y las piedras" (Premio Municipal de Literatura) sostiene: "Sobre el machismo que presumiblemente hay en ROBERTO CAREAGA C. SIGUE EN E 2. 100 AÑOS DE “VEINTE. POEMAS DE AMOR.. ”: Las luces y sombras de la poesía amorosa de Neruda El poeta Juan Cristóbal Romero. La poeta Verónica Jiménez La escritora Antonia Torres El escritor Arturo Fontaine El poeta Rafael Rubio.
L a p o e t a E l v i r a Hernández KARIN POZO CRISTIÁN SOTO HÉCTOR FLORES LORENA PALAVECINO HÉCTOR FLORES ALEJANDRO BALART de amor de todos los tiempos"-entiende que la vida del poeta genera las controversias. "Pensó y dijo Neruda cosas muy equivocadas. Ese abuso que él mismo confesó en `Confieso que he vivido' es abominable. Y así nos lo hace sentir, arrepentido. Pero nada que haya hecho o dicho logra manchar la grandeza de su poesía. Los artistas muchas veces son malas personas. No digo con eso que Neruda lo haya sido. Ocurre que su sentido de los ritmos del idioma, sus imágenes, la inteligencia de su sensibilidad son algo que se ha dado pocas veces. Con Neruda la belleza se palpa", asegura. Nuevas lecturas Pero si fuera tan sencillo como quedarse en la solidez de la obra de Neruda, esta discusión no existiría.
Para la poeta Elvira Hernández, los "20 poemas de amor y una canción desesperada" representan un tránsito desde el romanticismo hacia la modernidad del eros. "La voz de esos poemas encarnaba el espíritu del siglo XX en términos del eros masculino amatorio, pasional, posesivo, patriarcal, absoluto de palabra. Era dueño del mundo y de la mujer, ambos modelados a su antojo; y ella, su objeto amado.
Lo dice a la perfección en el Poema 15: "Como todas las cosas están llenas de mi alma, / emerges de las cosas llena del alma mía. / Mariposa de sueño, te pareces a mi alma'. Neruda está, en esos instantes, escribiendo en la cúspide mundial", sostiene y, sin embargo, añade que mientras el poeta se erigía como voz central, en ese momento histórico las mujeres también encontraban nuevas rutas. "La mujer comenzaba a avanzar en autonomía, a recuperar su unidad y a incidir en el destino de la sociedad humana.
Esa resistencia le permite a la mujer llegar al siglo XXI con propuestas diferentes de sociedad, más libres desde todo punto de vista, menos injustas, que incluye como una tarea no renunciable otras lecturas de nuestra huella cultural y literaria", sostiene Hernández. "`20 poemas de amor... ' necesita esas otras lecturas y la mujer está convocada a hacerlas. Que aquello afectará a ese conjunto de poemas, no hay duda. Tomo el verbo afectar en el sentido de vinculación, pues es obvio que a la mujer le concierne y porque también está su afecto en juego, algo que ya no podría considerarse despreciable. No hay que temer a esa nueva mirada que va en busca de conocimiento. Nada es fácil. No soy partidaria de arrasar ciudades, dinamitar monumentos, quemar libros, desaparecer personas y negar el pasado histórico. Este es un libro que las mujeres tenemos que mantener a la vista, e ir punto por punto, letra por letra, sobre ese enlace llamado amor", agrega.
Ganadora del Premio Municipal 2023 por el poemario "Los detalles del mundo", la poeta Antonia Torres también entiende las "sospechas" que se ciernen sobre los clásicos amorosos de Neruda: igual que Shakespeare, por ejemplo, modeló la exp e r i e n c i a a m o r o s a. "Han producido culturalmente un cierto modelo de relación romántica, que en este caso es heteronormada, patriarcal.
Y las experiencias amorosas son infinitamente más variadas y escapan a ese modelo tradicional del amor", asegura. "Sin embargo, lo importante para valorar la obra de un poeta no es el contenido ideológico de sus textos, creo yo, sino el uso novedoso y original del lenguaje. El efecto de ese lenguaje y el rendimiento estético que multiplica los sentidos.
Y allí la vigencia de cualquier libro de Neruda sigue siendo innegable y se resiste a lecturas lineales que quieren ver en el `me gustas cuando callas porque estás como ausente' un silenciamiento u obliteración de la voz de la mujer", agrega. "¿Cómo se ha mantenido la frescura, el aroma vivo de estos versos durante todos estos años que fueron como siglos? Yo no puedo explicarlo", decía Neruda en los años 60. Aún faltaba para que ganara el Nobel de Literatura, pero ya tenía carne de estatua. Iba a seguir escribiendo poemas de amor.
