Por qué las personas mayores sienten que los días son más cortos
Investigación que lo explica fue realizada por Adrian Bejan en la Duke University, Estados Unidos Por qué las personas mayores sienten que los dias son más cortos "Que la velocidad con que procesamos imágenes sea más lenta no quiere decir que ocurra de peor manera”, asegura el neurólogo Rodrigo Santibáñez JOAQUÍN ABUD n estudio realizado por el investigador rumano-estadounidense, Adrian Bejan en la Duke University, en EE.UU., revela la razón por la que los días y años pasan más rápido a medida que vamos envejeciendo. ¿La respuesta? El tiempo medible por reloj no es el mismo que el tiempo percibido por la mente humana, según dice la investigación. La teoría fue publicada en la revista European Review (puede revisar más detalles del estudio en el siguiente link: bit. Ly/20qk3Xr). “La mente humana siente que el tiempo cambia cuando las imágenes percibidas cambian.
Si sus días parecieron durar más en la juventud, fue porque la mente joven recibe más imágenes en un día que la misma mente en la vejez”, explicó Adrian Bejan a LUN desde Durham, en Carolina del Norte. Además, la investigación afirma que este fenómeno se da por la velocidad de procesamiento que tiene el cerebro en las distintas etapas de la vida.
La velocidad de procesamiento “tiene que ver con que las neuronas analizan variables y dan una respuesta”, según explica Rodrigo Santibáñez, neurólogo de la Universidad Católica, quien aclara que es un fenómeno muy dinámico y que en personas jóvenes es más rápido.
Sin embargo, que la velocidad con que procesamos imágenes sea más lenta no quiere decir que ocurra de peor manera”. Para explicar mejor el fenómeno de que los días parezcan pasar más rápido cuando envejecemos, el estudio señala que "los días que se nos pasan más lento suelen estar llenos de productividad: cuando este termina hay una serie de eventos y recuerdos sobre lo que ocurrió durante todo el día”. Maduración neuronal El estudio de Bejan atribuye este fenómeno a los cambios físicos que se dan en el envejecimiento del cuerpo humano, ya que las redes neuronales maduran, crecen en tamaño y complejidad, lo que lleva a caminos más largos para que las señales crucen.
Por su parte, Rodrigo Santibáñez explica que "más que crecer en tamaño, lo que ocurre es que las conexiones neuronales son plásticas, por lo que, cuando uno aprende un nuevo proceso cognitivo, el cerebro genera nuevas sinapsis”. El neurólogo añade que “hay un momento de la vida donde existen muchas sinapsis y, a medida que vamos refinando habilidades, se van eliminando las conexiones sobrantes en lo que se llama una 'poda sináptica.
Por esto, nos vamos quedando con redes más maduras”. Bebés procesan más rápido El estudio de la Duke University explica que la velocidad con la que se adquieren y procesan nuevas imágenes se puede evidenciar con la frecuencia con la que se mueven los ojos de los bebés en comparación con un adulto: Como los bebés procesan las imágenes más rápido, sus ojos se mueven más, por lo que adquieren e integran más información”, señala el estudio. Sobre esto, Santibáñez explica que “el momento en el que el cerebro es más dinámico es en el periodo de lactancia, porque el cerebro es muy plástico. Incluso, si un bebé sufre una lesión cerebral no es mayor problema, ya que otras áreas pueden asumir la función faltante.
En el fondo, el cerebro se va adaptando y madurando con el tiempo”. Cerebral a los Bejan sostiene que otro de los factores por el que se da este fenómeno tiene que ver con que las conexiones cerebrales van envejeciendo. "El envejecimiento cerebral comienza a los 40 años, hay una disminución del número de neuronas cerebrales y está determinado genéticamente”, apunta Ada Chicharro, neuróloga de la Clínica Alemana. “Cuando uno envejece, se da un cierto grado de pérdida de la función neuronal, por lo que las redes se hacen menos eficientes e, incluso, hay muerte neuronal”, suma Santibáñez.
Sin embargo, la edad no es el único factor que provoca que nuestros cerebros procesen la información de forma más lenta y menos eficiente, ya que “hay casos más extremos en que el envejecimiento se da por enfermedades genéticas, que pueden ocurrir también cuando uno aún es joven”, comenta Santibáñez.
Otro factor que afecta alas neuronas tiene que ver con el cuidado de nuestra salud, el doctor de la PUC dice que “el consumo excesivo de alcohol, el consumo de tabaco, la mala alimentación y el sedentarismo, que son cosas que podemos cambiar, pueden deteriorar las neuronas.
En el fondo, muchos factores que afectan la salud cardiovascular, también pueden afectar el funcionamiento del cerebro”. Respecto del consumo de alcohol, Ada Chicharro aclara que "si tomas mucho, eso provoca atrofia del cerebro, que hace que el volumen de este disminuya”.