Editorial: Ciudades amigables con los adultos mayores
Editorial: Ciudades amigables con los adultos mayores a esperanza de vida al nacer en Chile el año 1950 era de 54,8 años, pero hoy es de alrededor de 83 años para las mujeres y casi 80 para los hombres. Los adultos mayores suman ya más de tres millones de personas y se calcula que representen cerca de un 20% de la población, lo que plantea una serie de desafios. Esto ha generado la necesidad de que las ciudades creen las condiciones para que ese segmento envejezca en ambientes más saludables, más cómodos y acordes a ese segmento de la población. En definitiva, que las ciudades sean más amistosas con la vejez. En 2007 la Organización Mundial de la Salud creó la Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores. Esta es una instancia que actualmente reúne a más de quinientas urbes del mundo, luego de que hayan cumplido una serie derequisitos y compromisos.
La realidad de muchos adultos mayores es en algunos casos dramática y pone derelieve no sólo la indefensión en la quese pueden encontrar, sino quelo ineficiente que puede ser el sistema al brindar una vejez digna a la tercera edad, un aspecto no menor, en un Chile que tiende aser “más viejo”. Esto lleva a la reflexión respecto a las condiciones en quese desenvolverán. Nose trata solo de las condiciones que da el sistema previsional o el Estado con lajubilación.
Está también la manera cómo el costo de la vida puede ser duro con personas que habiendo dedicado toda una vida a trabajar, tengan que terminar sus días en condiciones deprimidas, muchas veces sin poder enfrentar los gastos básicos en salud. Nuestra sociedad debe orientarse a una cultura que valore, respete y salvaguarde a sus adultos mayores, y con ciudades más amigables para ellos. Hacía allá se debe avanzar de manera decidida.
Nuestra sociedad debe orientarse a una cultura que valore, respete y salvaguarde a sus adultos mayores.. Las urbes deben contar con la infraestructura y los servicios que permitan una buena calidad de vida a este segmento etario. El Editorial