Seguiría siendo fuente de preguntas de difícil respuesta, controversias ineludibles y misterios tan fantasmales que ni la justicia ha logrado responder: solo hace un mes la Corte de Apelaciones de Santiago reabrió una investigación que ya lleva 13 años sobre las causas de su fallecimiento, para esclarecer si fue por el cáncer que padecía o por un envenenamiento. dares convencionales", sostiene. Y añade: "Hay que tener la sensibilidad muy adormecida para no conmoverse con la belleza intrínseca del poema XX, que trasciende las modas. Si Neruda hubiera abandonado la poesía a los diecinueve años, al igual que Rimbaud, este poema le habría asegurado un lugar en la posteridad". La posteridad, ya sabemos, tiene caminos zigzagueantes.
Pero para el poeta Rafael Rubio, las modas críticas no afectan el trabajo del poeta. "No creo que la obra de Neruda se vea afectada por cuestionamientos críticos o seudocríticos provenientes de las parcelas ideológicas de turno, tan sectarias como las mismas amenazas discriminatorias que ellas mismas denuncian en sus discursos", asegura. "Es tal la contundencia de obras capitales como `Canto general', `Residencia en la tierra' o los mismos `Veinte poemas', que se hace imposible soslayar un hecho categórico: la obra de Neruda ha llegado a convertirse en fundamento vivo de la lengua y de nuestra cultura.
Y ante ese hecho, cualquier devaluación que no tome en cuenta en primera instancia la dimensión material y artística de la obra nerudiana cae en un error imperdonable: juzgar una obra literaria, a espaldas de su naturaleza, como si fuera un texto referencial cuyos presupuestos morales o éticos lo vuelven vulnerable a la censura, la funa y la cancelación". Revisando justamente los textos de Neruda, Arturo Fontaine entiende que el clásico "me gustas cuando callas" puede ser desconcertante, pero al seguir leyendo el poema 15 aparece un significado más amplio: "Inmediatamente quien habla dice: `me oyes desde lejos y mi voz no te toca'. No es que el enamorado busque ese callar; es ella la que se aleja. Más adelante él dirá: `déjame que me calle con el silencio tuyo'. Ella lo silencia a él. Ella, de hecho, tiene la iniciativa, ella se ausenta. Y ella lo conduce a la quietud de su silencio", dice el escritor. "Tal es la indiferencia y distancia que ella ha interpuesto entre ellos, que él llega a imaginarla muerta. Hasta que una palabra o una sonrisa la devuelve a la vida. Con una pizca de humor respecto de sí mismo y de su oficio, dirá que está alegre, alegre de que esa imagen momentánea suya no sea cierta.
Se ve entonces qué es lo que le gusta cuando ella calla, no su callar mismo, sino lo contrario, lo que brotará de él". En todo caso, Fontaine --que cree que `Poema 20' es uno de "los más poderosos poemas ese poema, me parece que hay una lectura que se sitúa fuera del poema. Porque el interés es sacar un verso al ruedo de una discusión social en la que el verso no puede decir ni sí ni no.
Sería igual de absurdo que alguien pretendiera polemizar con John Donne porque escribió `mátame, amor, y haz una disección'. Los poemas no son discursos, quizá valga la pena decirlo una vez más". Y agrega: "¿ Es machista Neruda en este poema? No.
En cuanto hombre inserto en su época y en Latinoamérica, probablemente lo fue (no tanto como De Rokha o Parra, creo yo), pero él mismo pregonaba en un poema que para el año dos mil el patriarcado estaría en retirada". Figura decisiva de la identidad nacional, Neruda también fue ícono internacional que se involucró activamente en la Guerra Civil Española y en su rol de militante comunista en la Guerra Fría. Nicanor Parra solía decir que había logrado lo imposible: recibir el Premio Stalin de la Paz y el Premio Nobel de Literatura.
Pero los años no han pasado en vano y en 2018 se publicó en España un "Breve decálogo de ideas para una escuela feminista" en que, entre otras medidas, se pretendía excluir la lectura de Neruda.
Más que un efecto de su obra, la idea venía de la biografía del poeta: por ejemplo, que el mismo autor escribió en sus memorias, "Confieso que he vivido", que mientras fue cónsul en Rangún (Birmania), a fines de los 1920, violó a una empleada de su residencia. O, también, el que abandonara a su hija Malva Marina, aquejada de una hidrocefalia, y a su madre, María Antonieta Hagenaar, en una Europa a las puertas de la Segunda Guerra Mundial. Y aunque la idea del decálogo feminista fue rechazada transversalmente, en la práctica las nubes sobre Neruda no parecen del todo despejadas. Cuando el año pasado se cumplieron 50 años de la muerte del escritor, en Chile no hubo ningún acto oficial de envergadura para recordarlo.
Hace unas semanas, la revista estadounidense The New Yorker publicó un extenso artículo titulado "La segunda muerte de Pablo Neruda", en que intentaba responder la pregunta "por qué se ha puesto en duda todo lo relacionado con el poeta nacional de Chile". Para conmemorar los 100 años de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", algo viene, pero tampoco fuegos artificiales: editorial Planeta publicará en junio una edición conmemor a t i v a, m i e n t r a s l a Fundación Neruda prepara un encuentro para que el aún está buscando financiamiento.
