Ciudades inteligentes y resilientes: un pacto con el futuro y la sostenibilidad
Ciudades inteligentes y resilientes: un pacto con el futuro y la sostenibilidad www.clarochile.cl/empresas Claro empresas Ciudades inteligentes y resilientes: un pacto con el futuro y la sostenibilidad y la sostenibilidad H acia el 2050, más del 70% de la población mundial vivirá en entornos urbanos. Así se plantea en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas. Este dato plantea una presión sin precedentes sobre las ciudades y, a su vez, es una invitación, un desafío: a repensar y rediseñarlas desde sus cimientos. En este contexto, las Smart Cities no son solo un concepto futurista, sino una necesidad urgente. Y en el corazón de esta transformación, la sostenibilidad debe ser su brújula. Hoy, las ciudades enfrentan desafíos complejos, asíse planteó en la Smart City Expo Santiago, evento que convocó a actores del mundo público, privado, la academia y la ciudadanía. Vivimos el cambio climático, escasez hídrica, congestión, inequidad territorial, y una creciente demanda por servicios públicos eficientes. Superarlos exige una nueva forma de entender el desarrollo urbano, donde la conectividad y la inteligencia de los datos se conviertan en aliados de la eficiencia energética, la planificación territorial y el bienestar ciudadano. En este contexto, las telcos, actores estratégicos en este proceso, debemos asumir un rol integrador de tecnología e instituciones: municipios, empresas tecnológicas, universidades y ciudadanía. Se trata de proveer infraestructura crítica, como redes 56, fibra óptica o data centers, y también de nuestra capacidad de articular ecosistemas tecnológicos.
Hoy, la visión, la capacidad de despliegue y experiencia en interoperabilidad son esenciales para construir un ecosistema urbano en el que la conectividad no sea un fin, sino un medio para reducir brechas, mejorar la calidad de vida y mitigar los efectos del cambio climático.
El despliegue de plataformas interoperables, la sensorización de los espacios públicos, la analítica avanzada y los servicios cloud que permiten monitorear en tiempo real el consumo energético, optimizar rutas de transporte, prevenir emergencias, y transformar la gestión de los residuos. Pero esta evolución solo es sostenible si está acompañada de un modelo ético y responsable.
La eficiencia energética en la infraestructura digital, la medición de huella de carbono en cada eslabón de la cadena de valor, la inclusión digital y la gobernanza de datos deben ser parte del diseño de ciudad. Construir ciudades inteligentes es, en esencia, construir un nuevo pacto con el futuro. Uno donde la innovación y la sostenibilidad se entrelacen para que el desarrollo no sea solo un privilegio de algunos, sino un derecho para todos. Y donde la tecnología sea el puente hacia una mejor calidad de vida, no solo un avance técnico..