CARTAS: Relaciones tóxicas
Relaciones tóxicas? Señor Director: Hablar de “relaciones tóxicas” se ha vuelto común, pero este término, más popular que técnico, puede simplificar algo mucho más complejo. Cuando decimos que una relación nos hace mal, solemos ponerel problema afuera, notuviera que vercon nosotros. Sin embargo, todo vínculo involucra nuestras propias heridas, historias y modos de amar. Muchas veces, sin darnos cuenta, repetimos patrones aprendidos en la infancia: esforzarnos para ser vistos, adaptarnos para ser queridos, callar para no incomodar. Y así, en la adultez, buscamos vínculos donde seguimos luchando por un lugar. No siempre hay violencia explícita, pero síun dolor que se instala y se repite. Estas relaciones duelen porque dejamos de mirarnos como personas y empezamos a tratarnos como objetos de necesidades no resueltas. En lugar de encuentro, aparece la exigencia. En lugar de escucha, la defensa. Salir de ahí implica renunciar a lo familiar, aunque nos haga daño. Y eso duele. Abre la posibilidad deconstruiralgo distinto. Notodo vínculo se vuelve sombra. Algunas relaciones reparan, alivian, nos recuerdan quiénes somos. Aveces, la psicoterapia puedeser ese primerespacio de cuidado psíquico aentender mos como amamos. Reconocer noes culparse. Esempezar aver. Y desde ahí, tal vez, sanar. Claudia Szita Académica Escuela de Psicología UNAB