Teatro Regional
Teatro Regional Después de años de promesas incumplidas, el gobernador Cristóbal Juliá anunció en su cuenta pública la concreción del tan anhelado Teatro Regional de Coquimbo. Un proyecto, con una inversión que podría superar los 20 mil millones de pesos, integrado a un parque urbano de primer nivel en el corazón de La Serena. Pero la euforia inicial choca con una pregunta incómoda: ¿ será esta vez la definitiva, o solo otro capítulo en la larga saga de frustraciones? El diagnóstico es conocido. Desde el diseño original de 2012, esta obra ha sido un fantasma en el presupuesto regional: presente en los discursos, ausente en la realidad. El anuncio de actualizar los planos a inicios de 2025 para licitar en el segundo semestre suena ambicioso, pero también familiar. La región lleva demasiado tiempo esperando un espacio cultural a la altura de su identidad.
No se trata solo de un edificio para óperas o sinfónicas, sino de un polo cultural vivo: una “placa de cubierta” que será extensión del espacio público, un parque que atraiga a las familias, un escenario para lo docto y lo urbano. Este enfoque inclusivo es clave en una región donde el patrimonio inmaterial desde las culturas diaguitas hasta los cantores campesinos exige reconocimiento. El verdadero desafío está en el modelo de gestión. Durante años, la pelea burocrática sobre quién administraría el teatro el GORE, el municipio o el Ministerio de Cultura paralizó el proyecto. Que hoy el Gobierno Regional asuma ese rol, inspirándose en el exitoso Teatro del Biobío, es un avance crucial. Pero exige transparencia absoluta y expertise técnica que aún debe demostrarse.. El anuncio de actualizar los planos a inicios de 2025 para licitar en el segundo semestre suena ambicioso, pero también familiar. La región lleva demasiado tiempo esperando un espacio cultural a la altura de su identidad.