Economía nocturna se abre paso en la agenda para dinamizar el consumo y empleo
Economía nocturna se abre paso en la agenda para dinamizar el consumo y empleo Festivales como Creamfields de música electrónica son una muestra de la articulación sectorial, no solo de día, también de noche. ERIC PRYDZ L a economía nocturna o nighttime economy se está consolidando como una estrategia urbana clave en muchas ciudades globales. Esta consiste en promover y apoyar las actividades económicas, culturales y sociales que se desarrollan entre las 18:00 y las 6:00 horas, y reconceptualizarlas como motores de crecimiento económico, identidad cultural y cohesión social. Lo anterior considera una amplia diversidad de actividades: restaurantes, bares, teatros, música en vivo, transporte, turismo, festivales, trabajos nocturnos y más. Estas no solo generan empleo y recaudación fiscal, sino que también construyen identidad cultural, dinamizan los espacios urbanos y fortalecen el sentido de comunidad, coinciden actores de esos rubros. Por eso, en Chile la tendencia está siendo abordada e impulsada desde distintas aristas, sobre todo porque la pandemia las afectó seriamente y les ha costado retomar sus operaciones.
A esto se suman los mayores costos laborales por las reformas y el problema de la delincuencia e inseguridad que inhibe las salidas de noche de las personas. "La principal oportunidad de una ciudad es que gran parte de las industrias creativas se desarrollan justamente en horarios vespertinos, como el cine, teatro, música electrónica, entre otras, que funcionan y activan a la ciudad de noche", dice Mauricio Cifuentes, gerente de Chilecreativo, alianza público-privada que busca potenciar las industrias creativas como motor de desarrollo. Y entre su hoja de ruta se incorporó la noche como un eje central, para lo cual se conformó un comité gestor con distintos agentes. Una temática que ya ha sido abordada por grandes ciudades del mundo como Nueva York, Berlín, Londres, Bogotá y Buenos Aires. A modo de ejemplo, la economía nocturna del Reino Unido genera US$ 85.000 millones anuales, lo que la convierte en la quinta industria más grande.
En ese marco, Cifuentes adelanta que están trabajando en un plan piloto en Santiago, con el fin de implementar modelos que armonicen esta actividad con el entorno desde locales hasta actores gremiales y municipales y comunidades.
La mirada sectorial Desde las artes, las salas de teatro son un agente dinamizador de la actividad nocturna al estar permanent e m e n t e c o n v o c a n d o p ú b l i c o s, quienes muchas veces están dispuestos a complementar la experiencia teatral con otras actividades como restoranes, bares o cafés, señalan desde la Asociación Gremial Red Salas de Teatro Metropolitana. En ese sentido, comentan que una ciudad que tiene una oferta integral con propuestas diversas se presenta "indudablemente" como un destino más atractivo.
Una muestra cercana --y que podría ser replicable-es Buenos Aires: "El conocido circuito de Corrientes con una intensa oferta teatral y gastronómica, más el circuito de teatros alternativos, son un claro ejemplo de cómo los teatros pueden convertirse en un agente clave en la dinamización de la actividad nocturna de las ciudades". Y en esa misma línea, destacan que la circulación de público haciendo uso de la infraestructura urbana y turística ayuda, además, a generar ciudades más seguras.
Por el lado de la música electrónica, la presidenta del gremio, Pía Sotomayor, coincide en la relevancia de la conversación, porque a su juicio no se están viendo las oportunidades que ofrece. "En rigor, no es solo una cantidad de horas, sino que es un espacio de tiempo que cubre desde que las personas salen de su trabajo y pueden vincularse a la cultura, el ocio, o simplemente a sociabilizar. También hay un beneficio que nadie está viendo, y es que estamos dejando de ganar mucho dinero, porque no estamos fomentando una vida nocturna segura, regularizada y organizada. Es, además, la imagen de un país y atrae a los turistas", dice la presidenta de IME Chile. Una mirada similar tiene la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga). "La noche está complicada, los restaurantes están cerrando muy temprano sus cocinas, sobre todo por el tema de inseguridad. Hoy el tema de la inseguridad es lo que más atenta contra la actividad nocturna, no solo para los clientes, sino también para los trabajadores", afirma el presidente del gremio, Máximo Picallo. Agrega que este sector representa unos 350 mil empleos. En cuanto a las ventas, sostiene que los rangos son variados, dependiendo de la vocación del restaurante. En todo caso, sí hay algo claro, y es que el margen de la noche es mejor que lo que se vende al almuerzo. Focos y pilotos Entre expertos hay coincidencia en la necesidad de abordar de forma conjunta este desafío, ya sea entre los mismos sectores como también a nivel de políticas públicas. Aquí es donde surge la figura de los llamados "alcaldes nocturnos" o departamentos dedicados específicamente a promover, gestionar y mejorar la oferta económica nocturna. Este debiera ser una persona que una los intereses privados y públicos, con independencia para poder gestionar y fiscalizar las actividades. La generación de circuitos que ofrezcan servicios de apoyo como estacionamientos regulados, iluminación, ciclovías, horarios del transporte acordes, es para la red de salas de teatro algo fundamental. El punto que refuerza Picallo es el transporte, sobre todo la posibilidad de extender el horario del metro, al menos los fines de semana.
A esto agrega la modernización de la ley de alcoholes: "En Chile falta entender que la actividad u ocio nocturno genera una cantidad importante de puestos de trabajo". Y por eso insiste: "Lo primero que necesitamos es seguridad.
Sin esta, nada funciona". Economía nocturna se abre paso en la agenda para dinamizar el consumo y empleo MARISA COMINETTI TEATRO, GASTRONOMÍA Y MÚSICA SON PARTE DE LA AMPLIA OFERTA Impulsar las diversas actividades comerciales que se desarrollan en la ciudad después de las 18:00 horas es el foco de esta tendencia que ya ha sido abordada por grandes ciudades como Berlín, Nueva York, Bogotá y Buenos Aires. Ahora también se trabaja en Chile..