Matías Walker: “Matthei apostó por el centro en un momento difícil de su candidatura”
Matías Walker: “Matthei apostó por el centro en un momento difícil de su candidatura” El vicepresidente de Demócratas afirma que el triunfo de Jeannette Jara en la primaria oficialista hizo inevitable que su partido apoyara a Evelyn Matthei.
Asegura que la exministra puede pasar a la segunda vuelta, y advierte: "Nuestro acuerdo con Chile Vamos es en torno a ella y no incluye en caso alguno un apoyo a Kast en segunda vuelta". Por M. Eugenia Fernández G.
Matías Walker: "Matthei apostó por el centro en un momento difícil de su candidatura" No soy quién para decirle al presidente Frei lo que tiene que hacer, pero creo que a buen entendedor, pocas palabras: creo que indirectamente le entregó su apoyo a Evelyn Matthei". Así explica el senador Matías Walker la dura intervención del exmandatario, quien hace dos semanas -y ante la definición de la Democracia Cristiana de respaldar a la comunista Jeannette Jaraaseguró que la tienda "tomó una decisión que traiciona los principios que lo formaron y renuncia al espíritu del humanismo cristiano, solo con fines electorales (... ) Este es un camino que no comparto en absoluto y que no voy a seguir". En un nuevo paso para el senador -desde que en 2022 rompió con la Democracia Cristiana junto a Ximena Rincón y otras figuras a propósito del rechazo a la nueva Constitución-, el acuerdo que la tienda abrochó con la coalición que agrupa a la UDI, RN y Evópoli lo tiene ahora jugado por Matthei.
Dice que esta confluencia se fue gestando desde hace 3 años, después de que optaran por el Rechazo. "Luego hubo un viaje a Alemania que fue bastante simbólico, que hicimos invifue bastante simbólico, que hicimos invitados por la Fundación Konrad Adenauer con Ximena Rincón, Rodrigo Galilea, Andrea Balladares, Andrés Jouannet, Jaime Aberdrapo, para conocer la experiencia de Alemania, donde en ese momento la Democracia Cristiana alemana no era gobierno, era oposición.
La CDU allá es un partido de centroderecha, ganaron las elecciones, y formaron gobierno con la socialdemocracia alemana, excluyendo a la extrema derecha, el AfD", recuerda. "Yo me convencí de que Chile Vamos se había acercado hacia el centro por el rol que jugó en el acuerdo de pensiones. Esto fue una muestra de gobernabilidad y de tener los intereses del país por delante", agrega.
Aunque afirma que ese entendimiento con Chile Vamos "es en torno a Matthei y no incluye en caso alguno un apoyo a José Antonio Kast en segunda vuelta". ¿Este acuerdo entre Chile Vamos y Demócratas se trata de una nueva coalición? No necesariamente. Una coalición tiene por propósito una permanencia en el tiempo. Por ahora, lo que nos une es una candidata presidencial, una lista parlamentaria, un acuerdo de gobernabilidad para los próximos cuatro años.
Acá se va haciendo camino al andar, pero en la medida en que esto se mantenga alejado de los extremos, esto se mantenga alejado de los extremos, nos vamos a sentir muy invitados a seguir participando en esta coalición. ¿A qué se refiere con un acuerdo de gobernabilidad por los próximos cuatro años? Básicamente lo que dice relación con el acuerdo programático y los vasos comunicantes que hemos encontrado entre ambas propuestas programáticas.
Yo espero que el entendimiento entre el centro y la centroderecha de que da cuenta este nuevo pacto Chile Grande y Unido, que es un nombre que concordamos y que nos identifica mucho, pueda tener proyección en el tiempo. Esto recuerda a Piñera, que siempre aspiró a unir al centro con la centroderecha. El presidente Piñera fue un visionario. En ese momento (el 2010) era más difícil porque Piñera le había ganado al presidente Frei, que representaba la Concertación.
Una de las grandes discrepancias que teníamos con Chile Vamos en ese entonces era la tesis del desalojo... yo destaco que Chile Vamos haya terminado valorando los 30 años, pero no olvidamos que su tesis fue el desalojo de la Concertación, que a nuestro juicio fue el mejor periodo de la historia de Chile.
