Autor: Cristián Reitze Campos
Motocicleta: una aliada estratégica aún no reconocida
E En medio de la crisis de movilidad urbana y el auge del trabajo informal, hay un protagonista silencioso que recorre cada día las calles de Chile: la motocicleta. Herramienta esencial para miles técnicos, emprendedores y trabajadores independientes-, la moto ha sido clave para sortear las barreras del transporte público, adaptarse a horarios flexibles y generar ingresos en un contexto económico incierto. Sin embargo, sigue sin ser reconocida como un medio de transporte laboral estratégico. Lejos de ser un lujo o un pasatiempo, la motocicleta representa para muchos una vía concreta de movilidad social y de sustento económico.
Acorta tiempos de traslado, amplía el alcance territorial del trabajo y permite una mayor autonomía laboral, A pesar de su impacto, las políticas públicas siguen dándole la espalda: no hay incentivos, ni subsidios, ni una estrategia nacional que promueva su uso de manera segura, formal y eficiente. Lo que hay son estigmas, restricciones y normas que no se ajustan a la realidad. Urge un cambio de enfoque.
Incorporar la motocicleta alos planes de movilidad urbana, mejorar la infraestructura vial, ofrecer formación técnica y lanzar campañas informativas son pasos indispensables para construir una política más moderna, inclusiva y coherente con las necesidades del país. Reconocer el valor de la motocieleta no es solo un acto de justicia; es una decisión estratégica. Porque detrás de cada moto hay una historia de esfuerzo, trabajo y resiliencia que merece apoyo, no marginación.