Una belleza intrínseca "Los `Veinte poemas de amor y una canción desesperada' es un libro doloroso y pastoril que contiene mis más atormentadas pasiones adolescentes, mezcladas con la naturaleza arrolladora del sur de mi patria", escribió Neruda en "Confieso que he vivido", explicando el origen de los poemas. Y ante la pregunta sobre quién era la mujer que lo había inspirado, aseguró que eran Marisol y Marisombra.
La primera había sido, en sus palabras, "un idilio de la provincia encantada con inmensas estrellas nocturnas y ojos oscuros como el cielo mojado de Temuco". Mientras que la segunda, venía de una estudiante en Santiago. "Boina gris, ojos suavísimos, el constante olor a madreselva del errante amor estudiantil, el sosiego físico de los apasionados encuentros en los escondrijos de la urbe", explicó misterioso. Con los años, no hay duda de que Marisol fue Teresa León Bettiens y Marisombra Albertina Rosa Azócar. Esta última fue un amor que lo persiguió por años y que solo habría superado al emparejarse con Delia del Carril.
En cualquier caso, esas dos mujeres iluminan el camino del poeta y de su obra: del eco de la provincia llega a la ciudad y su poesía escapa del terreno del modernismo para encontrar rutas desconocidas y personales. Según el mismo Neruda diría, "cerré la puerta a una elocuencia que para mí sería imposible de seguir, reduje deliberadamente mi estilo y mi expresión.
Buscando mis más sencillos rasgos, mi propio mundo armónico, empecé a escribir otro libro de amor y llegué a los veinte poemas". Los veinte poemas no solo fueron un éxito comercial, también el inicio de una poesía amorosa con pocos parangones.
Según el poeta Juan Cristóbal Romero, ahí Neruda se encontró con una "belleza intrínseca", a la que solo han alcanzado obras con la armonía y naturalidad de piezas de Bach o san Juan de la Cruz. "Es decir, tocar el corazón de las personas sin importar influencias externas o están100 años de.. . VIENE DE E 1 `` "No hay que temer a una nueva mirada que va en busca de conocimiento. Nada es fácil.
No soy partidaria de arrasar ciudades, dinamitar monumentos, quemar libros, desaparecer personas y negar el pasado histórico. `Veinte poemas... ' es un libro que las mujeres tenemos que mantener a la vista, e ir punto por punto, letra por letra, sobre ese enlace llamado amor"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . ELVIRA HERNÁNDEZ `` Hay que tener la sensibilidad muy adormecida para no conmoverse con la belleza intrínseca del poema XX, que trasciende las modas.
Si Neruda hubiera abandonado la poesía a los diecinueve años, al igual que Rimbaud, este poema le habría asegurado un lugar en la posteridad"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . JUAN CRISTÓBAL ROMERO `` Pensó y dijo Neruda cosas muy equivocadas. Ese abuso que él mismo confesó en `Confieso que he vivido' es abominable. Y así nos lo hace sentir, arrepentido.
Pero nada que haya hecho o dicho logra manchar la grandeza de su poesía"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . ARTURO FONTAINE `` Cualquier devaluación que no tome en cuenta la dimensión material y artística de la obra nerudiana cae en un error imperdonable: juzgar una obra literaria, a espaldas de su naturaleza, como si fuera un texto referencial cuyos presupuestos morales o éticos lo vuelven vulnerable a la censura, la funa y la cancelación"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . RAFAEL RUBIO `` Aún hoy no existe, en esta categoría, un libro de amor más desesperado, más sediento y húmedo que los `20 poemas de amor', y eso lo instala muy cerca de la experiencia del lector de cualquier época.
Estamos frente a un clásico de la poesía"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . VERÓNICA JIMÉNEZ `` Lo importante para valorar la obra de un poeta no es el contenido ideológico de sus textos, sino el uso novedoso y original del lenguaje.
Y allí la vigencia de cualquier libro de Neruda sigue siendo innegable y se resiste a lecturas lineales que quieren ver en el `me gustas cuando callas porque estás como ausente' un silenciamiento u obliteración de la voz de la mujer"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . ANTONIA TORRES FUNDACIÓN PABLO NERUDA Albertina Azócar fue una de las mujeres que inspiró los poemas amorosos de Neruda. La primera edición de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada" la publicó Editorial Nascimento en 1924. FUNDACIÓN PABLO NERUDA "Los poemas no son discursos, quizá valga la pena decirlo una vez más". (V.
Jiménez) Una imagen de la versión manuscrita del poema 15, en que aparece el célebre verso "me gustas cuando callas porque estás como ausente". Pablo Neruda tenía 19 años cuando publicó los "Veinte poemas... ", libro que en el año 1961 llegó a vender un millón de copias. Luego, se le ha perdido el rastro a la cifra de ventas..