Efectivamente el presidente Piñera fue el primero en vislumbrar que había una posibilidad, y por eso él en su había una posibilidad, y por eso él en su momento convocó a figuras de la ex-Concertación a formar su primer gobierno.
Planteado de otra forma: ¿ este acuerdo con Chile Vamos marca un punto sin retorno tras dejar la centroizquierda? Va a depender de cuán lejos de los extremos se mantenga este polo de unidad entre el centro y la centroderecha, este pacto Chile Grande y Unido. En la medida en que estemos lejos de los extremos, va a poder tener trascendencia. ¿Ve una tentación o un riesgo de que Chile Vamos gire hacia la derecha durante la campaña? Sería un error.
Creo que Evelyn Matthei entendió, y el acuerdo con Demócratas así lo demuestra, que la única posibilidad presidencial es hablarle a un electorado de centro y de centroizquierda que quedó huérfano de representación con la derrota de Carolina Tohá en las primarias oficialistas. ¿No temen que en el tránsito de la campaña a Matthei no le quede más que mirar hacia la derecha? Sería un error, porque ya ese electorado está copado con dos candidatos que están a su derecha: José Antonio Kast y Johannes Kaiser. La única manera de garantizar el paso a la segunda vuelta y el triunfo de la elección presidencial es hablarle a un electorado de centro que, según la encuesta CEP, está más vivo que nunca. Creemos que hay un sector ahí que va a definir la próxima elección y que Matthei ha entendido muy bien que es con ese sector que puede pasar a segunda vuelta y ganar la presidencial.
Eso provoca incomodidades en las bases de Chile Vamos, que son de derecha. ¿Cómo Matthei logra moverse por esa delgada línea entre dar señales al centro y no abandonar sus bases? Conozco mucho a Evelyn Matthei, desde que fue senadora en la región de Coquimbo, y siempre con acuerdos y disensos me ha llamado la atención su carácter, su determinación. Una muestra clara de ello es la carta a Sebastián Edwards, en que ella claramente reconoce un error.
Un poco tarde llegó la carta, ¿no? Lo hizo en un momento que era muy importante, antes de que -desde luego el centro se sumara a su campaña, pero sobre todo hablándole a un electorado de centro que está abierto a votar por ella, pero que se sintió incómodo con sus declaraciones respecto del golpe y lo que ocurrió en los años '73 y "74. Pero ella demostró mucho carácter y determinación, pero a su vez flexibilidad y espíritu crítico en esa carta de respuesta a Sebastián Edwards. Me recordó al presidente Piñera cuando habló de los cómplices pasivos y cerró el penal Cordillera. Pero ella planteó algo que va en sentido contrario. Habló de que hubo muertes inevitables para el 73.
Pero reconoció que sus palabras se habían prestado a confusión y quiso reiterar que la democracia es un valor absoluto, reafirmó el valor universal de los derechos humanos, y además con un espíritu autocrítico que habla muy bien de ella. ¿Y cree que es una convicción o un tema. Matías Walker: “Matthei apostó por el centro en un momento difícil de su candidatura” que salió a aclarar por motivos electorales? Lo he hablado personalmente con ella y creo que es una convicción. Evelyn Matthei es una mujer que ha desarrollado su carrera política y ha ganado elecciones en democracia y es hija del general que reconoció el triunfo del No la noche del 5 de octubre.
Y eso tiene mucho valor. ¿Declaraciones como las de Juan Sutil, respecto de que para él el régimen de Pinochet no fue una dictadura, los alejan de la campaña? Fueron un profundo error esas declaraciones, le hicieron daño a la candidatura, pero creo que fue muy importante la reacción de Matthei ratificando su compromiso con la democracia, con los derechos humanos. El candidato no es Juan Sutil, la candidata es Evelyn Matthei.
Pinochet fue un dictador, su gobierno fue una dictadura y si no se perpetuó en el poder fue gracias a generales como Fernando Matthei, que regenerales como Fernando Matthei, que reconocieron el triunfo del No. "Kast desconfía de las libertades individuales" Matthei enfrenta un panorama difícil.
