Autor: MÓNICA RETAMAL
FORMACIÓN FLEXIBLE Y MIGRACIÓN ESTRATÉGICA: LO QUE CHILE PUEDE APRENDER DE ESPAÑA Y SU DECRETO REAL 659
FORMACIÓN FLEXIBLE Y MIGRACIÓN ESTRATÉGICA: LO QUE CHILE PUEDE APRENDER DE ESPAÑA Y SU DECRETO REAL 659 Análisis La Unión Europea enfrenta altos niveles de desempleo juvenil, mientras miles de vacantes permanecen sin cubrir en sectores como salud, logística y tecnología. En este contexto, España ha dado un paso audaz con el Real Decreto 659/2023 al reformular su sistema de formación y vincularlo directamente con la política migratoria.
Esto busca resolver el desajuste entre oferta y demanda laboral, así como el envejecimiento poblacional, a través de un enfoque flexible que reconoce competencias adquiridas por la experiencia laboral o el aprendizaje informal y que permite cualificarse o recualificarse a lo largo de la vida.
La nueva Ley de Extranjería (entra en vigencia en mayo) incorpora además la figura de arraigo socioformativo permitiendo así regularizar la situación de inmigrantes a través de su formación en áreas alineadas con las necesidades del mercado laboral español.
Esta medida que ya representa el 11% de las regularizaciones en el país (Observatorio CaixaBank Dualiza, 2024) abre la puerta a que centros de formación españoles se asocien con instituciones extranjeras para formar “en origen” a potenciales migrantes, mediante programas de doble titulación y validación internacional. Es así como una persona puede estudiar Ingeniería Informática en Perú y obtener una visa de trabajo española una vez egresado.
La población global en edad laboral hoy se distribuye equitativamente entre países de ingresos bajos y altos, pero en las próximas dos décadas Latinoamérica y África tendrán un 50% más de personas en edad de trabajar que los países de ingresos altos (WEF, 2024). Por otro lado, en el Chile de 2050 habrá tres veces más personas mayores de 60 años que menores de 14 (INE), por lo que se vuelve urgente modernizar el sistema de formación generando condiciones que realmente sintonicen con las cambiantes demandas del mercado laboral y faciliten que las personas puedan cambiar sus trayectorias laborales las veces que sea necesario, previo reconocimiento de competencias y estudios anteriores, además de promover carreras más cortas, pertinentes y mejor articuladas entre sí.
Mientras miles de jóvenes chilenos optan por estudiar y trabajar en España (INE España, 2025), también empresarios como Rodrigo Poblete han visualizado la oportunidad que este decreto trae adaptando su oferta educativa a las exigencias del sistema europeo. Para él, estándares como las microcredenciales laborales serán una herramienta fundamental para validar habilidades específicas e impulsar la formación constante a lo largo de la vida.
El modelo español ofrece un ejemplo posible para Chile aportando flexibilidad, pertinencia y un cambio de mirada sobre la migración, que ahora se vuelve una palanca estratégica del desarrollo económico planificado y que asume que el talento es hoy un recurso global, móvil y crítico, por lo que los países deben generar condiciones habilitantes para no perderlo..