Nose puede optimizar sin opciones reales
Nose puede optimizar sin opciones reales Oo Columna Juan Pablo Cerda 'TECO Group Nose puede optimizar sin opciones reales oportunidad perdida; que se debió licitar y aspirar a más. 'Suena bien en titulares, pero no refleja la realidad del Salar de Atacama. Opino desde mi experiencia territorial, con totalindependencia delosintereses involucrados en la discusión. La licitación es en teoría el mecanismo ideal: transparente y competitivo. Y asíse ha hecho en otros salares. Pero este no es un caso común. El Salar de Atacama no es un terreno neutro disponible para cualquiera.
Es un ecosistema S: ha dicho que el acuerdo entre Codelco y SQM es una "SQM tiene algo complejo, donde operar a que hoy nadie más gran escala exige relacioz nes, experiencia y conociposee: décadas de miento territorial, cosas presencia, vínculos quenoseimprovisan. cn Con todos los cuestiocomunitarios, namientos quese le pueda aprendizaje sobre hacer, SQMtienealgo que A hoy nadiemás posee: décacómo moverse en das de presencia, vínculos este territorio". comunitarios, aprendizaje -muchas veces desde el error-sobre cómo moverse enesteterritorio. Sabe dónde estánlos límites, las sensibilidades, los actores clave. Mantiene relaciones que permiten que la operación funcione incluso en estos tiempos convulsos de la Consulta Indígena). SQM hainvertido nosolo eninfraestructura, sino en algo mucho más dificil de construir: viabilidad social. Con sus luces y sombras, ha aprendido a navegar ese ecosistema y mantenerlo consuficienteestabilidad. Esa es unainfraestructura invisible, pero crítica. Ningún actor, por grande quesea, puede instalarse enel Salarsin ese tipo de base social. Nadie. Nisiquiera el Estado. En el futuro podrá haber más competencia (ojalá! ), pero hoy, solo SQM puede demostrar que sabecómo extraer el 80% dellitio del salar. Creer queotro actor oel Estado podría entrar por licitacióna esa escala de producción, sin curva de aprendizaje ni base social, es desconocer lo esencial: sin saber territorial acumulado, no hay operación posible. Además, cualquier discusión seriasobre el futuro del Salar debe considerar la gobernanza indígena y de varios otros actores igual de relevantes como un eje estructural.
Hoy, la continuidad operativa depende no solo de permisos ambientales o capital financiero, sino de la comprensión y la colaboración de comunidades que han exigido -habrá que ver con cuánto mérito-, mayor participación, respeto y beneficios concretos. En ese plano, tener una operación que ya convive con esas complejidades y ha aprendido a gestionarlas no es irrelevante. Ensuma:no hubo alternativareal. Una licitación habría implicado partir de cero, depostergar una nueva RCA por una década y perderla oportunidad deentrar antes de 2031. Para entonces, ellitio podría haber perdido valor estratégico. ¿Es este un acuerdo perfecto? Probablemente no. ¿Es có: modo? Tampoco. Pero es lo único viable. Licitar habría sido simbólico, impugnado o sin oferentes. Y eso sí era una pérdida: tiempo, posicionamiento y presencia país. En este caso, lo ideal no estaba disponible. Solo lo posible. Y eso fue lo que, considero que con realismo, se eligió..