Está en el tercer lugar de las encuestas, figuras importantes de su campaña han reconocido un desgaste. ¿Cree que puede dar vuelta la elección? Creo que con la incorporación de Demócratas y un nuevo aire en la campaña su fuerte van a ser los debates televisados; ahí se va a mostrar toda la capacidad y la diferencia de preparación que tiene con el resto de los candidatos. El escenario está absolutamente abierto, muy líquido. Hay que ver cómo ha variado el electorado en estos meses. En un momento Tohá tuvo un auge importante en las encuestas y después una caída. Kaiser, todos apostaban en algún momento a que iba a sobrepasar a Kast y finalmente no ocurrió, la propia Jeannette Jara ha tenido una caída.
Obviamente a Matthei le afectó no haber estado en una primaria porque perdió visibilidad, pero eso estoy seguro de que lo va a recuperar en estos tres meses porque tiene la capacidad, tiene las propuestas programáticas, tiene la seriedad y la credibilidad para llegar a un electorado que está dispuesto a votar por ella.
Y que bajo el esquema de voto obligatorio particularmente puede definir la próxima elección presidencial. ¿Habrían podido respaldar a otro candidato que no hubiera sido Matthei dentro de Chile Vamos? ¿ Cuánto de este respaldo tiene que ver con que es ella la candidata? La persona de Matthei nos da mucha confianza porque ella apostó por el centro en un momento difícil de su candidatura, dijo públicamente que se sentía muy cómoda con figuras como José Pablo Arellano o René Cortázar, que son economistas que ella conoce hace mucho tiempo, con los cuales siempre ha señalado que puede los cuales siempre ha señalado que puede los cuales siempre ha señalado que puede trabajar en conjunto. Era importante esperar el resultado de las primarias, porque probablemente si Tohá hubiese ganado las primarias, era natural que sectores del centro y la centroizquierda hubiesen podido votar por ella. Obviamente esto no es un cheque en blanco a Chile Vamos. Estamos formando una nueva coalición que se llama Chile Grande y Unido, que es la suma de Chile Vamos más Demócratas, pero que no significa de modo alguno que hayamos ingresado a Chile Vamos.
Nosotros seguimos con nuestro domicilio en el centro. ¿El triunfo de Jara hizo inevitable apoyar a Matthei? Por supuesto, y no solamente a nosotros, sino que a todo un electorado de centro, de centroizquierda, que está huérfano de representación y que no quiere votar por los extremos. Yo no voy a votar por los extremos. ¿Si Matthei no gana la primera vuelta, cómo se pararían ante la candidatura de Kast, que parece tener la primera opción? Yo hablo por mí.
La posición que yo voy a defender dentro de Demócratas es que en ese evento -que espero que no se dé, espero y confío que Matthei llegue a la segunda vuelta-, no soy partidario de votar por ninguno de los dos extremos, ni por el candidato republicano ni por la candidata del Partido Comunista. ¿Son proyectos igual de malos? Me parece que todos los extremos son malos para Chile y para el mundo. ¿Y qué es lo que más lo aleja de José Antonio Kast? El también estuvo por el Rechazo... José Antonio Kast desconfía de las libertades individuales. Tuvimos públicas discrepancias, por ejemplo, en el trámite de la ley de identidad de género, del matrimonio igualitario. Yo soy parte de un centro progresista que cree en las libertades individuales. Kast no. Él ha dicho que los temas valóricos no van a ser temas de su gobierno ni de su campaña. Es que es muy difícil que Kast se desacople de sus posturas del pasado.
Es muy fácil decir ahora, como candidato presidencial, "no me voy a referir a temas valóricos", pero es cosa de ver sus votaciones en el pasado para saber lo que realmente piensa en materia de libertad individual.
De pasar Kast a segunda vuelta, lo más probable es que Chile Vamos lo apoye. ¿Esa situación no le incomoda? A mí lo que me acomoda es pasar a segunda vuelta con Evelyn Matthei, y nuestro acuerdo con Chile Vamos es en torno a ella y no incluye en caso alguno un apoyo a Kast en segunda vuelta. Matthei es un cambio con gobernabilidad.
Es un cambio con la gobernabilidad de sumar al centro, no solamente sumar a parlamentarios del centro, sino que a todo un mundo político y social que se siente identificado con el centro político, probablemente que está muy presente en las pymes, en los gremios, en el mundo sindical. Este pacto Chile Grande y Unido va más allá de un acuerdo político y le da una base política social muy amplia a Matthei para poder gobernar. O.